El Eterno Amor Del Fénix

Para Isabella y Caleb una nueva etapa estaba por iniciar, pero querían hacer muy felices a sus nuevas parejas.

Sabían que un camino difícil estaba por comenzar, pero no se doblegaron ante la posibilidad de quizás no triunfar en este reto que la vida les ponía. Una boda era el comienzo de una vida en pareja.

Comenzaron, por contratar a una planeadora de bodas, era la hija de la chica que planeo la boda de sus papás.

Estaban muy emocionados, sabían, que haría un muy buen trabajo, era muy profesional y todos la conocían como miss happy ending, aún que su nombre real era Cristal.

Un apodo muy apropiado y conveniente para una chica tan dulce y que organizaba las mejores bodas.

Kaleb: Me gusta como está organizando la boda doble, no crees Giselle?

Giselle: Ya lo creo, Isabella está feliz eligió colores suaves pastel como rosa y lila y yo amarillo y azul cielo.

Abel: Vaya!, no sabía que tenían que elegir colores, creí que todo sería blanco.

Isabella: Pues no querido, tenemos que elegir colores y más vestidos de nuestras damas. No elegiremos el modelo pero si el color.

Kaleb: Creí que sería más sencillo de hacer, pero en fin las reinas mandan.

Los tres rieron y mientras comían platicaban sobre la luna de miel, querían cosas diferentes así que Isabella dijo:

Isabella: Opino que cada quien decida a dónde irán les parece?

Isabella y Abel decidieron ir a Michoacán a ver las mariposas Monarca, Kaleb y Gisselle optaron por algo más tradicional, Ixtapa Zihuatanejo en Oaxaca.

Ambos eran destinos distintos, pero llenos de hermosos paisajes y descanso absoluto.

En 1 mes exactamente darían el sí, esperaban a sus amigos más queridos y a las familias de sus parejas.

El amor que sentían se podía palpar en el aire, los matices de cada sentimiento y emoción eran realmente inmensos.

Los días pasaron muy rápido, y las parejas alistaban todos los detalles con Cristal, era un evento muy importante que marcaría, un comienzo en sus vidas.

En tres días sería el magno evento, y ya los últimos toques estaban listos, solo les quedaba una duda, podrían sus padres asistir a tan hermoso evento?

Una noche antes Isabella soñó con sus padres, ellos le dijeron que no se preocuparan, ellos estarían allí no en cuerpo, pero su esencia la sentirían, le darían una señal para que ellos supieran que estaba ahí y que estarían muy orgullosos de sus hijos.

El gran día había llegado, todo está listo, las novias estaban hermosas con sus vestidos de corte princesa en blanco, Isabella lucia un vestido con muchos brillos, y Giselle un vestido del mismo estilo pero con mucho encaje y una gran cola.

Por su parte los novios, Kaleb eligió un traje al color del de su padre solo que en gabardina, y Abel en un traje negro con una rosa en el bolsillo.

Todos se veían hermosos, fueron directo a la ceremonia y al término de la misma Isabella lloro de alegría deseando a sus padres en ese feliz momento, de pronto comenzaron a llover plumas blancas y rojas, señal de que sus padres estaban ahí ambos lloraron de emoción, sabían que no estaban solos.

Todos miraban con sorpresa que llovían las plumas, pero pensaron que los novios habían hecho que alguien las arrojará desde alguna parte.

Lo curioso es que esas plumas eran enormes y no sabían de que tipo de especie de ave las habían sacado.

Los hermanos sonrieron y se abrazaron, miraron al cielo y dijeron:

Isabella, Kaleb: Gracias padres por nunca dejarnos solos, los amamos con el corazón y la vida entera.

La lluvia de plumas ceso y de la nada las plumas se hicieron más pequeñas, ellos pidieron que fueran levantadas y guardadas, se harían cargo más tarde.

De ahí fueron a su recepción, disfrutaron bailaron y comieron su extenso menú de opciones. Disfrutaron como nunca su fiesta de boda.

Al terminar su evento se fueron a sus respectivas lunas de miel.

Fue la mejor noche de bodas, llena de magia y mucha pasión. Sus almas se fundían en 1 sola y el amor fluía por cada poro de la piel.

Así transcurre la semana de la luna de miel, Isabella y Abel regresarían a sus labores y Kaleb y Giselle también volverían.

Una nueva etapa comenzaría, definitivamente era lo más esperado.

Bendición

Todo iba muy bien con el nuevo estilo de vida de estas hermosas parejas, los días pasaban entre buenos, malos, peores, pero siempre juntos, dispuestos a estar en todo juntos, en la salud y en la enfermedad, en la pobreza y riqueza, pero más enamorados que nunca.

Habían pasado 5 meses de la boda y de pronto, ambas comenzaron con antojos y cambios de humor. Fueron a un chequeo al médico,

Giselle e Isabella iban muy preocupadas y el médico le dió la buena nueva, ambas estaban embarazadas y tenían el mismo tiempo de embarazo.

Ambas lloraron de alegría, y emoción, pidieron de favor no saber que serían los bebés.

Querían que fuera una hermosa sorpresa, sabían que era una bendición y la más esperada por los 4.

Esa noche les darían una linda sorpresa a sus esposos con una cena, muy especial.

Organizaron una comida muy distinta a otras, hicieron hamburguesas, papás fritas, hot dogs, pizza y sodas de sabores, de postre un enorme flan y un pastel con una decoración especial en chocolate.

Kaleb: A que se debe todo este menú tan infantil, tienen algo en especial que festejar?.

Gisselle: Querido, disfruta la comida, mi querida cuñada y yo lo hicimos con mucho cariño.

Isabella: Además hermano, no está demás un menú diferente de vez en cuando

Abel: Que traman Isabella, no nos enojamos si volvieron a sobre girar las tarjetas.

Isabella: No cariño, nada de eso, lo de las tarjetas fue error del banco, ya lo hemos platicado.

Giselle: Si coman, además aún falta el postre, y no pueden decir que no he.

Abel: De acuerdo pues comamos este exquisito.menu.

Se sentaron a cenar, con mucho entusiasmo, comieron un poco de todo. Y ya que estuvieron satisfechos comenzaron a platicar y pedirle a las chicas del servicio que trajeran, los postres.

Isabella: Ahora chicos, es hora de cortar el pastel y abrir su cajita de dulces.

Gisselle: Cierren los ojos, listos? Ahora abran la cajita.

Cada caja, contenía una carta muy hermosa con el resultado de una prueba positiva sanguínea de embarazo.

Ellos saltaron de alegría, y abrazaron a sus esposas con mucho amor, se felicitaron unos a otros por tan bella noticia, hasta el personal de la casa estaba feliz, por fin la alegría sería completa.

Esperarían. Con mucho amor a los nuevos miembros de la familia.