Laurent fue invitada a un evento, allí se encontró con una extraña situación, a ella le dieron un afrodisiaco, debido a esto pasó una noche con un hombre, que además es el hijo de su jefe. Pero todo se tornó de una forma inesperada, ella no quería que la tacharan como una oportunista, para Santiago fue así, por eso decidió irse y no volver.
Laurente decidió esconder el secreto de quién era el padre de su hijo, algo que hasta el momento no le había afectado, su pequeño hijo creció rodeado de amor y con la compañía de una madre amorosa.
Pero él volvió y está dispuesto a recuperar lo que perdió 4 años atrás, esto hará que muchas cosas cambien, y en especial la relación de ambos.
¿Podrá su pequeño hijo unir nuevamente a ambos? ¿Podrá ganar el amor en esta batalla de orgullos?
NovelToon tiene autorización de ♡ VENUS para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capítulo 21
Laurent Vitale
_¿Pero te volviste loca? _Pregunto indignada.
_No, no me volví loca. Yo no te crié para que fueras una cobarde y salieras huyendo ante el menor problema.
_¡Mamá por Dios! ¿Te estás escuchando? Es que no puedo creer que me estés pidiendo que no renuncie a esa empresa, aún sabiendo todo lo que pasó con ese tipo.
_No es eso hija, pero piensa. Si dejas el trabajo ahora, de nada te sirve todo lo que has logrado. La experiencia que has adquirido la vas a perder, lo que te lleva a no encontrar un buen trabajo y en estos momentos no te puedes dar ese lujo. Acuerdate que ahora tienes un hijo. ¿Qué harás cuando pagues la penalización? Te quedarás con muy poco dinero y con el salario mínimo de otro puesto de trabajo no podrás disponer de mucho.
_De verdad, esto no me puede estar pasando a mi _Digo aún más frustrada.
_¡Hay mi amor! Sé por lo que estás pasando, pero solo será un año. Después puedes renunciar si quieres.
_Tal vez tengas razón _ Digo sin más esperanzas.
Sé que mi mamá tiene razón en lo que me dice, pero es que simplemente no quiero estar cerca de ese hombre y mucho menos que él esté cerca de mi hijo.
Después de terminar de platicar con mi mamá, me despido para ir a casa. Hoy Ángel está con mi papá porque hoy es su día de pesca, por lo que hasta la tarde no llegan y me da tiempo para relajarme un poco. Llego a mi departamento y me dejo caer en el sofá. Pienso y vuelvo a pensar en lo que platiqué hoy con mi mamá y ella tiene razón. Ella no me crió para ser una cobarde y si Santiago Vólkov cree que puede venir después de cuatro años a reclamar algo que el mismo sacó de su vida. Está muy equivocado.
Siento el timbre de la puerta sonar con desesperación y un sobresalto me hace salir de mis pensamientos. Alguien toca y por la manera en que lo hace parece que se estuviera acabando el mundo. Al abrir la puerta, no me da tiempo a reparar quien es la persona que tocaba porque de un momento a otro me envuelve en sus brazos.
Cuando por fin pude reaccionar, la silueta de un hombre que conocía bien estaba frente a mí y entonces me di cuenta quien era la persona que me abrazaba mientras sollozaba en mi hombro. Un escalofrío recorrió mi cuerpo entero, el señor Vladimir y la señora Mayara estaban aquí por lo que eso solamente podía significar una cosa, ellos ya saben la verdad.
Cuando la señora Mayara me suelta me hago a un lado para que pasen y después cierro la puerta. Ahora estoy por fin junto a ellos y la vergüenza por lo que pasó hace cuatro años me invade. Tanto que no puedo ni siquiera mirarlos a los ojos. Siento los pasos firmes del señor Vladimir acercándose a mí y mi cuerpo tiembla involuntariamente. Cuando al fin lo tengo delante, sus grandes manos levantan mi rostro haciéndome mirarlo directamente a los ojos y una lágrima se me escapa.
_Escucha bien lo que voy a decirte, porque solo lo aré una vez _Su tono serio y firme retumban en mis oídos _Tu no tienes nada de que avergonzarte y mucho menos debes bajar la cabeza ante nadie. Eres una mujer digna de admirar, porque tu sola has criado a tu hijo y nunca le has fallado. No sabes lo orgulloso que me siento de ti.
Las palabras del señor Vladimir, me dejaron sorprendida porque yo no me esperaba a que él me dijera eso.
_Yo de verdad no quería, nunca fue mi intención estar con uno de sus hijos y mucho menos quedarme embarazada para sacar provecho... Yo solo ..._Intente seguir hablando, pero otro fuerte abrazo de la señora Mayara me hizo callar.
_Lo sabemos mi niña, pero pudiste buscarnos o pedirnos ayuda. No debiste pasar por esto tu sola_Dijo con esa voz tierna con la que siempre me habla.
_No quería que pensaran mal de mí como lo hizo su hijo _Digo entre sollozos.
_Nosotros nunca hubiésemos pensado mal de ti _Dijo el señor Vladimir _ De hecho si me hubiese enterado antes, sería el hombre más feliz del mundo por tener a Ángel como mi nieto. Él es un niño maravilloso y estoy muy orgulloso de ser su abuelo.
_Yo de verdad nunca quise apartar a Ángel de ustedes. Por eso dejé que él conviviera con sus abuelos aún sin saberlo.
_Y no sabes cuanto te agradecemos por eso cariño _Dijo la señora Mayara _Pero ahora si, tenemos que hablar de algo importante.
_Laurent, sé que lo que nuestro hijo te hizo no tiene nombre. Pero te pido que por favor no renuncies a la empresa _Dijo el señor Vladimir _Sé que lo que menos quieres es estar cerca de mi hijo en estos momentos. Pero la empresa te necesita y tú necesitas el trabajo. No sé si ya sabes, pero al renunciar perderás tu experiencia.
_Sí eso ya lo sé, su hijo me lo dejó bien claro esta mañana. Sin embargo, lo pensé bien y voy a seguir en la empresa el año que me queda. Luego de eso renunciaré y tendrán que buscar a alguien más.
_Está bien, entonces que así sea _Dijo él.
_¿Dónde está Ángel? Quiero llenar de besos a mi nieto y decirle que soy su abuela.
_En estos momentos está con mi papá, hoy es su día de pesca y hasta la tarde no llegan.
_Eso suena bien, aunque quiero hacerte una propuesta Laurent. Quiero hacer un almuerzo en mi casa este fin de semana para que mis otros hijos conozcan a Ángel y poder decirle que somos sus abuelos. Y es que la verdad, yo siempre sentí una conexión muy fuerte con ese pequeño y a Vladimir también le pasó. Solamente no sabíamos el motivo.
_Bien dicen que la sangre siempre llama querida, pero que dices Laurent ¿Aceptas la invitación? _Sonrió el señor Vladimir.
_Está bien, la acepto, pero solo con una condición y es que su hijo Santiago no puede estar ahí.
Cuando dije eso, vi como ambos se miraron y sé que esta situación debe ser difícil para ellos. Como también lo es para mí, pero es que me reúso a tenerlo cerca. Suficiente con tener que verlo en la oficina.
_Está bien querida, cuenta con eso _Dijo la señora Mayara _Yo le diré a Santiago que no se puede aparecer en la casa.