Obligada A Casarme

Después de hablar con Francesco, Fernando subió a su habitación. El aliento alcohol, iba penetrando en su ropa.

Antes de entrar a su recámara, Fernando recogió todas las bolsas que Francesco dejó en la puerta. Al entrar miró las luces de la habitación apagadas, pero la luz de la luna alumbra claramente a la mujer dormida en su cama.

Fernando dejó cuidadosamente las bolsas sobre el sillón sin hacer ningún ruido que pudiera despertar a Nathalie.

Enseguida fue al baño para darse una ducha y poder dormir al lado de su esposa. La ropa del hombre fue cayendo lentamente de su cuerpo, mientras los recuerdos del pasado invaden su mente.

El agua helada mojó por completo el cuerpo de Fernando, sus lágrimas se mezclaban con el agua que caía por su rostro.

Luego de un tiempo, Fernando salió del baño con una toalla cubriendo su cuerpo, se acercó a su guardarropa y tomó una pijama de seda.

Al escuchar un ligero ruido, Nathalie abrió los ojos, mirando la toalla caer del cuerpo de Fernando. La chica de inmediato volvía a cerrar los ojos con fuerza, por un segundo se imaginó que solo estaba soñando, pero luego los volvió abrir quedando atónita por ver todos los atributos de su esposo.

Fernando terminó de cambiarse de ropa, y caminó hacia la cama. Nathalie cerró los ojos y fingió continuar dormida.

Al ser una cama enorme, la chica se quedó en una pequeña esquina sin moverse, todavía al cerrar los ojos, el cuerpo completo y desnudo de Fernando se revelaba en su mente.

Fernando se acomodó en su lado, volteó a ver a la chica, y cubrió su cuerpo con la manta. Nathalie no se volvió, cerró los ojos con fuerza y no los abrió hasta la mañana siguiente.

Fernando todavía estaba dormido, cuando la chica se levantó de la cama cuidadosamente. Fue a darse un baño antes de bajar a la cocina para prepararse ella misma el desayuno.

Antes de ir al baño, Nathalie fue al guardarropa para echar una mirada. Sabía que no tenía ropa en esa habitación, por lo cual, tenía que buscar algo con que cambiarse, ya que no pretendía ponerse el mismo vestido que usó para la fiesta y tan poco se iba a poner unos zapatos tan altos como loa que había usado la noche anterior.

Al ver todas las camisas y ropa de hombre que había en el guardarropa, Nathalie se dio cuenta de que esa habitación era de Fernando, sintió una fuerte rabia por haber sido tan tonta de haberse metido en esa habitación, sin tan solo haberse informado antes.

______ Eres la mujer más tonta que haya conocido en toda mi vida. ¡Mira que venir a meterte en la boca del lobo! ¿Ahora cómo vas a hacerle para poder escapar?

_____ Por esta noche saliste bien librado, pero cuando quiera meterte la mano, ¿Quién se lo va a impedir? ¡Nadir! ______ La chica se regañó a ella misma.

Mientras tanto, tomó una de las camisas de Fernando, y también un par de zapatos cómodos, los iba a necesitar para poder andar por toda la mansión.

La camisa blanca de Fernando sería su vestuario por ese día, al igual que sus zapatos. Mientras arreglaba el problema de su ropa.

Fácilmente, Nathalie podía hacerse sus propios vestidos, lo había hecho por muchos años, en la mansión Mendoza. Ya que no pretendía deberle nada a Fernando.

Lo que no sabía Nathalie, es que a Fernando me molestaba demasiado que tocaran sus cosas, era algo que lo hacía enfurecer.

Sin tomar en cuanta nada, Nathalie fue al baño con la ropa que le robó a su esposo. Dejó todo sobre un pequeño mueble cerca de la tina.

Después se quitó la bota de seda que llevaba puesta y qué también era Fernando. La dejó cuidadosamente a un lado, para después, meterse en la tina.

Por más de media ahora la chica se relajó, parecía una niña con un juguete nuevo, nunca había disfrutado tanto de un baño.

Luego de bañarse, Nathalie se cambió y salió del baño con la esperanza de que Fernando no se hubiera levantado todavía.

Sin embargo, Fernando ya se había despertado mucho antes que ella, no obstante, había fingido continuar dormido para darse cuenta de lo que Nathalie hiciera mientras él dormía.

Al ver a la chica usar una de sus costosas camisas, Fernando abrió por completo los ojos.

_____ ¡Eres la mujer más estúpida que he conocido en toda mi vida! Era tan difícil que le echaras una mirada a las bolsas en el sillón. _______ Pensó Fernando furioso.

Al ver a la chica desaparecer de la habitación, Fernando se levantó de la cama y fue al baño a darse una ducha para poder ir a la empresa.

Al entrar miró todo bien acomodado, como si Nathalie nunca hubiera estado ahí. Fernando tenía que reconocer que era una mujer bien ordenada y que si usaba algo lo dejaba en su lugar.

Mientras tanto, Nathalie bajó a la cocina dejando a todos con la boca abierta. Emilio, al ver a la chica con la camisa de Fernando, sacó humo por cada uno de los foros de su cuerpo.

______ ¡Esto es demasiado! _____ El hombre no pudo evitar levantar la voz con fuerza.

La chica se detuvo antes de entrar a la cocina, volteó a ver a Emilio y le dijo.

______ No levantes la voz, mi cabeza quiere explotar. No puede dormir en toda la noche, Fernando es un tigre en la cama.

El color de la cara de Emilio cambió completamente. Quería salir corriendo de la mansión e ir a informarle todo a Elizabeth. Para que ella sacara a patadas a Nathalie de esa casa.

______ No me queda hermosa esta camisa. _____ Nathalie dio una vuelta completa para modelar la camisa blanca de Fernando en su cuerpo.

Emilio, estaba a nada de ir hasta donde estaba Nathalie y arrancarle la camisa de su cuerpo, pero se tuvo que controlar y prefirió retirarse.

La chica sonriente entró a la cocina. Tenía mucha hambre que se comería a un elefante completo.