Leonardo Mendoza se reencuentra después de muchos años bajo circustancias adversas, con la mujer que siempre deseo para él desde el momento que sus miradas se cruzaron, y que por situaciones que él aún desconoce ella lo rechazó...
Más ahora aprovechará tenerla nuevamente cerca para conquistarla, porque para él es evidente que ella aún se siente atraída por su presencia...
. - ¡Esta vez si serás para mí, mi negra hermosa...!
ESPERO DISFRUTEN DE ESTA NUEVA HISTORIA DE AMOR... SALUDOS Y BENDICIONES 😉 🙏 😘
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CAPÍTULO XXI INCOMODIDAD
Ay Dios mío, cuantas calamidades nos creamos nosotros mismos... Y toca hacer de tripas corazon y verle al menos algo de positivo a toda esta situación, y la de este caso, es sin duda el regreso de mamá. Me encanta que haya abierto los ojos y que mi hermano y yo la tengamos a nuestro lado nuevamente...
A pesar de que supongo, que cuando se solucione lo de gabo, es que ella se hará consciente de su propia condición, y desde ya estoy rogando porque no se vuelva a ir, con plena conciencia por supuesto, de que tampoco puedo ser egoista, si ella lo ama, no vale que sufra, y eso de estarse debatiendo entre dos amores, debe ser duro...
Ya no quiero ni juzgar, ni justificar a mi mamá en sus decisiones, más sostengo que siempre el del problema ha sido Darren por no aceptarnos como somos, especialmente como los hijos de la mujer que dice que amar...
En fin, muchos problemas para recargarme ahora con esto... Sólo deseo compartir mi alegría de tenerla de vuelta con Carly, así que le marco...
. - Mi negra ¿Qué ha pasado?
. - Hola amiga; primero las buenas noticias, después la regulares... - No las voy a declarar aun como malas, no lo sé pero tengo fe en Leonardo - Sé que estas en horario de trabajo, pero no me aguanto...
. - Ay, ya me has llenado de curiosidad, habla que el gruñón esta tragando... - Ambas nos reímos, me da mucha risa como ella se refiere a su jefe - Y por supuesto, la buena noticia es...
. - Siéntate, no te vayas a caer... ¿Lista?
. - Nojodas Natalia, habla de una vez... Ya sé, soltaron a Gabriel - Sentencía y yo suspiro por tener que desilusionarla.
. - No, esa es parte de la mala y ya te adelantaste - Le reprocho, así que continuaré con esa - El fiscal solicio le negaran la fianza, ahora mismo voy saliendo a hablar con Leonardo, solo él puede revertir esto...
. - ¡Su madre! - Suelta con sus normales expresiones, y yo vuelvo a reír, agradezco tanto estos momenticos - Bueno mi negra, confiemos en que Leonardo pueda interceder, él realmente tiene la voluntad de ayudarte, por favor amiga, sé sincera con él, compromete con su causa ¿Sí?
. - Lo haré, la verdad es que se lo debo, ya le hemos causado muchas molestias... - le digo, aunque hay algo de Leonardo que dudo haya cambiado de la noche a la mañana, y es su empeño de acusar a David... Sin embargo, intentaré que aclaremos toda esta situación.
. - Me alegra escuchar eso mi negra, Y entonces la noticia buena es...
. - Mamá ha vuelto y para quedarse - Suelto de una sonriendo y me imagino su cara, ella sabe cuanto hemos sufrido su ausencia...
. - !Mi negra! ¿En serio? debes contarme todo luego, pero dejame celabrar la alegria que deben estar sintiendo tu y gabo amiga, me alegra mucho que mamá Sara haya recapictado, los hijos deben ser siempre primero...
. - Si, coincido contigo, ya lo sabes, y yo la veo muy decidida, aunque pues no sé, ella debe amarlo, y si la busca... - Dejo manifestar ese mi temor...
. - No pienses eso, ella ya debio entender que si él no ama a los becerros, realmente tampoco a la vaca....
. - Jajaja ¿Estas llamando a mi mamá vaca? !Tonta!
. - Jajaja nooo, así dice el dicho... Mi negra, me alegra volver a escucharte reir...
.- Ummm gracias a ti amiga... ¡Adoro tenerte!
. - Sabes que tu y yo para siempre amiga... te amo y debo dejarte, porque ya los cuatro estomagos del jefe quedaron saciados...
. - Jajaja si el hombre te llega a escuchar te quedaras sin empleo...
. - Si capaz, bueno te llamo cuando los vaya a vaciar... - Jajaja yo no paraba de reír - Para que me cuentes como te fue con Leonardo... !Ahh y no vayan a besarse, y si lo hacen tambien me cuentas!
. - Jajaja cuelga ya tonta... - Me lanza besos y corta la llamada...
Mientras conducia, continue riendome, no sé si realmente por recordar las bromas de Carly o por los nervios de ver a Leonardo y todo lo que eso implica...
Cuando llegué a la clínica, donde funciona la oficina de él, la relajación que había logrado al hablar con Carly, se esfumó y los nervios comenzaron a atacarme de tal forma que debí comenzar a respirar poco a poco, en tanto daba cortos pasos al lugar donde me indicaron lo podía encontrar. La realidad es que no quisiera llegar, aunque sé que es otro motivo que me trae, verlo siempre es confuso, porque él remueve muchas emociones en mí, que obviamente no debo sentir...
. - Buen día... - Saludo con una sonrisa a la chica que está dedicada a su trabajo en un escritorio cercano a la oficina. Ella levanta la cabeza de los papeles, y se me queda mirando fijamente... Me supongo yo, que como le pasa a muchos, le parezco un bicho raro, entonces internamente resoplo, ciertamente no somos muchos, pero los hay, no soy la única negra de ojos verdes en este país. En vista de que ella no reacciona, le vuelvo a hablar - ¿Puedo hablar con el Señor Mendoza por favor?
. - Oh sí, deje la anuncio - Me dice con una sonrisa receptiva que ahora me agradó, y tomá el aparato para marcar - Tiene usted unos ojos hermosos... - Expresa aun embobada antes de que le respondan al otro lado de la línea...
. - Muchas gracias - Le sonrio genuinamente, hoy a sido de las pocas personas que halagan en vez de críticar, la escucho anunciarme, para luego colocar el telefono en su lugar...
. - El señor la va a recibir, adelante... - Le agradezco y me acerco con mucha pausa a la puerta, antes de abrirla respiré profundo y exhale.
. - Buen día nuevamente Natalia - Me dice Leonardo, nada más abrir y dejarme ver, lo miro a él, pero para no perturbarme aparto la mirada, y es que observo que hay alguien más sentado en una de las sillas frente a él...
. - Hola, si estas ocupado puedo volver en otro momento, no es la hora que me pediste venir, pero... - Comienzo a parlotear a modo de disculpa por interrumpir su trabajo.
. - Natalia Brown... - Dice este hombre y se levanta volteando hacia mi, al reconocerlo como el gran amigo burlon de Leonardo cuando estabamos en la universidad, mi rostro cambia a uno más austero... - ¿No me recuerdas? - Me pregunta frunciendo el ceño, pero con una sonrisa en sus labios...
. - Si, lo recuerdo muy bien... - Le digo, igual de seria, miro a Leonardo, no sé porque una mala sensación se apoderó de mi...
. - Me da gusto saludarte despues de tanto tiempo, no has cambiado mucho - Dice mirandome descaradamente de arriba abajo, ¿Acaso se esta burlando de mi este crétino? ¿Qué no ha madurado aún?
. - Tampoco usted... - Le dije con toda la ironia que pude.
. - Por favor tuteame... - Me extiende la mano, que veo por unos segundos eternos, pero que al ver que él no retira la tomo, y del mismo modo la suelto...
. - Natalia, por favor sientate... - Me pide Leonardo señalandome la silla que esta desocupada...
. - Puedo volver a la hora pautada si estas ocupado - Le digo mirando a su amigo...
. - No, no te preocupes Natalia, yo ya me retiro, nuevamente un placer saludarte... - Me sonrie, y yo solo asiento, luego se voltea a despedirse de Mendoza, al irse veo a Leonardo mirarlo, negar y sonreir, y volteo, Roy disumula lo que estaba haciendo, me sonrie y despide con la mano, capté que alguna seña le estaba haciendo...
. - Nada a cambiado por aquí... - Comento con desagrado volteando los ojos...
. - ¿A qué te refieres? - Pregunta Leonardo, guardando una carpeta en la gaveta de su escritorio...
. - Los años pasan, pero algunas actitudes no cambian...
Dije algo frustada de ser testigo que los patrones de comportamiento de estos dos parecen seguir siendo los mismos, siguen actuando como unos adolescentes inmaduros... !Pero mayor fristración me da, ser yo nuevamente la causa de sus burlas!