Se dice que cada cien años la madre de todos los lobos reencarna para vivir una vida plena en la tierra por cierto tiempo, pero no se le a vuelto a ver a lo largo de quinientos años, ahora todo parece leyenda y escuchar sus historias pareciera un cuento de adas, pero todo eso cambiará con el nacimiento de Talisa.
NovelToon tiene autorización de Deba para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capítulo 19
"Pero que muchacha tan vulgar. No entiendo por qué mi hijo tiene que ir tras ella"
"Lo sé su majestad, pero ella es intocable. No quiere ser quien influye, pero como su madre debería buscar un mejor partido para Saac. Esa tipa no puede dirigirse ni ella misma, se imagina como lo hará con la manada. ¡Que la diosa nos ampare!"
"Dersi, será mejor que mantengas la boca cerrada si quieres seguir viniendo al palacio. Si alguien te oye no podré ayudarte, y aunque yo no apruebe a Talisa eso no quiere decir que tengo derecho a tomar decisiones a espaldas de mi hijo."
"Perdóneme su majestad, tiene mucha razón, no se en que estaba pensando" Maldición, ahora como haré para que Saac se vuelva a fijar en mí. Y para colmo está vieja no está de mi lado. Pensaba Dersi.
Las venas del rostro de Saac se habían sobresaltado, ver correr a Talisa de él lo irritó como nunca nadie se había atrevido.
No quería correr tras ella, así que pidió a sus guardias que la detuvieran. "¡Atrápenla!"
Saac estaba a pocos metros de mí, pero al ver a tres guardias frente a mí me hicieron parar, un instinto en mí no quiso permitir que me sometieran. Era como si mi cuerpo hubiera recordado y tuviera conciencia. Incluso yo estaba sorprendida, había tlaqueado al primero y a los otros dos los golpeé en un dos por tres. ¿De dónde saqué estos movimientos?"
Me sorprendió tanto que no podía dejar de sonreír, no hasta que Saac me tomo del brazo. Intente liberarme, pero el fue más fuerte y más rápido. Estaba inmovilizada.
"¿Intentaste a caso golpearme? Si sabes que todo aquel que atenta contra mí tiene pena de muerte"
"Lo siento, solo intento defenderme." Su cambio de actitud es muy repentino, hace dos días era tímida, ahora estoy viendo a otra persona.
"Así que te defiendes de mi. ¿Porque?"
"Mmm, bueno, la verdad no lo pensé bien. Puede ser que al no obedecer y que aparte me siguieras me sintiera acorralada. ¿Por qué te molestas todo el tiempo?"
"Porque me desobedeces, y me haces enojar"
"No hablo de mí, te pregunté por qué te observó. Con Lucas, Aiden, con todo el mundo incluido tu madre. ¿Estás tenso o es estrés? Porque si es el caso traje yerbas medicinales para calmar tu ansiedad"
Saac ríe por la sugerencia de Talisa.
Su mirada había cambiado, al ver sus labios sonreír supe que ya no estaba molesto.
"Si quieres aliviar mi estrés tengo una mejor manera" Su aliento caliente susurró mi oído, aún no entiendo a mi cuerpo, pero en cuestión de segundos él lo pone tenso y algo impaciente, un cosquilleo que sale de mi estómago hasta mi entrepierna.
"¿Así? Y puedo ayudarte o es algo que haces por tu cuenta" Tenía las mejillas rosadas, era fácil saber que estaba ruborizada al ver sus orejas.
"Necesito que me ayudes, pero antes debes sacar a tu animal del cuarto. Puedes llevarlo a la habitación de a lado"
"Mmm, no me gusta que le llames animal. Llámalo por su nombre, si te expresas de esa forma delante de él jamás te tendrá respeto, y eso es algo que se gana"
"De acuerdo, como se llama" Estaba más gentil y su tono de voz era más amable.
"Gisli. ¡Pero no te preocupes! Le haré entender que aquí tú eres el jefe."
"Eso espero, deberías aprender un poco de lo que dices"
Corrí a mi habitación, y caminé de lado al ver a los tres guardias que había noqueado, ahora me sentía mal por dejarlos inconscientes. Ni modo, todo esto pasó por culpa de su alfa.
Al entrar al cuarto Gisli seguía dormido, abarco casi toda mi cama. Tendré que pensar el algo y pedir que construyan una cama para él.
Saac se veía sospechoso, tal vez ocupe un masaje, si pidió mi ayuda tal vez es porque no alcanza su espalda. Eso es algo tan obvio, si no porque se quita la camisa.
"Te estás desnudando. ¿Por qué? Me dijiste que no hiciera eso frente a los demás."
"Sé lo que te dije, y también te dije que lo hicieras únicamente conmigo. Yo no me desnudo ante cualquier mujer, tú eres especial."
"¿Especial? Pero si la otra vez que te transformaste terminaste desnudo."
"Eso no cuenta Talisa, con el tiempo verás muchos cuerpos desnudos, todos los lobos lo hacemos, pero solo mi cuerpo es él que cuenta para ti."
Su anatomía es diferente a la mía, pero cuando ubica mi mano abajo de él me asusta un poco. Era caliente y podía sentir las pulsaciones, parecía que esa cosa estaba viva, había crecido y se sentía duro. Me empezó a guiar y una vez que sabía lo que hacía comencé a masajear de arriba y abajo, después de un rato ya estaba húmeda y viscosa.
"¿Ocurre algo?" Pregunto con voz profunda.
Me quedé un poco aturdida con solo verlo. Esta era la primera vez que me sentía avergonzada de verdad. ¿Pero por qué?
"Buena chica. ¡Vamos, yo también te ayudaré!"
Me cargó hasta la cama y subió encima de mí, y como si fuera un bebé comenzó a desvestirme. Me sentía tan ansiosa, mi cuerpo comenzó a sucumbir a él, anhelaba sentir lo de la última vez cuando tocó debajo de mi ropa.
De repente sentí un estímulo hasta la punta de mis pies cuando acariciaba mi labio inferior.
"Tu piel se siente tan suave, Talisa. También hueles tan bien"
Jadee cuando su boca me susurró al oído, y me estremecí cuando lo lamió.
"Dime, está funcionando. ¿Esto te quitará lo enojado?"
"Siempre dices cosas fuera de lugar y me haces reír. Solo déjate llevar y disfruta. Esta será la primera vez de muchas" Mi lobo estaba desesperado por marcarla, y por más que intentaba ignorar más insistía. Tenía razón, ella lleva varios días en mi manada y aún no la he marcado, ni siquiera e proclamado su cuerpo como mío.
Comenzó a besar mi pecho, la sensación era tan satisfactoria, deseaba más. Comencé a morder mis labios, sentí algo se acumulaba abajo. La parte resbaladiza ya estaba allí.
Mi pecho subía y bajaba cuando sus labios comenzaron a besar mi cuello. Gemí cuando sus manos empezaron a jugar con mis globos gemelos.
"¡Oh Saac!" Gemí su nombre y me aferré involuntariamente a su espalda, abrí mis piernas dándole paso a poder acomodarse.
"Me gusta cuando gimes mi nombre, hazlo de nuevo" Susurró con voz ronca.
Gemí de placer cuando llevo su boca a unos de mis pezones.
Una ola de placer fluía a través de mí. No pude explicar lo que sentí. Se sentía tan bien, pero también se sentía tan mal. Nunca había tenido esta sensación en mi vida, y mis recuerdos de algo parecido no habían llegado a un.
"Más, por favor"
"Tus gemidos son melodía para mis oídos, no puedo creer que una mujer tan inocente como tú pueda gemir tan fuerte, rogando y suplicando que la toque."
Me estremecí cuando susurró a mi oído.
Tome su mejilla y la acaricie, el rostro de Saac era perfecto, solo entonces pude apreciarlo de cercas.
"Es malo pedir más, Saac" Pregunté en un tono bajo y débil.
Lo escuché resoplar y bajar hasta mi oído. "No, Talisa. No está mal pedir. Si quieres más te lo daré.