QUÉ NOS PASÓ?.

Es la noche del 9 de mayo, Juliana está muy preocupada, son las 9 de la noche y ninguna de sus cuatro hijas aparecen.

A eso de las 6 de la tarde, Regina y Myriam pidieron permiso a Mamá para ir a una fiesta a casa de una compañerita de la escuela, Myriam solicitó la autorización para llevar a Briseida. Juliana aceptó, con la condición de no volver tarde, las quiero aquí a las 10 en punto. Por favor Myriam, cuida muy bien a Bris, No quiero celulares apagados, está claro?. Clarísimo, Mamá, dijo Myriam.

Mamá, vamos cerca , no tienes que preocuparte.

Es que llevan a Briseida, aún está muy chiquita.

Mamá, lleva a sus tres hermanas, y la vamos a cuidar y defender con garras y dientes. Nunca vamos a permitir que algo malo le pase a nuestra xocoyotita.

Sé cuánto aman a Bris. Pero Myriam, cualquier cosa por leve que sea, me llamas y voy por ustedes.

Sí, Mamá. Te prometemos que te llamaremos.

Me vas a llamar cada media hora, no dejes de hacerlo Myriam, en todo caso, tú Regina. Tú te vas a encargar de Nayeli.

Sí, Mamá, ya nos vamos, se nos hace tarde.

No dejen de llamarme.

Mauricio, ya son las 9. Esas niñas no llaman.

Ya llamarán.

No te entiendo, tú siempre estás tan preocupado y hoy te veo demasiado tranquilo. Sabes algo que yo no sepa?.

No, claro que no.

Aquí hay gato encerrado, tú sabes algo y me lo vas a tener que decir ahora mismo.

Así pasó el tiempo, en medio de la preocupación de una Madre angustiada. Juliana vio que su esposo chatea con alguien. Con quién chateas?.

No, nada más reviso el celular.

Creo que voy a darme una vueltecita por aquí, a ver si las veo. Voy contigo.

Vamos pues. Pero ponte tu suéter. Hace un poco de fresco.

Al abrir la puerta: SORPRESA!!!. Estas son las mañanitas.....etc. etc.

Juliana abrió los ojos como platos y las lágrimas la traicionaron.

Al terminar las mañanitas, las cuatro hijas se precipitaron a abrazar a su Mamá. Briseida se abrazó a sus piernas y las tres mayores, la abrazaban y compartían las lágrimas. Te amamos Mamita hermosa.

Briseida besaba las piernas de Mamá, hasta que esta la tomó en brazos y la apretó contra su hombro. Nadie quería soltar a Juliana. Uno de los muchachos del grupo, tenía en sus manos un pastel. Señora Juliana, muchas felicidades.

Y eso?. Preguntó Juliana. Es tuyo, Mami, dijo Myriam.

Patel, patel. Decía Briseida.

Claro que sí mi amor. Dijo Juliana. Por favor muchachos, pasen.

Nos tenemos que ir señora, tenemos otras serenatas pendientes. Muchas felicidades.

Gracias muchachos, vaya sorpresa.

Fueron sus hijas las que lo planearon todo.

En la sala, sentado en un sillón, un hombre con la emoción a flor de piel, solo miraba satisfecho. Gracias Dios por la maravillosa familia que nos permitiste formar.

Cuando Juliana lo vio, caminó rápido hacia su marido, sin soltar a Briseida. Aquí está nuestra obra, mi amor. Cuatro bellezas de hijas. Son las mejores. Tú lo sabías, verdad bribón?.

Si, mi vida. Todo el tiempo estuve en contacto con ellas. Por dentro, me comía la angustia, igual que a ti.

Patel, Mamá, patel.

Vamos, que mi niña ya quiere su pastel.

Regina y Myriam, preparan todo para tomar café y acompañar el pastel.

Para Briseida, había un vaso de leche caliente. Ya no toma fórmula, y come de todo.

Bueno, ahora me toca dar mi sorpresa. Dijo Mauricio.

Todas quedaron calladas y a la expectativa.

Ahora vuelvo, y Mauricio salió de casa.

De qué habla Papá?. Preguntó Myriam.

No sé, pero muy pronto lo vamos a saber.

A los pocos minutos, Mauricio volvió con un sobre, este tiene pegado un moño rojo.

Es para la reina de la casa.

Mi amor, no.

Claro que sí.

Que lo abra, que lo abra. Cantan las chicas a coro.

Cuando Juliana lo abre y ve su contenido. No puede ser!!. Casi gritó Mamá. Son dos boletos para un concierto de Ricardo Arjona.

Juliana fue a besar a su Esposo. Gracias mi cielo, pero vamos a dejar a las niñas solas?.

Mamá, por favor, sabemos que lo dices por Bris, pero sabemos qué hacer. Solo dinos para cuando es el concierto.

Para el sábado.

Ya está hecho, nosotras nos organizamos y vamos a cuidar de Briseida. No te preocupes.

Está bien hijas. Tu Papá me lo prometió en Año nuevo y lo va a cumplir. Juliana abrazó a su esposo, gracias amor por las cuatro maravillosas hijas que hemos criado. Gracias.

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