Esta es la continuación de la primera novela de la saga, titulada; NO ES TU HIJO.
Cyrus Vidal, al nacer en una familia adinerada, crece sabiendo aprovechar el poder que le fue otorgado desde su nacimiento, logrando encontrar placer en el caos que el mismo causaba, aprovechándose de las personas a su alrededor y engañándolas.
Uno de sus mayores timos, era cuando se hacia pasar por su hermano gemelo, Ethan, logrando asi, tener lo mejor de ambos mundos, sin importarle quien saliera herido en el proceso de su diversión.
Aunque como todo, siempre aparece un rival, en el caso de Cyrus, se trataba de Nyra, la mejor amiga de Ethan a quien quería ver sufrir sin importar el costo.
Es asi como después de descubrir el amor no correspondido de la mujer por Ethan, Cyrus descubre la forma de verla a sus pies, "El y yo somos iguales, ¿quieres usarme como su sustituto?"
NovelToon tiene autorización de Gabriela Kienzler para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capitulo 11. Entre el amor y el placer
En la habitación de aquel hotel lujoso, la iluminación era tenue, a su espalda, una vista panorámica de toda la ciudad, a esa altura, las luces de los autos, parecían pequeñas luciérnagas que decoraban el paisaje, las personas que caminaban de un lado a otro, pequeñas hormigas obreras que viajan por montoncitos.
Frente a ella, se encontraba Cyrus, mirándola fijamente, era como si pudiera desvelar sus más recónditos pensamientos y deseos.
- ¿Qué sucede, Nyra? - le dice acercándose a ella, podía notar como los nervios se apoderaban de ella - ¿tienes miedo? – le dice tomando su mano
- ¿Por qué tendría que tener miedo? – le dice con una voz temblorosa, era divertido verla flaquear
- No sé, tal vez, de mi – le dice besando su mano y viéndola de forma sugerente
- Pues, no, no es así – le dice, mientras Cyrus continúa besando y subiendo hasta llegar a su cuello
- Si, después de todo, debes imaginar que estas aquí con Ethan – le dice al oído
- No necesito que me lo digas – le dice apartando la mirada
- Mírame, Nyra – le dice tomando su mentón y volteando su rostro hacia él de forma suave – dime, ¿Quién soy? –le dice en tono dulce
- Cyrus – le dice viéndolo fijamente
- No, recuerda, Nyra – le dice acercándose a sus labios – mientras estemos de esta forma intima, yo, soy tu querido, Ethan – le dice rozando sus labios.
La respiración de la mujer se agitó más, sintiendo el acercamiento de Cyrus, creyendo que este la besaría, pero al obtener la reacción que él deseaba ver, simplemente se alejó con una risita, no podía evitar disfrutar el burlarse de ella de forma tan descarada.
- Ahora, ¿Qué quieres que haga? – le dice al oído
- Q…quiero, quiero que me abraces – le dice
Obedientemente, Cyrus la toma por la cintura y la hala hacia él, después entrelaza sus brazos alrededor de ella, abrazándola de forma cálida. Una petición un tanto sosa, pero por ahora solo le seguiría el juego a Nyra, quería hacerla sentir segura y en confianza, de la misma forma en que se calma a un animal en el matadero, antes de darle el golpe de gracia.
- E… Es, Espera – le dice sintiendo los besos del hombre en su hombro, mientras halaba su camisa, dejando ver cada vez, más porciones de su piel desnuda.
- ¿No puedo? – le dice en tono sumiso
Como si todas sus defensas se hubieran desvanecido, de forma obediente, la mujer se dejó llevar por las caricias de Cyrus.
Al tocar su pecho desnudo, la mujer emitió un pequeño gemido espasmódico, seguido de su respiración agitada y los rápidos latidos de su corazón, el cual Cyrus podía sentir claramente en la palma de su mano.
El sabor de su cuerpo, la sensación de su piel desnuda, su voz excitada, la temblorosa respiración al sentir placer. Todas esas facetas que no conocía de Nyra y que ahora estaba devorando, era como contaminar un alma pura he inocente, tentándola hasta llevarla al punto en que ella sola se entregue por cuenta propia.
- Estas empapada, aquí – le dice tocando su feminidad, y la mujer deja salir un gemido - ¿puedo entrar aquí? – le dice introduciendo sus dedos
- N…No, e… Es… Espera – le dice tocando su hombro
- ¿Qué sucede? – le dice y luego besa su cuello, el interior de la mujer apretaba sus dedos- Nyra, ¿tú nunca has hecho esto? – le dice al oído, al instante la mujer lo observa con una expresión asustada – entonces, ¿es así? – dice con una sonrisa, pobre criatura, mira que caer en sus manos así sin más, justo con la persona que disfruta jugando con los sentimientos – tan tierna, tranquila, prometo que seré gentil – le dice besando la mejilla de la mujer, quien ya se encontraba perdida entre las feromonas de Cyrus
En el momento en que Cyrus desabrocho sus pantalones, dejando expuesta su erección, la mirada de Nyra mostraba curiosidad y temor.
- ¿quieres tocarlo? – le dice sugerente
- N…no – le dice avergonzada
- No sientas vergüenza, después de todo, yo ya he tocado de ti, todo lo que he querido – le dice tomando la mano de la mujer y poniéndola en su miembro - ¿ves?
Lo que comenzó como un ligero y débil toque lleno de inseguridad, termino por ser firme y con la confianza de tocarlo hasta el punto de saciar su curiosidad.
- ¿lista? – le dice rosando su entrepierna, preparado para estar en su interior
La mujer no respondió, solo se aferró a él, abrazándolo fuerte.
- Relájate, respira profundo – Le dice al oído en tono cálido, después de todo, era con Ethan con quien se suponía que estaba
El entrar era difícil, la mujer lo apretaba fuerte, aunque el calor y los espasmos de su interior, eran fascinantes, obviamente a ella también le estaba doliendo.
- Nyra, respira profundo – le dice suavemente – mírame, Nyra – le dice amablemente
La mujer se apartó un poco y lo miro a los ojos, mientras Cyrus acariciaba su mejilla y le daba un beso en el mismo lugar.
- Estarás bien, solo respira y aférrate a mí – le dice dulcemente
En ese momento, la mujer de forma obediente, respiro profundo y se aferró a su espalda, en el instante en que Cyrus, sintió que abajo era más suave, se movió y termino de entrar en ella.
- ¡Ah! – gimió Nyra, con un gran grito, mientras encajaba sus uñas en la espalda de Cyrus a causa del dolor momentáneo
- ¿Estás bien? – le dice Cyrus su respiración era agitada, no esperaba que se sintiera tan bien estar dentro de esa mujer
- S… Si – le dice Nyra asintiendo con la cabeza
- ¿Puedo continuar? – le dice besando su cuello
- Ok – le dice tímidamente
- Excelente – le dice sonriendo.
Los gemidos de la mujer llenaban toda la habitación, el aroma de sus feromonas se mezclaban, formando uno solo, mientras sus cuerpos se sumergían, con fuertes embestidas, queriendo llegar cada vez más profundo de interior, sintiendo sus espasmos, el calor entre extasió de placer, mezclándose con los deseos, la malicia y sentimientos no correspondidos.
