Alessandra creía que estaba sola en el mundo, pero nunca se dio cuenta de que siempre estuvo rodeada de personas que la amaban. Ahora, como Diana, debe averiguar como llegó a este mundo, y en el camino aprender a expresar y defender el amor que siente por los que la rodean.
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Más que delicioso
El día de la degustación llegó y los chicos estaban ansiosos por probar lo que las chicas habían preparado.
William sólo esperaba encontrar a Diana, no sabía por qué se sentía tan raro, pero comenzó a buscarla entre los puestos de postres, y cuando la vio no pudo evitar pensar que lucía realmente hermosa, estaba entregando algo que parecían fresas, pero su color era muy diferente, [wow, cómo puede ser tan malditamente bella]. También había una especie de pastelillo oscuro, así que ya estaba ansioso por probarlo, pero cuando avanzó para ir a su encuentro…
Susana: (Gritó tan fuerte como pudo) Will, Will, Will, aquí estoy…
Esto llamó la atención de todos los presentes que inmediatamente comenzaron a murmurar que ella lo llamó no por su estatus o nombre, sino por un diminutivo, mostrando que son algo más. En esta sociedad hacer eso implica que ya han tenido intimidad, es decir, ella ya no es una chica pura.
William: (Susurrando) Susy por qué me llamas así frente a todos, te dije que sólo me dijeras Will cuando estemos solos.
Susana: (Inmediatamente comenzó a llorar frente a todos, aun así, hablaba bastante fuerte para que todos los escucharan) Perdóname Will, sé que me dijiste que fuera discreta con lo nuestro, pero es que me emocioné tanto de verte, que no pude evitar llamarte.
William notó que Diana lo miraba atentamente igual que todos a su alrededor, sin duda, ella debe estar malinterpretando toda la situación. Increíblemente hasta hace unos instantes lo único que deseaba es que ella lo mirara con esos radiantes ojos color menta y, ahora quiere que se lo trague la tierra.
Susana: (Sigue llorando) Perdóname Will, yo solo quería probar los postres contigo, compartir momentos felices juntos… (y se fue corriendo)
Pensó en alcanzar a Susana, pero era necesario aclarar las cosas, así que cuando William volvió la vista hacia Diana ella ya no estaba y su mesa estaba vacía, al final no pudo probar ninguno de sus postres. Desilusionado la volvió a ver unas mesas más adelante, al parecer, ayudaba a una de sus compañeras y cuando estaba por alcanzarla, fue llamada por el director y la profesora Townsend, ¿acaso el universo se confabula para separarlos?
Conde Davenport: Atención, atención, atención a todos. Muchas gracias por participar en la degustación del día de hoy. Creo que hablo por todos al decir que todos los postres fueron más que deliciosos. Pero, hay una persona que destacó de entre todos los demás y esa fue: la pequeña duquesa Diana Donnelly, un aplauso para ella.
Maestra Townsend: Permítame decirle señorita que es todo un honor contar con usted en el Club de Cocina, sus creaciones son toda una inspiración especialmente aquellos que hoy tuvimos la fortuna de probarlos. Definitivamente cada una de sus creaciones fue más que deliciosa, son muy afortunados todos los que alcanzaron una pieza.
Diana: Muchas gracias por sus amables comentarios, me alegra mucho que todos disfrutaran de mis postres, los hice con todo mi corazón y espero que lo hayan notado. Tengo entendido que el Club volverá a participar con nuevas creaciones en el festival escolar, así que los esperamos ahí, muchas gracias a todos.
William aprovechó para acercarse a Diana mientras recogían las mesas y las llevaban de regreso al Club.
William: Diana, espera un momento, ¿podemos hablar?
Inmediatamente el guardaespaldas y Emily se pusieron frente a Diana, como protegiéndola.
William: ¿A solas? Será solo un minuto.
Diana: Dicen que en el pedir está el dar y, por primera vez desde que lo conozco, lo escucho pedir amablemente hablar conmigo. Un minuto chicos, por favor.
William: Sólo quería decirte que Susana es sólo mi amiga, entre nosotros no hay nada más.
Diana: En serio, ¿Will? Jejejeje (William finalmente vio que le dedicara a él una hermosa sonrisa pícara y traviesa, aunque rápidamente se desvaneció). Mjmj... No necesita justificarse Alteza, entre nosotros no hay nada, no somos prometidos, compañeros, amigos, tal vez solo conocidos, así que, felicidades por su relación, es justo lo que deseaba ¿no?
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