Por Un Error Médico

después de ese encuentro nos vamos cada una a su casa, a mí me van a buscar; cuando llegó a casa aún Camilo no ha llegado, la señora Angela que es la encargada de la casa, me ayuda a llevar las cosas. después de acomodar todo en una habitación, ella me prepara la comida, está vez ceno sola en una mesa tan grande; Camilo ni un mensaje me ha enviado, no sé que estará haciendo, ya yo lo quiero ver, quiero ver esos hermosos ojos.

después de comer algo me subí y me puse a ver televisión, pero de un momento a otro mis ojos comenzaron a pesar así que me quedé dormida, no sé si llego al fin a casa, pero en la mañana siguiente que me levanto veo que el lado donde el se acuesta está vacío y se ve como si el no fuese llegado en toda la noche.

ese día tenía una cita médica, para ver ya el sexo de mi bebé; así que me alistó y me llevan a la clínica, yo y Camilo habíamos quedado ir hoy juntos, pero si el no llego y no me ha escrito. yo tampoco lo voy hacer, quizás estará ocupado con su prometida, así que no quiero molestarlo, igual pensar en eso me hace mucho daño. así que ignoro a mis pensamientos que a veces se ponen pesados.

cuando estoy acostada en la camilla con la panza afuera; el médico me habla todo el tiempo. por fin mi bebé muestra su sexo y es un niño, un niño hermoso, que tiene buen desarrollo gracias a Dios. estoy feliz por qué voy a tener un hermoso príncipe; el cuál lo voy a amar siempre. después de la cita, quise salir a caminar pero los guardaespaldas que me habían puesto, no querían dejarme caminar sola y yo necesitaba despegar mi mente. así que le dije que no me siguieran que yo iba a estar bien, solo quería estar sola.

ellos se miraron entre si, hasta que después de un rato se fueron. ahí pude respirar y tome un taxi para ir al apartamento; aún tenía mis cosas ahí y la verdad no tenía ganas de volver a esa casa y que Camilo no esté ahí. no quiero volver a sentir lo que sentí está mañana, era algo como si el en realidad no me pertenecía y que todo solo era un sueño ...y se que es la verdad que no me pertenece; pero no quiero aún aceptar eso, no ahora.

llegó al apartamento y me siento con un poco de nervios, pues tenía ya días que no regresaba después de lo sucedido la última vez; y para no pensar cosas raras, me pongo a arreglar todo a su lugar, así me pasa el tiempo y cuando veo ya es de noche. aún no tengo ganas de volver a la casa de Camilo, así que me voy a mi habitación me encierro y me acuesto en mi cama, y creo que la he extrañado mucho por qué se siente tan bien, que enseguida me da sueño. me quedo dormida, pero un momento a otro comienzó a escuchar que la puerta se abre; yo me quedo paralizada, no sé quién puede ser y si son los mismo que vinieron la última vez, están vez si estaba ahí... me levanto y le pongo seguro a la puerta.

- estoy aquí, estás seguro que ella se encuentra aquí, no veo a nadie. espera la puerta de la habitación está cerrada... ya te llamo.

me estaban siguiendo,qué boba fuí al venir aquí, no debí hacerlo, debí ir a la casa. la persona de acerca a la manigueta de la puerta y la gira, al ver que está con llave, le comienza a dar patadas. yo me tapo la boca, de los nervios mis lágrimas salen sin parar.

- se que estás ahí, abre la maldita puerta !!!!...

busco mi celular, aunque la voz de ese hombre me parece conocida, no sé por qué pero la he escuchado antes. tomo el celular y marco el primer número que estaba... los golpes de la puerta de oyen aterrador.

- abre la puerta maldita sea !!!!!

me vuelve a gritar, yo aún tengo el celular en el oído, no ví a quien llame, la persona contesta por fin.

- Ana !!! dónde estás ?

era Camilo el que estaba del otro lado de la línea telefónica, apenas que escucho su voz aún más lloro... no sabía cómo decirle que viniera por mi, que lo extrañaba.

- maldita zorra, cuando logré abrir esta puerta, me la vas a pagar.

volví a la realidad al escuchar a ese hombre del otro lado. yo miraba la puerta y veía que se estaba rajando... aún más nerviosa me ponía.

- ayúdame !!!...

fue lo que logré pronunciar a Camilo. lo escucho maldecir, y después me dice.

- que hace Andrés contigo?... y por escucho ruidos.

ahí volví a mirar la puerta, recordé que el de la voz era mi jefe, pero que hacía aquí ... y por qué el afán de abrir la puerta, será que ya sabe que soy yo la que tenía la información.

- Ana no abres la puerta quédate dónde estás... ya llame la policía...y por favor no cuelgues la llamada, yo también voy en camino.

no le respondo nada, solo ruego que la puerta no se vaya a abrir, por qué cada vez puedo ver la luz del otro lado, por lo visto mi jefe ya sabe que fui yo ... y no viene con ganas de hablar.

- Ana se que está ahí, abre la puerta y hablamos... no voy hacerte nada malo. sabes que mi jefe me está buscando para acabar conmigo y es que con el no sé fuega. necesito hablar contigo no tengo mucho tiempo, ellos quizás ya saben que estoy aquí, tiene ojos por todo lados .. así que abre la maldita puerta !!!!

no sé que hacer, tengo mucho miedo, no sabía que el me iba a encontrar y por otro lado, quien es la persona del que el está hablando...

- no vayas a abrir la puerta Ana, ya estamos llegando.

tener a Camilo en el celular me hace sentir un poco de calma. pero un momento a otro escucho un golpe fuerte y veo caer la puerta al suelo, yo también grito del susto ... Andrés entra a la habitación y me queda mirando, es una mirada culpadora o juzgadora..

- no!!! te acerques a mi por favor !!

le digo mirandolo, pero el se ríe. no le había visto esa risa a el, y se acerca me toma del brazo para llevarme cerca de el.

- eso lo debiste saber al momento de meter las narices dónde no te llaman !!!

me grita y yo lloro aún más, el mira alrededor y se da cuenta que el celular está en una llamada, lo toma y ve el nombre, sonreír de lado.