Kieran Darkhunter, el poderoso Archiduque Darkhunter, Primer general de las tropas del reino y la caballeria de Vylonia comprometido con la princesa heredera de un misterioso reino del cual solo se le conoce el nombre Mystara.
Lyra Faerwyn Princesa heredera de Mystara, encantadora, valiente e inteligente, esconde muchos secretos que no se deberían conocer o podrían desatar una catástrofe.
Ninguno ha visto al otro, no se conocen y no se quieren casar, pero el destino es muy fuerte para desafiarlo, no te pierdas esta emocionante aventura.
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- Está bien, entiendo, te puedo hacer otra pregunta. – Dice Lyra cambiando entonces un poco la estrategia, pues sabe que sacar información de esos hombres no sería sencillo, pero tampoco imposible.
- Puede preguntar. – Responde el mirándola, un tanto intrigado por su personalidad, las jóvenes de la época son tranquilas, bajan la cabeza ante hombres como ellos, pero esa chica era diferente, habla con firmeza y no teme ofender al preguntar de más. – Solo que no se si le puedo dar una respuesta, dependerá de su pregunta. – Comento Helio, más por curiosidad que otra cosa, pues el mejor que nadie conoce la discreción, al ser el capitán del segundo escuadrón de las tropas Darkhunter, donde su familia ha servido por años al archiducado y conoce desde niño a Kieran, creció entrenando con él, así que sabe perfectamente que puede decir y que no.
- Ustedes, son soldados, ¿no es así? – Pregunta Lyra en voz baja para que solo Helio escuche, aunque esta casi segura de la respuesta.
- ¿Por qué lo dices? – Cuestiona Helio tratando de ocultar su sorpresa, esa chiquilla es más osada de lo que parece, nadie en su sano juicio preguntaría algo así tan directamente, mucho menos cuando ellos están viajando disfrazados, lo que se entendería como que no quieren mostrar su identidad. Pero, ahí estaba ella preguntando como si nada.
Lyra entendió inmediatamente la actitud de Helio por lo que añadió.
- No te preocupes no se lo diré a nadie. – Prometió levantado una mano y poniendo la otra en su pecho en señal de juramente. – Es solo que es bastante obvio para un buen observador, su disciplina al actuar, la postura, además que en el enfrentamiento de hace un rato coordinaban muy bien y es claro que son muy buenos en combate. – Explica, detallando lo que pudo observar en el poco tiempo que lleva con ellos. – Además estoy casi segura que él. – Dice señalando hacia donde está sentando Kieran. – Es un alto mando, casi podría decir que un general, pues tu y el que está por allá. – Señala a Eamon. – Están por encima del resto, pero por debajo de él. – Agrega orgullosa de su análisis.
- Parece que eres muy observadora, pero deberías ser más cuidadosa, ¿acaso no sabes que muchos han muerto por menos? – Comenta el capitán, levantando una ceja hacia la intrépida chica que está a su lado, detallándola pues, aunque de entrada no parecía, la verdad es que es muy inteligente, su análisis era bastante preciso algo que no se logra en poco tiempo, además su actitud, la forma en la que rápidamente pudo deducir quienes eran aun cuando se habían ocultado tan bien. – ¿Quién eres? – Pregunto seriamente cruzándose de brazos.
Pues esa chica que parecía tan inocente, al parecer no lo era y podía ser un peligro para ellos. Pero Lyra sabiendo que quizás se pasó un poco decidió aligerar las cosas, así que sonrió
- Le aseguro que no soy represento ningún peligro para ustedes. – Aseguro mirando directamente a los ojos de Helio. – Solo quiero saber con quién estoy, más por auto protección que otra cosa, respecto a mi análisis es el resultado de a ver conocido a diferentes tipos de personas en mis viajes. – Añade ella levantando su barbilla, satisfecha con sus aprendizajes.
- Ya veo. – Comenta Helio, aunque sigue muy intrigado con esa joven.
- Bien, entonces sí que tengo razón. – Sonríe Lyra satisfecha, pero Helio no dijo nada, tampoco era necesario hacerlo. – Muy bien no necesitas responder, bueno sé que de todas formas no lo harás. – Sonríe Lyra añejándose de allí para ir con Eira quien está bastante asustada por todo lo que ha sucedido.
- Nos vamos. – Los interrumpo Kieran dando la orden de seguir el camino.
Mientras tanto los bandidos habían regresado, con la noticia de que las mujeres habían sido rescatadas por un grupo de hombres que estaban muy bien armados, por lo que el hombre que aún estaba en cama determinó que debían ser los mismos hombres que las ayudaron la noche anterior y que lo golpearon así.
- Pensé que eran los mejores. – Comenta con clara molestia el hombre y aunque al líder de los bandidos le encantaría refutar, debe admitir que fallaron, pero para compensar un poco su falta le conto sobre el pase que llevaba una de las mujeres.
- ¿Es eso cierto? – Cuestiona el hombre adolorido.
- Lo es, yo lo vi con mis propios ojos, así que, si confía nuevamente en mí, déjeme ir por ellas, no siempre van a estar con esos hombres, seguro podre acabar con esas molestas mujeres y obtener el pase. – Sugiere seguro.
- Bien hazlo, pero si fallan nuevamente deberán devolver el adelanto que les di por el trabajo. – Dice el hombre.
- Acepto. – Declara el otro seguro de que esta vez tendrá éxito.
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- ¿El archiduque Darkhunter no regreso a su territorio? – Cuestiono el duque Bloodfist curioso, ¿A dónde podía ir?
- No señor. – Responde uno de sus hombres que se encarga de estar al tanto de todo lo que sucede no solo en el palacio y en la corte sino también en las casas de los nobles más importantes del reino, donde han logrado infiltrar suficientes personas para su red de información. – Por lo que pude averiguar el archiduque se dirige hacia el reino de Mystara en una visita a su prometida. – Informa.
- Imposible. – Asegura el duque. – La boda es en muy poco tiempo, ¿Por qué haría una visita ahora? – Cuestiona incrédulo.
- Mi señor, tal parece que era una visita programada desde hace mucho tiempo, para que la princesa conozca a su prometido y el a ella. – Explica el hombre de acuerdo a lo que pudo averiguar de su infiltrado en el palacio.
Las palabras de su empleado ponen a pensar al duque pues si bien es cierto no le parece muy lógico, también tiene sentido que la princesa de Mystara quisiera conocer a su prometido antes de la boda, además que haya una visita oficial afianzaría la alianza que busca el ex archiduque, pero aun así le parece muy conveniente el momento.
- Sabemos algo sobre nuestros hombres, ¿han enviado alguna noticia? – Pregunta el duque.
- Mi señor, la última carta que enviaron fue desde Kelvex donde está la entrada al bosque, es posible que desde allí no tengan forma de comunicarse con el exterior. – Sugiere el hombre a lo que el duque asiente, pues sabe que eso es verdad, desde el bosque sería muy difícil comunicarse.
- Bien, Tienes razón, aun así, envía a alguien a averiguar cómo está la situación en las aldeas y pueblos más cercanos a Avalon, que no entren allí, solo que se queden vigilando e informan cualquier cambio. – Ordena, pues necesita verificar que nadie más haya enviado personas en busca del objeto que desde ya ve como suyo, además para saber que está pasando exactamente con el archiduque pues su intervención podría arruinar sus planes.
- De inmediato señor.
