ENVOLTURA DORADA DE CHOCOLATE (Omegaverse)

El silencio dentro del auto era sombrío.

Afuera, el sol brillaba con esplendor, contrario al ambiente dentro del auto que era cortante.

En todo el camino de la empresa hasta el auto, Neo no pronunció palabra alguna, Elián lo llevó de la mano y aunque trató de conversar con el omega, Neo era renuente a hablar.

Elián estaba preocupado por él, sobre todo por el estado del omega al sentir el temblor en su cuerpo cuando estuvo entre sus brazos.

Pero ahora, por más que intentara, no podía hablar con Neo si este se rehusaba.

Solo podía conducir con la preocupación y tristeza invadiendo su cuerpo y expresándose mediante sus feromonas, se preguntaba si acaso había hecho algo mal.

El agarre de la mano del alfa sobre el volante empezó a apretarse con fuerza, en sus feromonas pronto se sintió su desesperación.

¿Acaso lo hizo esperar demasiado y por eso se molestó?

¿Debió cancelar la reunión?

¿Había dicho algo malo?

¿Qué sucede si Neo decide alejarse?

¿Qué hará si eso sucede?

Todas esas preguntas pasaron por la mente de Elián.

Ya en un punto crítico con sus pensamientos y feromonas revoloteando con desorden, una cálida mano se posó sobre su mano que apretaba con fuerza el volante del auto.

El auto se detuvo en ese momento al ponerse el semáforo en rojo.

Neo quien tenía su mano sobre la mano del alfa, entrelazo sus dedos con los de Elián y lo sostuvo con cuidado.

Sorprendido por el repentino toque, Elián se giró para mirar a Neo.

"Lo siento"

Neo se disculpó mirando también al alfa.

Si había alguien con quien estaba molesto, era con él mismo.

Estaba molesto por dejarse afectar por una figura del pasado que ni siquiera era uno de ellos, el temblor en su cuerpo solo le indicaba que era débil.

En momentos como estos en los que solía estar molesto, Neo solía mantenerse callado mientras pasaba el tiempo en su huerto en soledad, o encerrado en su habitación leyendo libros sobre agricultura cuando era un niño.

Un comportamiento repetitivo que siempre se mostraba en momentos como este.

Sin embargo, ahora había alguien a quien no podía ignorar, los nuevos sentimientos que comenzaba a sentir por Elián, eran diferentes a los sentimientos que tenía por sus padres.

Sumergido en su autodesprecio por ser débil, Neo había olvidado al alfa quien conducía a su lado, si no fuera por las feromonas llenas de desesperación del alfa, Neo no se habría acordado de él, y se sentía mal por ello.

"Siento hacerte sentir así, Elián"

"Hay muchas cosas que todavía debo aprender, y una de ellas es tomar en cuenta los sentimientos de los demás, sobre todo tus sentimientos que son importantes para mí"

"Siento que tengas que tratar con alguien como yo, lo siento", volvió a disculparse Neo.

Realmente lo sentía por Elián, al gustarle alguien como él que era complicado para los demás.

Elián, quien había permanecido en silencio mirando y escuchando a Neo, acercó la mano del omega que estaba unida a la suya para besarla.

"Tenemos tiempo para conocernos, así como dijiste", habló el alfa.

"Fui muy feliz cuando sugeriste el conocernos más, ¿cómo podría no ser feliz?, eres la persona más importante para mí, si algo te sucede o preocupa, espero que tengas la confianza de decírmelo"

Acercando otra vez la mano de Neo, Elián volvió a besarlo.

Aunque tenía curiosidad por lo que le sucedía a Neo, Elián sabía que no podía forzarlo a decírselo, pero cualquier cosa o persona que molestara a Neo, Elián se haría cargo.

Por el momento, era suficiente que el omega estuviera a su lado.

Un nuevo sentimiento surgió en Neo al oír las palabras de Elián, se sentía conmovido.

Llevado por el nuevo sentimiento, Neo desabrocho su cinturón de seguridad para darle un beso en los labios al alfa.

"Eres encantador, ¿lo sabías?", sonrió Neo con sus manos sobre el rostro del alfa.

"Espero que quieras conocer más sobre mis encantos", sonrió Elián volviendo a besar a Neo.

Las feromonas del alfa llenas de desesperación, comenzaron a disiparse poco a poco.

En el estado en que se encontraba Elián hace apenas unos segundos, Neo no creyó oportuno contarle todavía lo sucedido hace varios años, el alfa perdía rápidamente el control de sus feromonas.

...****************...

Este día no estaba perdido del todo, debido a la prolongada reunión y lo sucedido después, se habían perdido bastantes horas, pero aún quedaba el tiempo suficiente para pasar el resto del día juntos.

Por idea de Elián, decidieron pasar el resto del día en el huerto de Neo.

Y como ya era un poco tarde, decidieron pasar la noche en la tienda de campaña que compró el alfa en el camino.

Una amplia tienda de campaña se armó al lado del jardín.

Con un amplio espacio para que durmieran dos personas.

"Esta es la primera vez que comparto una tienda de campaña con alguien"

"Es bueno escuchar eso, soy el primero", sonrió Elián.

El alfa preparaba las camas separadas para poder dormir, se veía calmado, pero estaba realmente nervioso por dentro, tanto que las palmas de sus manos comenzaban a sudar.

"¿Es tu primera vez también?"

"... ¿Qué?"

"Compartiendo una tienda de campaña"

"... Oh, sí, es la primera vez que comparto una tienda de campaña con la persona que me gusta"

Alejando los malos pensamientos y nervios, Elián empezó a prender una pequeña fogata luego de terminar con las camas.

"No sabía que fueras tan hábil", elogió Neo al alfa.

"Es otro de mis encantos", sonrió Elián.

"Engreído", sonrió también Neo.

Era una bonita noche llena de estrellas.