Anne Williams es una chica de 26 años amable, sencilla e inocente, cuida de su pequeña hermana Gracie de 9 años desde hace unos meses cuando murió su madre de cáncer... Ahora está perdida en su rutina trabajando en esa cafetería, hasta que la desgracia llama a su puerta, abusos, policías y contratos.
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CAPITULO 19
Isaac.
Al verla parada frente al altar lo supo instantáneamente, esa mujer lo estaba volviendo loco ¡se veía preciosa, parecía una Diosa!, y después de hacerla suya en el Jet lo fue aún más, Anne tenía la piel suave y el aroma que desprendía su cuerpo lo volvía loco, era adicto a ella.
Había dejado muchas cosas por Anne y ella no lo sabía, renunció a las noches de bebida con Joshua para pasar más tiempo a su lado, incluso lo veía muy poco, dejo de lado proyectos para poder asistir a las visitas de la trabajadora social, ¡había perdido millones por eso! Pero Isaac comprendía que el dinero no compraba la felicidad en Anne, así que todo el mes antes de la boda lo dedicó a ella y a su hermana, claro, el tiempo que pudo porque ya tenía demás compromisos y aun así debía trabajar.
Isaac estaba desarrollando sentimientos por Anne, pero dentro de su corazón él sabía que tenía miedo demostrarlos, la última vez que se enamoró le rompieron el corazón vilmente, encontrar a Kate con otro en la cama de un motel barato fue la cosa más decepcionante que le había tocado vivir. Él ya sospechaba de ella pues llegaba hasta muy tarde y en el transcurso del día que llamaba a su casa ella nunca estaba y cuando la llamaba a su celular las llamadas entraban al buzón, es por eso que en su locura mando a Broddy a poner un localizador GPS en la camioneta de Kate, Isaac lo reviso por días hasta que el GPS marcó en un motel que estaba lejos de donde Isaac se encontraba, sin pensarlo tomó su chaqueta y salió rápidamente hacia la ubicación y ese fue el último día de su matrimonio.
Y cuatro años después llega está niña malcriada con su hermanita a su vida, Anne era buena persona pero siempre quería imponer lo que ella decía y nadie podría hacer que cambiará de opinión, era una cabeza cerrada y lo peor de todo... Isaac sabía que él era igual, tenían el mismo carácter por eso los constantes roces entre ambos.
-¡Son iguales, hermano! -dijo Joshua. -El mismo carácter...
-Puede ser, pero ese no es el punto Joshua. -El hombre lo miro e Isaac bajo la mirada al piso, estaba a punto de revelarle a su amigo una bomba. -La golpeé.
Joshua escupió el whisky que tenía en la boca y lo miró anonadado. -¿Desde cuándo te volviste un imbécil maltratador de mujeres? ¡Si serás el rey de los estúpidos! -Le gritó su amigo levantándose del sofa en el que estaba. -¡Dios!
-Ella me provocó, comenzó a decirme que era un hombre que se aprovecha de las personas y-y yo...
-¿Y no es así? -Inquirió, volteo a mirarlo. -¿No te aprovechaste de la situación de su hermana para qué firmará? Porque si ella está equivocada me dices y yo la pongo en su lugar. -Le dijo, Isaac negó.
-No está equivocada Joshua, yo me aproveché de ella. -Isaac se tallo la cara desesperado. -¿Cómo mierda llegué aquí, ah? Yo vivía mi vida solitaria tan cómodamente y llega esa niña...
-Eso es lo que menos importa, ahora lo que más importa es, ¿te arrepientes? -Isaac lo miro y bufó.
-¡Desde el segundo uno, por supuesto que me arrepiento! -Grito el rubio. -Tu sabes que yo jamás he golpeado a una mujer, pero está vez no supe reaccionar.
-¿Qué vas a hacer para que te perdone? Pedazo de imbécil. -Joshua tomó su whisky y observó a su amigo quien se tomó una copa de fondo.
-No lo sé, supongo que pedir disculpas... No es como que estamos en una relación, solo es un contrato. -Menciono, Joshua entrecerró los ojos y se acercó.
-¿Y yo nací ayer, Isaac? ¡Está claro que la amas, por Dios! -Joshua ya estaba desesperado con las respuestas tan estúpidas que daba Isaac, era obvio que estaba ebrio pero el rubio no soltaba prenda, parecía que tenía el corazón blindado. -Admítelo.
-¡No la amo, ¿cómo crees?! -musito, se levantó del sofá y camino alrededor de la habitación. -La conozco hace un mes y medio, pff. -Bufo.
-Bueno, tu sigue creyendo tus mentiras, cuando menos lo pienses será muy tarde amigo. -Joshua dió dos palmadas en la espalda de Isaac y comenzó a dirigirse a la puerta con las manos en los bolsillos.
-¿Qué, ya te vas? -Joshua asintió.
-No soporto estarte viendo y que me mientas a la cara. -le dijo. -Quédate aquí solo para que pienses realmente en lo que sientes por aquella chica y así dejes de aprovecharte de su situación y por una vez en tu vida después de muchos años alcances la felicidad. -Antes de salir lo miro. -Cuando reflexiones búscame y te escucharé.
Joshua se marchó dejando a su mejor amigo destrozado y ebrio en aquel sofá, Isaac suspiró. -¿Qué siento por Anny?
Comenzó a recordarla, su sedoso cabello, su sonrisa tan linda y su piel... La piel de Anny era la más suave que la punta de sus dedos habían tocado, su aroma corporal era exquisito, ella era exquisita.
También recordó la luna de miel, como ambos decidieron bajar la guardia, disfrutar aquel viaje y por fin se entregaron el uno al otro ella le había entregado lo más preciado que tiene una mujer, su virginidad. Isaac la deseaba desde que la vio entrar con su gabardina puesta a la oficina, se podría decir que incluso antes... Cuando la vio tendida en aquel frío asfalto, tan indefensa e incluso cobró venganza por ella, aún sin Anne pedírselo.
La cabeza de Isaac estaba hecha un lío y sin pensarlo cayó dormido en el sofá del despacho de Isaac.
§§§§
Una llamada lo despertó, talló sus ojos y se tomó la cabeza pues tenía jaqueca, la noche anterior había bebido mucho, el teléfono dejo de sonar e Isaac lo tomó y marco al número de casa, era extraño que lo llamarán tan temprano.
-¿Qué pasó Nana? -Murmuro él aún tomándose la cabeza.
-¡Anne no está, ni la niña, encontré su celular en la cama! -Dijo la mujer apresurada. -El guardia de la entrada dijo que la vio salir anoche, no durmió aquí.
Isaac sintió que un balde de agua fría cayó sobre él, Anne lo había abandonado. Quedó anonadado.
-Voy para allá, dile a Broddy que saque los vídeos de la cámara de seguridad. -Dijo y colgó.
Isaac salió corriendo y tocó en la habitación de su amigo, quien salió adormilado. -Espero que tengas una buena razón para despertarme a las 8 de la mañana.
-Anne se escapó. -Se limitó a decir.
-¿Escaparse? Nunca estuvo presa. -Dijo el amigo, Isaac suspiró.
-No necesito tus sermones ahora, cámbiate y ayúdame a encontrarla.
Ambos amigos salieron de la casa de Joshua como alma que lleva el diablo, en camino Isaac iba pensando en que era posible que no volviera a ver a Anne y ahí se terminó de dar cuenta que la necesitaba en su vida, el temor de no verla más se apoderó de él y la impotencia por las acciones que había cometido el día anterior aún más. Joshua conducía a toda velocidad y fue como minutos después ya estaban entrando a la casa de Isaac dónde los esperaba una señora preocupada.
-Anoche tuve dolor de cabeza y me fui a dormir temprano, no la vi más, se que me pediste que estuviera al pendiente de ella y mi niño lo siento mucho. -dijo la mujer a punto de caer en llanto.
-Era tu única responsabilidad nana y ahora ella no está. -le dijo, la señora bajo la mirada.
-Anne no necesita niñera Isaac, no le dejes toda la culpa a Sofía. -dijo Joshua defendiendo a la mujer.
-¿Tienes los videos de la cámara de seguridad? -preguntó Isaac ignorando el comentario de su amigo.
-Los deje en tu despacho. -dijo la pobre mujer que estaba llena de angustia.
Isaac se dirigió hacia allí con Joshua detrás de él, al entrar a su despacho puso la memoria USB en el computador y dio play, en el vídeo se observa un coche bastante conocido estacionado frente a la puerta de la casa y Anne y Gracie bajando las escaleras de la entrada para subirse y alejarse rápidamente. Fue cuestión de menos de un minuto en el que sucedió todo.
-Eva. -dijeron los dos al mismo tiempo conectando miradas.