La Villana Prefiere Al Villano...

La noche había llegado, los duques debían actuar bien, estar calmados, fue orden de Celestine, cosa que ha la duquesa le molestaba, pensando que quizás era momento de deshacerse de Celestine y puede que también de Layla, así el ducado será finalmente suyo y ella podrá ser quien de las órdenes como debe de ser. Los invitados iban llegando y saludaban a los duques, felicitado a ambos por tener una hija tan hermosa e inteligente como Layla y algunas frases terminaban con, "que pena que la otra, no siguió su ejemplo." Esto causaba mayor molestia en la duquesa, su hija estaba siendo una burla, en especial porque las mujeres mayores al ver a Felicia le decían que era linda, pero debería aprender más de su hermana, cosa que ha Felicia también le molestaba.

Pero pronto llego y el príncipe y acudió de inmediato a saludarlo, claro que esto solo reforzó el hecho de que la mayoría piense lo desvergonzados que son y que Layla hizo bien en romper el compromiso con el príncipe, ¿pero porque muchos piensan así? Eso es porque a excepción del emperador, nadie puede tener concubinas o amantes, pues se considera una vergüenza, aunque claro, hay quienes se ocultan, pero aunque Denis sea el príncipe heredero, como no es el emperador, es un insulto que tenga una amante, aun cuando solo estuviera comprometido.

Con la gente ya en el salón, se escucha una suave música, el susurro de las charlas, también se van anunciando los que llegan, es así como la presencia de la festejada se da a conocer, el guardia la anuncia, en compañía del duque Mondragon. Ambos entran juntos, vistiendo prendas lujosas y elegantes, ambos se ven bien juntos, que si bien Hades es mayor que Layla, este tiene un rostro bastante atractivo.

Desde días atrás se hablaba sobre su compromiso y algunos no podían creerlo, ¿por qué Layla Amary aceptó casarse con el duque Mondragon?, todos saben sobre su condición y aunque el compromiso anterior de Layla se rompió, algunos nobles querían pedir su mano debido a la buena reputación de la joven. La duquesa escuchaba los halagos hacía Layla, contrario a lo de hace un momento, en el que llovían críticas hacia Felicia.

Layla y Hades caminan juntos hacía los duques, saludando, Hades se porta muy cortés ante ambos, agradeciendo por la invitación y que le permitieran presentarse como el acompañante de Layla, aunque claro, esto se debe a que fue Celestine quien dejo en claro que Hades sería el acompañante de su nieta. Denis quien estaba cerca, no dejaba de observar a la pareja con molestia, pero se acerca a Layla entregando una caja pequeña.

— este es un regalo de mis padres que no han podido asistir hoy.— menciona Denis.

Pero estaba molesto, ver a Layla tan sonriente del brazo de Hades, lo hace enojar, pues con él nunca fue así.

— dígale a sus majestades que estoy muy agradecida por su regalo.— menciona Layla, mientras ve el contenido de la caja.

Era un precioso collar de diamantes blancos, se notaba costoso, seguramente la emperatriz lo envío como diciendo, que viera lo que iba a perder al no casarse con Denis. La música no se hizo esperar, era el momento del primer baile de la festejada, así que Hades le tomo de la mano y la invito a bailar, ambos se veían muy bien juntos, sus pasos se acoplan bien, mientras se mueven por la pista.

Los comentarios de halago no se hacen esperar, molestando a la duquesa, pues de Felicia nunca escuchaba esa clase de halagos y Denis, por supuesto que se molesta, si no fuera porque Layla creía las habladurías de la gente, sería él quien estuviera a su lado.

— podría jurar que mi adorable sobrino nos observa con celos.— menciona Hades.

— es su ego herido, porque no estoy llorando por él.— responde Layla.

— quizás se esta dando cuenta que eligió mal. Casi puedo sentir pena él.— Hades habla con un tono burloso.

— mejor olvidemos eso. Espero que su excelencia haya venido dispuesto a darme el regalo que he pedido.— pasa su mano sobre el pecho del pelirrojo.

— lo traje, pero este no es el lugar, no queremos dar mala imagen.— responde.

Layla sonríe, ambos siguen bailando, hasta acabar con la primera pieza, ambos hacen una reverencia y Layla sujeta el brazo de Hades para salir de la pista, mientras que otros deciden bailar. Denis se acerca a ello ofreciendo su mano.

— me gustaría poder bailar con usted, señorita Amary.— sonríe con amabilidad.

— me temo que eso sería inadecuado alteza, soy una dama comprometida.— responde Layla.

Justamente eso es lo que Denis debió decir en cada fiesta donde bailaba con Felicia. Denis aprieta la mano con molestia, pero sabe que no puede causar un alboroto, así que se retira y saca a Felicia para bailar. Layla y el duque aprovechan para salir juntos al balcón, Layla respira con profundidad, apoyando sus manos en el barandal del balcón, ese sitió era agradable. Hades cierra las cortinas y la puerta, para evitar ser molestados y así no escuchan muy fuerte el sonido de la música. Layla sube a sentarse al barandal y estira los brazos.

— esto es refrescante.— menciona.

— debe tener cuidado, si cae saldrá muy herida.— le previene Hades.

— ¿usted cree?, debería probar.—

Layla se deja caer de espaldas, pero Hades rápidamente la agarra de la cintura para evitar que caiga y Layla aprovecha para reincorporarse, abrazando al pelirrojo del cuello y sin que este se lo espere, la joven une sus labios a los suyos en un beso, era solo roce de labios, pero Layla busca profundizar, aunque Hades quería regañarla por lo que hizo, rechazar ese beso era imposible. Lo corresponde, volviéndose un apasionado beso, con sus labios saboreandose entre si, hasta sentir que sus lenguas se entrelazan.

Denis quien los había visto salir, quiso buscarlos, así que nisiquiera termino su baile con Felicia, pero al apartar un poco la cortina, la escena que vio, fue a la pareja devorandose en un apasionante beso. Denis apretó los puños furioso, le enfurece saber que Layla con Hades es capaz de besarlo, mientras que a él, nunca le permitió esa cercanía. Se dio la vuelta y se aleja, Felicia al verlo se acerca sonriente para decirle que la acompañe a otro baile, pero este la ignora siguiendo su camino hacía la salida.

Hades y Layla continúan con su beso, ignorando que hayan sido vistos, aunque no es como si eso les importará en ese momento. Hades mantiene sus manos en la cintura de la chica, presionando estas, mientras pega su cuerpo al de ella, gracias a que la chica ha separado las piernas y las ha enredado en la cintura del pelirojo. Ambos ahogan suspiros, sin dejar de degustar sus lenguas, hasta que el aire fue necesario, se separan apenas unos milímetros mientras respiran con agitación.

— parece que su excelencia se emocionó de más con un solo beso.— sonríe ladina.

Layla empuja un poco su cuerpo hacía Hades y este se sobresalta por el rose y aunque quiere apartarse, las piernas de Layla no lo permiten.

— es usted una dama hermosa, es normal que reaccione así.— responde algo nervioso.

— lo se, tal vez no pueda ver, pero mi cuerpo también reacciona a un hombre tal viril como usted.— le susurra cerca de sus labios.— ¿debería invitarlo a mi alcoba?

— sin duda es algo que desearía en este momento, pero, no así. La haré mía en nuestra noche de bodas.— acaricia sus labios.— y le aseguro que esa noche no dormirá.

— eso me gusta, estaré ansiosa por esa noche.—

Ambos escuchan que Celestine los llama, así que Layla se acomoda el vestido y sale primero, dejando a Hades para que se tranquilicé. Celestine la regaña porque se desapareció cuando debe de estar presente en su fiesta y es que sus amistades preguntan por ella.

\[¡oh! El gran Hades Mondragon, el dragón de las espinas, quedo caliente con los besos de una jovencita, esto es digno en enmarcar.\] Se escucha una voz en eco.

— no deberías espiar de esa manera, en mi noche de bodas no estarás presente.— le responde.

En la pared, se puede ver la sombra, cuyo aspecto es como el se un oso parado en dos patas y solo sobresalen los ojos amarillos.

\[Iugh! No soy un depravado, majestad. Y tenga por seguro que no necesita decirlo, me iré de inmediato.\] Responde aquella voz.

Hades solo sonríe ladino. Ya que se ha "calmado", decide regresar a la fiesta, invitando nuevamente a Layla a bailar.

Por otro lado, Felicia ya no encontró al príncipe, aún cuando este le dijo que sería su acompañante. Se lo hizo saber a la duquesa, así que esta solo se enoja, hasta ahora el príncipe siempre ha sido amable y mostrado interés en Felicia, pero ahora, parece estarse alejando, incluso creyó que le pediría matrimonio y hasta el momento, no ha mostrado tener intenciones de hacerlo.

Y así, esa noche de fiesta termino sin ningún inconveniente, Hades iba de regreso a su residencia, pero no podía evitar sentirse satisfecho por lo sucedido, aunque quizás será difícil aguantar hasta la boda, pero quiere hacerlo bien, quiere hacer ese momento especial para Layla.

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