Un Hombre Poderoso

...Semanas después...

Pasaron cuatro semanas desde que Marcia le confesó a Cecilia lo que vio. Desde entonces, Teresa entró a trabajar como una empleada más de la mansión Zamora.

Por ahora, la chica no ha podido encontrar ninguna prueba de la infidelidad de Paola con Antonio, los dos se han mantenido alejados.

Esa mañana, Teresa conversaba con Cecilia por celular, ya que, no podía verla en persona, era demasiado arriesgado si alguien las ve hablando.

______ ¿Cómo van las cosas en la vieja mansión Zamora?

______ Aburrido, bueno, lo único emocionante que pasó en todas estas semanas fue la visita de una mujer llamada Cataline.

______ Por lo que entendí es la amante en torno de tu hermanito Javier. La mujer vino a reclamarle a Paola por algo sin importancia, la llamó ramera sin oficio, bueno, en eso no se equivocó, ya que, se mete a la cama con el suegro.

Cecilia sacó un cuaderno del cajón de la mesita de noche. Escribiendo el nombre de la amante de Javier, quizás Lorenzo la investiga, podrían sacarle algo con que destruir la imagen intachable de su medio hermano.

______ Bien, sigue escuchando todo, ¿has puesto las cámaras en la habitación de Paola y de Antonio? _____ Le pregunta Cecilia.

______ Sí, sólo rezo para que no se den cuenta. De lo contrario, vas a tener una amiga, la cual deberás llevarle flores cada fin de semana a su tumba. ______ Responde con miedo Teresa.

_______ Lo prometo, te llevaré rosas blancas todos los fines de semana. _____ Bromeó Cecilia.

______ Es en serio, Cecilia. Si esa mujer me descubre, me mata. Me mata, y no es una broma. _____ Teresa en más conoce a Paola, más miedo le tenía.

Cecilia se levanta de la cama donde había permanecido sentada. De pronto, siente un fuerte mareo, por lo cual, deja caer el celular al piso.

_______ ¡Cecilia! Cecilia, ¿Estás bien?

Volvió a sentarse en el filo de la cama. Se quedó quita por algunos minutos, inesperadamente, siente ganas de vomitar, corre al interior del baño, donde vomita todo lo que desayuno.

Al sentirse mejor, se lava la cara con abundante agua fría. Vuelve al dormitorio y ve que todavía Teresa está en la línea.

______ Lamento, preocuparte.

______ Me siento algo mareada, quizás fue algo que comí por la mañana.

______ ¿Desde cuándo te sientes así? _____ Preguntó Teresa.

_______ Mmmm.

_____ Hace un par de días. Creo que iré a ver al médico, después de la boda. _____ Contesta Cecilia.

______ Para la boda solo faltan dos semanas, deberías ir antes. _____ Insistió Teresa.

______ No tengo tiempo. En los últimos días, he estado muy ocupada. Lorenzo y yo queremos que todo salga según lo hemos planeado.

______ Lo que siento ahora solo es un malestar pasajero. _____ Termina por decir Cecilia.

_____ Ceci, no estarás enferma de otra cosa, por ejemplo de un embarazo. ____ Teresa le comentó a su amiga lo que pensaba.

El rostro de la chica se puso pálido.

_____ ¡Por Dios, Teresa, no digas locuras!

_____ Lo que hay entre Lorenzo y yo, solo es una alianza para vengarnos de la familia Zamora. _____ Solo la idea de quedar embarazada, le causo escalofríos a Cecilia.

______ Me vas a decir que no sea han acostado. Qué no han hecho el delicioso más de una vez.

Cecilia abre asustada los ojos, por más de una vez olvidó cuidarse. Golpeó ligeramente su frente.

______ No... No, no... ____ Susurró continuamente.

______ Ves, te lo estoy diciendo. Puede que ahí dentro esté creciendo una pequeña Cecilia o un pequeño Lorenzo. Dicen que el hombre es quien decide el género del bebé.

______ ¡Suficiente! _____ Exclamó nerviosa, Cecilia.

Solo de pensar en esa posibilidad, su corazón quería salir corriendo de su pecho. No sabía como iba a reaccionar Lorenzo al saber que podría estar embarazada de él.

Ambos fueron muy claros cuando hablaron, su matrimonio solo iba a durar hasta que se vengaran de la familia Zamora y después cada quién seguirá con sus vidas por caminos diferentes.

______ Piensalo, quizás no sería tan malo que salgas embarazada del señor Córdoba. Es un hombre muy guapo, tiene defectos como todos los demás, pero se pueden terminar por enamorar.

..."Ya estoy muy enamorada de él" ____ Pensó Cecilia acariciando su vientre....

______ Teresa, terminaré la llamada. Debo hacer algo importante.

Cecilia termina la llamada con Teresa, de inmediato toma el bolso y sale de la recámara.

______ Señora, ¿va a salir?

_____ Sí, dile al chofer que prepare el auto. ____ Ordenó Cecilia.

Mientras ella iba a comprar una prueba de embarazo casera. A Paola y a Eugenia les llegaba la invitación a la boda de Lorenzo Córdoba.

_____ Nunca había escuchado hablar de ese hombre. "Lorenzo Córdoba"

_____ Se nota que mi hijo te saco de la pobreza. _____ Eugenia le echó en cara a Paola no venir de donde mismo que su hijo.

_____ Entonces, ¿Cataline sí?

Eugenia manifestó una clara molestia.

_____ Es verdad, vales lo mismo que esa muerta de hable, debería ubicar tu lugar. Si no fuera por Marcia, ahorita estaría siendo la amante en turno de mi hijo. ______ Exclamó sonriente Eugenia.

..."Maldita bruja, pronto te tragaras cada uno de tus insultos"...

_______ No, me comparé con esa mujer. Yo soy la esposa y ella solamente es un pasatiempo para mi esposo. _____ Aclaró Paola.

_______ No, querida. Cataline, es más que una amante para mi hijo. Es la mujer que lo a dominado. Si quieres seguir siendo la esposa y no convertirte en la ex, usa más el cerebro que tu cuerpo.

Paola golpe ligeramente la mesa de cristal delante de ella con sus dedos.

______ Me caes bien, Paola. Eres muy similar a mí, la única diferencia entre tú y yo, es que yo si usó la cabeza, y desde hace mucho tiempo me hubiera quitado del camino muchos obstáculos.

______ Me entiendes, ¿No?

Eugenia se pone de pie, colocando sus manos encima de la mesa. Mira a Paola con una gran sonrisa.

_______ Yo no soy solo la esposa de Antonio porque así lo quiso. Soy y seré su esposa porque me conviene... Yo nací y seguiré siendo la esposa de Antonio Zamora por el resto de mis días, porque así lo quiero.

Al enredezar su cuerpo, le dice unas cosas más a Paola.

_____ Lorenzo Córdoba es el heredero al trono de un imperio muy poderoso. Podría hundir a la familia más poderosa con tan solo tronar sus dedos.