Finjamos Amarnos

_ ¿Era necesario? ¿Una limusina?_ suspira la novia recostándose en el asiento cansada

_ fue mi madre _ responde Emiliano en la misma posición que ella

_ me agrada tu madre, ¡aunque a veces exagera un poco!

_ ¿a veces?_ exclama él, se miran y comienzan a reír _ más bien siempre exagera _ sus miradas se cruzan y él no puede evitar observar sus labios.

_ no hagas eso _ murmura girando hacia la ventana.

_ ¿a qué te refieres?

_ ¡lo sabes!

_ ¿te molesta que lo haga?

_ ¡ya te dije lo que pienso!

_ sí, y yo también te dije lo que haría ¡Por como te alteras voy por buen camino!.. Toda la tarde quise preguntarte que te dijo Jose

_ yo también quería hablarte de él _ vuelve a mirarlo _ ¿hace cuanto lo conoces?

_ él, fue mi mejor amigo desde la secundaria, también fuimos a la facultad juntos hasta que se cambió a contabilidad por pedido de sus padres.. ¿Cuándo bailo contigo que..

_ me dijo que era hermosa y me merecía algo mejor que tú

_ ¡maldito bastardo! _ gruñe furioso

_ no te preocupes. Rechace cada intento de acercarse por parte de él, desde que lo conocí no ha dejado de insinuarse y eso que lo vi solo dos veces

_ gracias por decírmelo

_ ya te dije. Para mí, la sinceridad es primordial. No me dijiste a donde iremos

_ a la playa, nuestras maletas ya están en el baúl, llegaremos en tres horas.

_ iremos hasta allá en este auto

_ si _ ríen _ ¡juro que no fue mi idea!

_ ¡lo sé! ¡Fue tu madre! ¡Tendré que viajar con este vestido! Es demasiado escotado y muy ajustado

_ ¡pues te queda muy bien!

_ no dirías lo mismo si me ves, sin contener el abdomen, los tres rollos que tengo saldrían a la vista _ se ríe al decirlo logrando contagiarlo _ créeme que no sería una imagen muy grata _ Emiliano se retira el saco y se lo entrega

_ ten, puedes cubrirte y respirar con normalidad

_ gracias, ¡no sabes lo difícil que es! He intentado bajar de peso, pero cuando descubrieron que tengo hipotiroidismo comprendí por qué era tan difícil.

_ Tus proporciones son perfectas _ le dice con sinceridad, recordando su cuerpo semidesnudo

_ ¡eso es porque no me has visto desnuda!_ le responde y los dos se sonrojan _ yo dormiré un poco _ termina ella.

Llegan al hotel, acompañados de una fuerte lluvia, se acercan a la recepción, mientras Emiliano solicita la llave del cuarto, ella se dirige al baño. Perla regresa y él la mira nervioso

_ ¿qué paso? ¿No tenemos habitaciones?_ pregunta preocupada

_ sí, pero.. ¡Solo una!

_ ¿Qué?_ susurra para no llamar la atención _ ¿debemos dormir juntos?_ Emiliano asiente

_ juro que elegí un hotel alejado para que nadie nos molestara _ se excusa Emiliano _ le dije a mi padre que reserve dos habitaciones.

_ ¿y tu padre a quien obedece a ti o a tu madre?_ lo poco que conoce a Cesarina ya la hace deducir quién es responsable de esta situación..

_ insinúas que.._ Perla asiente _ no puede ser, ella sabe que nosotros no...

_ me pregunto mi edad para saber si soy fértil, ¡no me sorprende esto! _ Emiliano se despeina frustrado pensando en su progenitora [mamá quieres matarme, no es así! No fue suficiente con tu engaño para hacerme verla en ese sexy.. conjunto que lleva puesto ahora debajo de ese vestido] La mira recordando la escena de horas atrás ... [Emiliano concéntrate]

_ ¡qué vergüenza! Mi madre me ofrece como mercadería _ menciona y los dos se ríen _ ¡espero no te enojes con ella!

_ ¡no te preocupes, solo te ama y quiere verte feliz! Quizás podemos pedir otra habitación _ sugiere Perla, pero él hace un mohín

_ sobre eso.... Dijeron que tenían todo ocupado por la lluvia. Además, son días turísticos... _ La pelirroja ve detrás de su esposo que alguien se acerca, quedando anonadada al reconocerla

_ buenas noches, señor Emiliano Miller, es un honor tenerlo aquí, soy Rossana Valdez, la nueva gerente del hotel _ una esbelta mujer de cabello negro largo y lacio, vestida con un traje negro muy elegante, extiende su mano, Emiliano la toma por educación

_ mucho gusto _ responde y la suelta de inmediato

_ ¿me dijeron que necesitan otra habitación?

_ sí..._ dice Emiliano, y Perla lo interrumpe

_ no es necesario, solo hubo una confusión _ menciona uniendo su mano con la de su esposo, quien la mira confuso _ ¿vamos a nuestra habitación cariño?_ se para de puntillas y le da un beso en los labios.

_ ¿cariño?_ exclama la mujer al reconocerla _ ¿ustedes son pareja?

_ sí, nos casamos hoy y estamos de luna de miel.. _ responde Perla, gozando la reacción de la mujer frente a ellos _ ¿quién nos puede ayudar con las maletas? _ la mujer contiene su enojo y Emiliano solo se deja llevar, preguntará después

_ tomen las maletas.. Y acompáñenlos _ le ordena la gerente a dos de los empleados _ buenas noches _ busca escaparse, pero la pelirroja tiene otros planes, y no desaprovechará la oportunidad

_ Deberías acompañarnos, eres la encargada ¿quién mejor para verificar que todo este donde corresponde no mi amor?

_ Si mi amor, después de todo es nuestro hotel _ le responde y Perla disimula la sorpresa ante la noticia.

_ ¡como gusten! Por aquí _ los tres suben al ascensor, con el personal encargado de llevar las maletas. El espacio reducido está lleno de espejos y la novia sigue con su acto acariciando o besando a su esposo quién le corresponde complacido

Lo único que dedujo hasta el momento, es que las mujeres se conocen y en esta guerra él, es beneficiado con los cariños que le brinda su esposa, el deseo de convertir ese acto en su realidad vuelve a golpearlo. Llegan al dormitorio y entran. Perla evalúa todo, inclusive entra al baño mientras la gerente se queda de pie, y los otros empleados se van

_ todo está perfecto, al parecer es buena haciendo su trabajo. Tengo hambre, me gustaría Sushi si es posible..

_ la cocina ya cerró.

_ ¿es decir que si un huésped llega con hambre no le ofrecen nada a pesar de lo costosa que es cada habitación?_ pregunto Emiliano _ hablaré con mi hermano para solucionar esto

_ Lamento molestarlos, ¡es que una gorda como yo! Tiene hambre en cualquier momento _ Emiliano se para detrás, abraza su cintura y comienza a besar su hombro

_ que dices amor eres hermosa _ exclama para que ambas escuchen, antes de mirar a la esbelta mujer _ como escucho por favor traigan lo que mi esposa le pidió, necesito que esté alimentada para el festín que me voy a dar con ella _ argumenta besando su mejilla

_ por supuesto _ responde Rossana

_ ¡si nos permite! Mi esposo está hambriento y no de Sushi _ habla mirándola con soberbia, mientras Emiliano besa su cuello, la mujer sale cerrando la puerta _ ya se fue detente _ no la escucha y sigue logrando sacarle un gemido, que lo motiva más _ Emiliano detente _ él no obedece y su mano envuelve uno de sus senos por encima la tela y lo aprieta _ detente _ reacciona, golpeando su estómago con el codo

_ ahhhh_ se queja y cae sentado en la cama, retorciéndose del dolor.

_ yo.. lo... lo siento _ dice ella agachándose para observarlo desesperada por lo que hizo _ no quise lastimarte es que tú no me soltabas _ Emiliano sonríe lamiéndose los labios.

_ estoy bien _ responde, y Perla se da cuenta de que exagero, se endereza colocando sus brazos en forma de jarra.

_ ¿estabas fingiendo?

_ sí.. es nuestra especialidad ¿no?_ apoya sus manos en la cama para mirarla _ ¿me vas a contar quién es?

_ no puedo creer como me enredo en tantas mentiras cuando estoy contigo _ contesta sentándose junto a él

_ ¿por qué siento que tiene algo que ver con tu ex?

_ por algo eres abogado ¿no? Tu capacidad de deducción está en lo correcto.._ suspira _ cuando descubrí su infidelidad fue porque ella me mandó una foto de los dos en la cama completamente desnudos y Osvaldo dormía en su pecho. Yo estaba embarazada y era mucho más gorda que ahora tuve diabetes gestacional, mis hormonas eran un desastre, tenía seis meses...

_ no es necesario que me cuentes algo que te lastima.

_ ¡dijimos que seríamos sinceros!_ exhala con pesar _ Osvaldo me dijo que estaría con su madre la noche anterior porque estaba descompuesta, así que por incrédula o por tonta. Como quieras llamarlo, fui a buscarlo a la casa de mi suegra. Desde que Rossana entró a trabajar como su secretaria, acaparando todas mis responsabilidades en la empresa que los dos fundamos, yo sospechaba de los dos, sin embargo, me negaba a creerlo, incluso con la fotografía de los dos que acababa de ver. Llegue discutimos... y me empujó por las escaleras.

_ ¿Sofía lo vio?_ pregunto recordando que la rubia fue quien le comentó sobre esa situación antes.

_ no, cuando recibí el mensaje esa mañana estaba por llevarla a su clase de karate, por eso me acompaño, le pedí que me esperara afuera, en el patio delantero, su abuela nunca la quiso... nos quiso mejor dicho. Supongo que al escuchar el alboroto ingresó. La vi corriendo hacia mí con su traje blanco antes de desmayarme. Me desperté en el hospital, mi hija con solo catorce años había llamado a la ambulancia y me acompaño, también llamó a su padre.

La madre de Osvaldo fingió preocupación por primera vez, únicamente para evitar que la acuse, y ciertamente eso hizo que su hijo le creyera a ella. Sé que sonara patético, y nefasto de mi parte, como madre y mujer, pero la perdida de mi hijo me hizo abrir los ojos. Yo no era su prioridad, ni siquiera estaba en su lista de seres importantes, no era nada para él, más que la mujer que llevaba a su hijo. Nos divorciamos un año después.

_ ¿entonces por eso actuaste así? ¿Tu esposo te dejó por Rossana Valdez?

_ no, me dejo porque denuncie a su madre, la acuse por la muerte de mi hijo y él le creyó a ella, no a mí. Para él yo era la culpable

_ ¿el juicio que perdiste?

_ si.. ¡En fin! No sabía que esa mujer ya no trabajaba para él. Te lo cuento para que sepas que yo no denigro a las personas.. Pero era mi oportunidad para vengarme, sé que ella no es la culpable, sino Osvaldo, es quien tenía un compromiso conmigo y me fallo.

_ no te juzgo.. ¡Estamos juntos para protegernos! Si no te importa me ducharé primero tengo una situación.._ ella lo mira intrigada mientras él se pone de pie y ve cierta elevación debajo de la tela, gira de inmediato, provocando que Emiliano se ría _ ¿crees que soy de piedra?_ Perla recuerda que le dijo lo mismo, esa noche que durmieron juntos..

_ yo lo siento, creo que me excedí… provocándote

_ si te sientes culpable ayúdame a deshacerme de mi problema _ le susurra acercándose, ella retrocede terminando acostada sosteniéndose con los codos. Emiliano se recuesta sobre ella apoyando sus manos a los lados sin tocarla

_ no fue mi intención, no pensé que te pusieras así por mí.

_ ¡no es la primera vez que me provocas esto! Cuando te vi con ese pijama rojo fue el comienzo de mi deseo por ti ... Por lo tanto, por favor, ponte algo que no me provoque porque no respetaré el contrato.. Y consumaré el matrimonio _ toma unas prendas de la maleta y entra a la ducha dejando a una mujer ruborizada.

Perla busca que ponerse, opta por unos pantalones y unas manga largar color gris. Mira la ventana como cae la lluvia, con su ropa en la mano esperando que salga. Gira al escuchar la puerta del baño, abrirse, encontrándose con su esposo, quien lleva una toalla en la cintura y el cabello húmedo [es el hombre perfecto, me gustaría tocarlo y quitarle esa toalla. Dios que estoy pensando]

_ ¿por qué no te vestiste?!_ pregunta volviendo la vista a la ventana, y maldice al ver su reflejo decide mirar al suelo, mientras que Emiliano se divierte con su reacción _ no es gracioso, ¿qué es lo que buscas?

_ ¡conquistarte! Usaré todas mis armas y tus debilidades a mi favor... según tus textuales palabras, "temes de ti misma, ya que no eres de piedra hace casi 5 años, estas sin sexo y mi sensual cuerpo no ayuda mucho"…_ se acerca a su oído _ ¡Sé! Que te gusta lo que viste y tu intento de contenerte es gratificante.

_ ¡si hubieras actuado así desde el comienzo no hubiera aceptado el trato!_ dice escapándose e ingresa al baño

_ que bueno que esperé hasta que te convertiste en mi esposa para mostrarte mis intenciones _ exclama detrás de la puerta, ella no contesta, en cambio, enciende la ducha.

La puerta suena, Emiliano se coloca la camiseta y se quita la toalla quedándose con la bermuda que llevaba debajo

_ Señor aquí le traigo lo que solicito _ menciona un empleado del lugar con un carrito de comida.

_ gracias, puede retirarse _ el empleado se va, mientras el abogado ingresa el carrito acomoda todo esperando a su esposa _ ya trajeron lo que pediste, ¿vamos a comer? _ pregunta cuando ella sale

_ me siento culpable

_ pues no deberías yo tengo hambre.. Ven siéntate _ golpea la cama

_ gracias tomaré la silla _ se sienta y toma los palillos.

_ puedes estar tranquila, no te comeré _ exclama, observándola llevarse a la boca una porción _ a menos que me lo pidas

_ ¿puedes dejar de hacer eso!?

_ ¡no! Comamos por hoy ya no te molestaré... tengo toda una vida por delante para enamorarte.