Cuando El Reino Colmillo y Sombra Era una de las Poderosas y temidas por su generaciones de Reyes Alfas , con la espera de un nuevo Rey, todo dio un gran giro al tener una Niña Alfa llamada Ema.
Su Poder estaba en juego como su corona, no la creían apta, su vida fue criticada y usada para benéfio de muchos enemigos al ser una niña dulce y vulnerable.
La tomaron de menos, cuando su tortura escalo hasta una noche donde su mejor amiga la mató en un intento de celos por un el amor del Alfa Lucas quien era el más poderosos y deseadas por todas. La manada fue tomada y traicionadan por su tio lleno de odio y envidia hacia el Rey, tomo el control, llevando a su hijo ser el nuevo Rey Alfa, dando una muerte terrorífica a su hermano y su familia.
Pero la muerte es algo misteriosa, pues en el cuerpo de Ema recae el alma de una joven totalmente diferente al resto, una máquina mortal llamada Cecilia.
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Ema durmió muy a gusto, era como si su cuerpo se hizo uno en su cama, ya estaba lista temprano, uno de los guerreros Gama de su padre vino a buscarla para sus clases.
- No creo que sus entrenamientos sean diferentes a loa que yo sé - pensó viendo cada movimiento de los soldados.
– Bien... Hoy tenemos una nueva compañera- dice el Gama Cesar, Todos miraron a Ema, pues la conocían muy bien, sus miradas no fueron desapercibidas por ella.
El entrenamiento fue tranquilo, Ema le agarro la mano al instante, mientras exportaba bien los de su vida pasada,
– Bien, el último ejercicio es pelea cuerpo a cuerpo - dice el Gama Cesar- Hoy es tu primer día Alfa.. asique
–Lo haré Gama, no vine a mirar- dice firme, el Gama asintió
Ema se paró y el Gama dividió en grupo, el grupo que le tocó se burlaron y bufaron al tener que pelar con ella.
– Quería Ema... No pienso ser suave contigo- dice Paolo el más fuerte del grupo con burla asiendo que los demás rían
– Lo que tú digas Princesa - responde Ema, Paolo frunció la ceja por su burla
El Gama sonó el silbato empezando la pela, Paolo atacó directo, pero Ema sonrío, agradecía recordar todo su arduo entrenamiento mortal, esquivo su movimiento apareciendo en su espalda con una patada rápidamente haciéndolo volar.
– Mierda... Esto es increíble- sonrió al sentir su cuerpo tan ligero, era la pura gloria.
Todos quedaron mirando ese momento sin creer, pues Ema nunca entreno con ellos, y ni quiera corría antes.
– ¿Qué paso? Apenas empezamos y ya estás llorado perrito - se burla
Paolo se levantó furioso sus ojos estaba rojos su lobo estaba queriendo salir
- Veo a tu lobo y te suspendo Paolo- grito el Gama, Paolo gruño controlándose
–Huy... Parece que el cachorro fue regañado- dijo Ema en su cara
Paolo ataque, pero los golpes y como Ema se enredó bajo sus piernas haciendo que caiga era imposible agarrarla. Paolo se enfureció al verla como se reía en su cara mostró su lobo agarrándola de los pelos en un movimiento rápido.
–Estás muerta escoria- dijo con su voz gruesa
– Deja de ladrar sarnoso- dice Riendo mientras doblo el brazo y terminando enredada en su cuello con sus piernas dejándolo sin aire
– Alfa... Alto lo matará- decía El Gama
–¿Te rindes? - decía Ema a Paolo que luchaba.
– Ssss..ii- dijo quedando casi inconsciente.
Ema lo soltó, agitada estaba exhausta, pero más que extasiada por su resistencia.
Todos la miraron en silencio, Paolo se levantó cambiado hacia ella, El Gama se preparó, seguro la atacaría
– Dime.... ¿ qué fe eso? Donde los aprendiste- dice Paolo
Ema lo miro, tomó su agua y solo se fue, no estaba para hacer amigos.
–Lo veo mañana Gama, fue divertido - dice yéndose, aprovecharía a correr hasta el Castillo le encantaba como se sentía. Paolo tomo su mochila siguiéndola detrás
En el camino Ema apuro su paso al ver a Paolo detrás, convirtiendo su carrera en competencia, pero Ema ganó por ser una Alfa, dejando a Paolo exhausto.
– Sí... que eres ... Rápida .. Alfa - decía agitada tirándose al piso
– ¿Qué quieres?
– Ya te lo dije, quiero saber como aprendiste esos movimientos, quiero que me los enseñes - se sienta
– Mmmm No- dice queriendo irse
– ¿Porque? Acaso tienes miedo de mí - dice burlón
– Porque enseñaría al alguien que solo se burló de mí durante años... Ch , déjame en paz - dice fríamente yéndose rápido.
Paolo no pudo decir nada pues estaba exhausto de seguirla y ya no la alcanzaría.
– Mierda.. - lanzó frustrado, tomó su mochila y se fue del lugar.
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