Romance Prohibido

Justin miraba distraído el techo de la casa, el sol se había asomado ya hace rato por las ventanas, Camila dormía plácidamente a su lado. Miro la hora en su reloj de mano que reposaba en la mesa de noche, eran las seis y media, tenía que salir de la cama, vestirse y marcharse a su casa para después irse al aeropuerto, suspiro y miro a Camila, aunque había decidido seguir con su relación a distancia, y eso era un alivio, aún le molestaba tener que alejarse de ella, ¿ Podrían llevar su relación sin problemas? ¿Funcionaría? Esperaba que sí, no será lo mismo verla atravez de la pantalla de un celular o computadora, pero esperaba que eso afianzara más sus sentimientos y no lo contrario, sonrió con tristeza y acaricio la mejilla de ella, Camila se removió un poco al sentir el tacto de él, Justin sonrió y siguió acariciándola, a los pocos segundos ella abrió los ojos

- Buenos días. - saludo él.

- Hola, buenos días, ¿Cómo estás? - saludo e indago ella sonriendo.

- Bien, feliz de amanecer junto a tí. - respondió Justin, Camila sonrió.

- ¿Qué hora es?

- Seis treinta y cinco.

Camila mordió su mejilla interna.

- Ya es hora de que te vallas, ¿No?

Justin asíntio. - Si quiero llegar con tiempo al aeropuerto, sí, ya debería irme.

Ambos guardaron silencio, la hora de la despedida había llegado.

- No quiero irme. - suspiro Justin.

-Yo tampoco quiero que te vallas, pero....

- Es lo mejor. - término de hablar él.

- Así es, además no podemos estar así, esto no es una despedida, solo es un hasta luego, nos vamos a ver diariamente por video llamadas y así.

- No es lo mismo, no podré sentir tu piel, oler tu aroma. - dijo mientras le acaricio su mejilla. - Jamás será lo mismo.

Camila susipiro y le dió un beso en los labios. - Te amo, vamos a estar bien. Camila se levantó de la cama y camino hacia el baño. - Date prisa, se te hace tarde.

Justin se levantó de la cama, busco su ropa exparcida en la habitación y comenzó a cambiarse. Minutos después Camila salió de la habitación envuelta en una toalla.

- ¿Qué tal si me acompañas al aeropuerto? - pregunto Justin. Camila guardo silencio por varios segundos.

- ¿No tienes que ir a tu casa primero? - indago ella colocándose su ropa interior.

- Sí, a buscar las meletas.

- No creo que ha tus padres les de mucha gracia verme en su casa.

Justin tuvo que admitir que Camila tenía razón.

- ¿Y si vas al aeropuerto y me esperas allá? - Camila pensó lo sugerido por varios segundos.

- ¿Crees qué sea buena idea?

Justin camino hacia ella y la tomo por la cintura.

- Si, necesito verte ahí. - ella rodeo su cuello con sus manos.

- Está bien, iré. - El sonrió, luego se besaron con pasión y amor. - Creo que no es buena idea hacer esto ahora. - comento ella cuando terminaron el beso.

¿ Por qué ? Solo es un beso. - musito él, ella no dijo nada, Justin volvió a besarla y poco a poco la hizo caminar hacia la cama.

- No podemos, llegaras tarde.

- Solo será una vez, trataré de ser rápido, pero aún si lo disfrutaremos.

- No es buena idea. -

- ¿Cuánto tiempo crees que va ha pasar para que volvamos a estar así de cerca? - indago él, ella mordió su labio inferior. - Vez, será mejor que aprovechemos estos minutos. - Él la empujó y Camila callo en la cama, después Justin se colocó encima de ella. - Hubiera sido mejor que no te pusieras esto. - - dijo mientras bajo la copa del sosten y libero uno de sus pechos. - Nos ahorraríamos tiempo, pero bueno, hay que ser recursivos. - bajo la otra copa. - Hmm. - Adoro tus pechos, son tan hermosos. - él tomo uno con su mano acariciándolo y acercó su boca al otro. - seré rápido, lo prometo.

.........

Camila estaba a las afueras del aeropuerto fuera del auto, mirando un poco preocupada los alrededores del lugar. Eran las ocho y veinte, Justin no llegaba aún, sabía que él iba a llegar tarde, salió de su casa a las siete y quince. No debió dejarse convencer, aquel " rapidito “ puede causar que el perdiera el vuelo, y bueno tal ves eso no era tan malo. Sonrió ante ese pensamiento, luego lo disipó, esto era lo mejor, muy doloroso, pero aún así, era lo mejor.

Cinco minutos después un Mercedes Benz blanco se se estacionó a tres plazas de ella, la puerta del conductor se abrió mostrando a un hombre vestido elegantemente, quién rodeo el auto y abrió la puerta de atrás, una mujer de aproximadamente cincuenta años bajo de este, iba vestida muy formal, destilaba elegancia y clase, la mujer era castaña, de piel clara, Camila supo quién era al instante que vio su rostro, compartía bastante similitudes con su hijo, tras de ella, salió Justin, él la vio y le sonrió, la mujer se dió cuenta de esto y frunció el entrecejo, miro a Camila con molestia, ella se sintió un poco intimidada, pero aún así no aparto la mirada. Justin camino hacia ella, cuando estuvo enfrente le dió un beso en los labios, Camila le correspondió pero se sintió incomoda, la madre de él los veía bastante molesta.

- Me hace feliz que esté aquí. - musito él. Camila solo asíntio.

- Justin, vamos ya de por sí es demaciado tarde. - hablo su madre. La mujer paso por el lado de ambos sin mirar a Camila, Justin frunció el entrecejo y tomo a Camila de la mano

- Ignora su actitud. - le susurro, Camila asíntio.

Minutos después estaban en la sala del aeropuerto, ya había llamado al los pasajeros, Justin abrazaba a su madre despidiéndose.

- Cuídate cariño, no hagas más tonterías, por favor, - dijo la mujer, Justin asíntio.

- No te preocupes. - terminaron el abrazo, Justin miro a Camila que estaba a casi dos metros de distancia de su madre y él, camino hacia ella.

- Es la hora. - susurro, Camila asíntio. El la abrazo. - Te amo.

- Y yo a tí.

- Te hablaré apenas llegué. - Camila asíntio. Se miraron a los ojos. - Trataré de venir a verte entre fin de semana, no sé cómo lo haré para conseguir el dinero, estoy seguro que ellos me darán los estricto para vivír.

- O yo puedo ir también, no te preocupes ya resolveremos eso. - Está vez fue el quien asíntio, luego justo sus labios, Camila correspondió, olvidandose de que la madre de Justin estaba viéndolos.

- Pasajeros del vuelo 2134, con destino a la ciudad de New York, por favor pasar a las sal cinco. - se volvieron a escuchar las bocinas del lugar.

-Justin, date prisa. - hablo su madre, el rodó los ojos, se separó de Camila y tomo su maleta. - Te amo. - Camino hacia la sala de abordaje, Camila tuvo que hacer un gran esfuerzo para no llorar, algo le decía que las cosas no iban hacer tan fácil como ellos creian, pero trato de despejar esos pensamientos. Justin desapareció al entrar a la sala de abordaje y ella susipiro, dió media vuelta dispuesta a marcharse, pero la voz de Elena la detuvo

- Me regalarías un minuto. - dijo, Camila giro su cuerpo otra vez y asíntio.

- Vamos a el auto.- la mujer camino delante de ella.

- Muy bien. - hablo la Elena ya estando ambas en el auto. - Iré al grano, no me gusta andar con rodeos. - Miro a Camila de arriba a bajo. - Entiendo que mi hijo esté tan encaprichado contigo, eres bonita, bastante de hecho. - comento. - Pero yo conozco a las mujeres de tu clase, son unas vividores, no puedo permitir que sigas engatuzando a mi hijo, así que, ¿ Dime cuánto dinero quieres?

Camila abrió los ojos al escuchar la pregunta de la mujer, ¿Le estaba ofreciendo dinero a cambio que dejaras a Justin?

- Estoy dispuesta a darte la suma que me pidas. - volvió a hablar la mujer.

Camila sonrió con ironía, la mujer frunció el entrecejo.

- ¿Qué es lo que te parece chistoso ? - pregunto molesta.

- Nada. - respondió Camila y miro a la mujer a los ojos. - Lo siento señora no quiero su dinero, para eso trabajo.

- Dudo mucho que en tú trabajo como profesora puedas ganar la cantidad de dinero que yo te puedo dar.

- No me interesa. - Volvió decir Camila. - Mire, yo no sé que tipo de mujer conoce usted, pero no soy de esas, no estoy con Justin por su dinero, aún si el fuera del mismo estrato social que yo o incluso más bajo, estaría con él, así que no se preocupe, guarde su dinero. - Camila tomo la manija de la puerta dispuesta a abrirla y marcharse, pero Elena la detuvo.

- Piensalo bien, podrías estar desprovechando una gran oportunidad. - la mujer miro a Camila y sonrió. - Mi hijo ahora en la universidad estara rodeado de chicas lindas, de su edad, ¿Crees que el capricho que tiene contigo le durará mucho?

Camila sabía lo que la mujer quería hacer y aunque había pensado en eso ya, solo sonrió.

- Entonces usted estará tranquila, y lo mejor no habrá gastado si dinero en bano. . - dijo, la mujer hizo una mueca de enojo, Camila abrió la puerta y salió del auto.

Cuando estuvo fuera lleno su pulmones de aire, entro a su auto, vio como el Mercedes Benz salió del estacionamiento y se alejó.

Las palabras de la mujer se repitieron en su cabeza.

Era cierto, Justin ahora iba a estar rodeado de chicas lindas, de su edad, e incluso mayores que él, que muy seguramente quedarían fascinada al verlo, el era guapo y llamaba la atención fácilmente, , ¿ Y si estando allá rodeado de tantas chicas llamando su atención descubría que no la amaba, que solo era un capricho?

¿Podía eso pasar? ¿ Podría ella soportar que él no la quisiera más? No, no debia pensar así, no debía dudar de él, Justin no era un adolescente confundido, el era un chico maduro, que sabe lo que quiere, él la ama, no debe dudar de los sentimientos de su tonto chico.

Con ese pensamiento susipiro y encendió el auto.

Todo iba a estar bien.