No Me Quiero Enamorar

Patrick se acercó a Joan mirándolo y le dijo.

— ¿Que pretendías conseguir con todo esto?, que no me acercara a ella cierto, sabes que me atrae Sonia y me viste como una amenaza, imbécil.

— Yo solo la quiero de vuelta, tienes razón aún me gusta, aún la quiero.

— Ja, ja, ja, ¿la quieres?, que irónico la quieres dañar ¡supongo!, la quieres lastimar, la quieres humillar.

— No sé que me paso Patrick, solo sentí celos de que ella estuviera contigo, o con algún otro de esta empresa.

— Si, si entiendo sentiste celos, pero nunca la valoraste, es difícil para mí asimilar que un hombre deje plantada a una mujer a la que era su pareja, que la haga sufrir de esa manera, eres un desgraciado Joan esto lo vas a pagar.

— Haz lo que tengas que hacer si quieres me botas de la empresa, pero haré lo posible por tenerla nuevamente a mi lado, tú no eres competencia para mí.

— Ja, ja, ja, quien te dijo que yo compito, no, no, no, yo no tengo competencia Joan, además no creo que Sonia te quiera nuevamente en su vida.

— Eso lo veremos, ella volverá conmigo.

—Si, si como tú digas, bueno Joan toma la tarde libre, necesito que pienses con cabeza fría lo que vas a hacer, mañana quiero mis balances, las cuentas, todo en orden en mi escritorio a primera hora si me convence lo que vea en esos números te quedas.

Joan respiró profundo se alivió de que Patrick le diera una oportunidad, tomó sus cosas y salió de la oficina, Patrick se comunicó con sus hombres quienes habían escuchado todo a través de sus dispositivos de seguridad, ya ellos sabían que hacer.

Durante el tiempo que Patrick y Joan estuvieron hablando, Sonia había ido a buscar a su hermano y le pidió las llaves del carro, bajó hasta el estacionamiento, busco en el carro de su hermano un bate de baseball, e hizo lo mismo de dos años atrás.

Comenzó a partirle los vidrios al auto de Joan, uno muy nuevo, estaba recién adquirido, está vez lo destruyó por completo, una vez que terminó allí salió de la agencia tomo un taxi y se fue a su casa, a su templo, a su lugar sagrado.

Al entrar es recibida por su perrita, ella la abraza y se sienta en el sofá a llorar, la situación que había pasado había removido su dolor y más a lo que se había atrevido Joan con tal de él quedar como la víctima.

Después de llorar a mares, Sonia se duchó y cambio y decidió preparar una rica cena para ella y su hijo.

cuando el llegó se sentaron a cenar y conversar como siempre lo hacían.

— ¿A que se debe esta celebración mamá?.

— Bueno celebramos que termine mi trabajo con Johanna y ella quedó satisfecha, mañana comienza su campaña.

— ¡Que bueno! mamá, eres la mejor en todo.

— Ja, ja, ja lo dices por qué eres mi hijo.

— No, en serio ma, eres la mejor estoy orgulloso de ti.

— ¡Ay que lindo mi hijo hermoso!, gracias llenas mi tanque de amor.

—¿ y tú jefe que te dijo mamá?.

— Nos felicitó a todos, deben estar en un bar celebrando, yo preferí estar contigo.

— Gracias mamá, espero que a los 18 me pueda ir contigo al bar.

— Puede ser, solo si bailas salsa conmigo.

— Ja, ja ja, no, eso no mamá, sabes que odio esa música.

— Pero es muy sabrosa para bailar y disfrutar, no sabes lo que te pierdes.

Ellos pasaron una velada tranquila como siempre, mientras en el Bar estaba Patrick con el resto de empleados buscando a Sonia y como no la vió decidió llamarla.

— Buenas noches, Sonia, por qué no estás en el bar, mereces celebrar también.

—Buenas noches señor Massarov, también estoy celebrando pero en privado.

—ok, ¡entiendo!, ¿podemos hablar de lo que pasó hoy?.

— No, y no quiero volver a tocar el tema, señor Massarov.

— Sonia, necesito hablar contigo, por favor.

— Nuestras conversaciones de ahora en adelante deben ser netamente laborales, así que en estos momentos no estoy disponible para escuchar nada que tenga que ver con el trabajo, estoy cenando si me disculpas.

— Está bien Sonia, discúlpame, que pases una buena noche.

Sonia colgó sin responder nada más a Patrick y él se quedó con un mal sabor de boca.

Patrick comenzó a tomar whiskey con los demás hombres de la empresa para tratar de distraerse y no pensar más en Sonia.

Se sentía totalmente desencajado, molesto, impotente, tuvo toda la oportunidad de conquistar a Sonia desde un principio, pero por el error de creer en Joan lo había echado todo a perder.

Patrick se despidió de todos, aún era temprano, subió al auto con su chófer y muy molesto le hablo.

— Llévame al sitio, necesito sacar toda esta rabia — golpeando el tablero del auto.

— Enseguida jefe, el hombre ha estado desesperado quiere salir y amenaza a todos.

— Ja, ja, ja, eso me alegra, que se desespere ese maldito, hoy va a desear no haberme conocido— Exclamo Patrick colocándose unos guantes de cuero.

Una vez que Patrick terminó de hablar con Joan le indico a sus hombres llevarlo a un lugar "más cómodo".

Joan no sospechó nada, por qué cuando llegó a su auto lo consiguió hecho un desastre y maldijo a Sonia porque sabía que había sido ella, así que subió al auto con los hombres de Patrick, sin saber que lo llevarían a vivir el peor día de su vida./

💥💥 REFLEXIÓN DE VIDA💥💥