V De Venganza

Volvieron a la mansión, Victoria iba en silencio, con su mirada en un punto fijo, y su mente en todo y en nada.

No sabía porque al escuchar aquellas palabras de Alicia, sintió celos, no podía olvidar el beso, esa mirada tan dulce y tierna que Marcus le daba.

_ tío que tengas linda noche

_ igual querida, solo quiero que sepas que nada de lo que diga ese tipejo, va a cambiar mis sentimientos, ni mis pensamientos en cuanto a ti y a tu madre, sé que ella siempre amó a tu papá, descansa y no te atormentes.

_ gracias tío, me retiro no me siento bien

_ que tienes princesa, quieres algo

_ no primo, gracias estaré bien

Ella subió a su recámara, no se le veía nada bien, su semblante cambio y su mirada también.

_ papá, crees que le afectó lo de hoy, aparte me di cuenta de que Alicia, también había ido al baño, seguro la fue a fastidiar.

_ hijo, esa mujer que tienes como esposa, es muy fuerte y claro que le duelen las palabras de ese hombre, está hablando de sus padres, pero no se va a doblegar, ella no, de eso puedes estar seguro

_ entonces que crees que tenga

_ mi vida, las mujeres a veces somos así, solo ve a ver qué le pasa pregúntale mi amor, ella te tiene confianza y seguro te lo dirá

_ está bien tía Celine, papá hasta mañana, que descansen y no le digan nada a mi tía Viviana, no vamos a incomodarla, con lo que pasó.

_ ve tranquilo hijo, no diremos nada

Cuando subió a la habitación, vio que Victoria estaba como un ovillo en la cama y con la misma ropa, se le acercó y vio que temblaba

_ princesa que tienes.Toco su frente y estaba hirviendo en fiebre.

Ven te llevaré a darte un baño, estás con fiebre y no es normal, la ayudo a levantarse y la metió en la tina con todo y ropa, la dejó un rato así y luego la sacó, y la llevo a la cama.

_ ven amor debo quitarte eso. Él como pudo le quitó la ropa, sin mirarla. La arropó y fue a la habitación de su tía Viviana.

_ tía, tía, es Victoria

_ que pasa hijo, que tiene mi niña

_ no sé tía, ella había subido a bañarse cuando llegamos y cuando yo entré estaba con la misma ropa y temblando, le toque la frente y estaba hirviendo en fiebre.

_ vamos a ver,

_ que pasa, porque ese ruido

_ tía Celine, es Victoria, voy a llamar a un médico

Marcus fue a la cocina, llamó al médico mientras que una de las empleadas preparaba un caldo para Victoria. Cuando él iba a llevar el caldo, el doctor llegó, lo llevó a la habitación, necesitaba saber que tenía su esposa.

_ pueden salir y dejarme solo con la paciente por favor. Salieron de la habitación y Marcus no dejaba de caminar, estaba nerviosa y a la vez preocupado, no quería que nada le pasara a Victoria.

_ tranquilo hijo, va a estar bien,

_ No te preocupes, mi amor ya verás que no es nada grave.

_ Tía Celine, me pone mal saber que ella está allí adentro, mal de salud, no sabemos que tenga. En eso sale el doctor.

_ que tiene mi esposa doctor. Todos miraban en silencio la reacción de Marcus, era evidente que él quería a Victoria más de lo que el mismo se podía imaginar

_ tranquilo, su esposa estará bien, solo es una gripe, empezaron los síntomas, y por eso la fiebre, por favor déjenla descansar, que estos días no haga nada, denle mucho líquido y estos medicamentos. El doctor le dio las recetas.

_, pero seguro que no hay que llevarla a un hospital

_ no señor Dubois, pero si quiere estar más seguro, puede llevarla mañana. Ahora está dormida, y es bueno que descanse.

_ gracias doctor, voy a entrar a verla

Estaban seguros de lo que veían en los ojos de Marcus, pero hablarían con él, debe darse cuenta de sus sentimientos y no dejar pasar aquello que sentía por Victoria.

_ princesa vas a estar bien, yo te voy a cuidar como siempre lo he hecho. Tocó el rostro de la chica, la vio más linda que nunca, tan indefensa que le provocaba cuidarla más de lo que lo hacía.

Se acomodó en la cama, la abrazó y se quedó así por un buen rato mirándola, hasta que sus ojos se cerraron y se quedó dormido.