Mar De Mentiras

María reacciono al sentir que Mateo la cargaba sobre su hombre, le daba golpes en la espalda pero fue inútil su espalda era tan dura y fuerte, después de pasar por la sala y subir las escaleras entraron a una habitación en la cual al fin sus palabras fueron escuchadas y dejo de cargarla.

-         Suéltame soy una mujer casada, es inapropiado traerme a tu habitación

-         Ja,ja,ja Yo puedo traer a mi esposa a mi habitación cuando quiera, ese es mi derecho.

-         Yo no soy tu esposa.

-         Ja,ja,ja no seas tan descarada ,llevas viviendo años en concubinato que ese estúpido.

-         Yo firme los  papeles del divorcio.

-         Pero yo no

María era un mar de llanto, no solo era una mujer engañada utilizada como una muñeca también era una adultera, sintió unos fuertes brazos  alrededor de su cuerpo,por fin después de tantos años se volvió a sentir segura y protegida.Cuando pudo dejar de llorar le conto a Mateo lo que su falso esposo le había hecho, además su amante era la supuesta prima de este hombre, la cual en el pasado fue la causante de su separación con Mateo.

-  Esto es muy raro.

-Qué quieres decir.

- Es posible que el dechado de virtudes que es tu esposo falso tenga mucho que ver con nuestra separación.

-  Él no te obligó a acostarte con esa mujer.

-  Ya te dije me sentía solo, tú habías convertido nuestro matrimonio en algo difícil, solo te preocupabas por los tratamientos de fertilidad, nuestra hija fue criada por sus abuelas, me sentía frustrado y cuando decidiste volverme el cornudo del año aparentando estar casada con ese tipo, decidí que serías mi esposa para siempre.  

-   Yo te amaba Mateo

-   En eso somos diferentes, yo aún te amo, por eso hoy te ofrezco algo que necesitas.

-   Según tu ¿que necesito?

-  Venganza mi amor, acuéstate conmigo al fin y al cabo soy tu esposo y a cambio yo destruiré a ese hombre por ti, solo debes volver a ser mi mujer y esta vez para siempre.

-   Necesito tiempo para pensarlo.

- Está bien me sentare en esta cama y esperare 15 min.

-  15 Min dame unos días por favor.

-  No en 15 min espero tu respuesta, una cosa si te digo si vuelves a ser mía, ni él ni otro te pueden volver a tocar.

-  Voy al baño.

En el baño María lavo su cara, retiro su vestido, entro a la tina , no podía creer lo que iba a hacer, se iba a entregar de nuevo a Mateo, después de tantos años, , se colocó una  bata  que encontró para salir del baño, también había un cepillo de dientes nuevo y más implementos de aseo que uso, tomo aire sus manos le temblaban, en su mente se repetía una sola palabra venganza, venganza había desperdiciado los últimos años de su vida con un hombre oportunista que no valía la pena ,lo haría llorar lágrimas de sangre de eso no tenía la menor duda . Se escuchó un golpe en la puerta.  Al salir detallo la habitación, tenía una gran cama tendida con una colcha blanca daba la impresión de estar entre las nube, el gran ventanal  medio abierto dejaba ver los grandes edificios que contrastaban con el mar y la brisa fresca de la noche y en medio de la habitación estaba el solo con unos bóxer blancos había olvidado lo ancha que era su espalda y sus hombros, su piel blanca contrastaba con su cabello negro y ojos café oscuros, sus piernas eran puro musculo tenía un lunar en el glúteo derecho, se preguntó cuántas mujeres sabían de su lunar en un lugar tan secreto, hacia 18 años se habían separado ¿podría olvidar?, quería dejar su amargura empezar desde cero  y tener una familia como siempre soñó  .

-María estas bien.

- Si.

En menos de 2 minutos ella vio a ese hombre descarado y aprovechado desnudo sobre la cama, con su mano tocó para que ella se acostara. Al estar María acostada Mateo le quito la bata admirando su desnudes, la coloco en cuatro masajeando su trasero, luego masajeo su senos con sus dos manos, dejo besos por su espalda, tomó nuevamente sus labios, María respondió con un suspiro, acarició su mejilla derecha sintiendo su babar  y le devolvió el beso, su aroma varonil ingreso a sus fosas nasales y se sintió perdida. Sin previo aviso entro en ella con una fuerte estocada ¡Ahh…ahhh…ahhh! Para por favor- No pudo parar mi amor, , recorrió cada parte de su cuerpo con desesperación, esos cuerpos que se conocían a la perfección fueron uno solo de una manera salvaje. Esa noche estuvieron juntos practicaron varias posiciones hasta el amanecer pues a pesar de que ella pedía que parara, Mateo ignoro sus suplicas, solo le permitió descansar un momento para tomar algo de agua. Parecía que con los años Mateo había dejado la ternura y era pura pasión. Mientras su mujer dormía, Esteban dibujo una sonrisa siniestra.*Mateo eres tan débil que tuve que recuperarla para los dos, ella nunca volverá a dejarnos* 

Sin notar los cambios en el comportamiento del hombre, esta fue la primera noche en que María conoció  su otra personalidad.