Si Fueras Mío

Reece

Espero la respuesta de Yohei a mi mensaje y como esta no llega, continúo llamando, pero su celular no deja de estar apagado. Para cuando pasan unos tres días, me rindo con llamarlo e intento obtener un contacto por medio de la universidad, inventando excusas, pero se me es negado. 

Cómo nunca le preguntaste el nombre de la compañía de su familia al menos… Me recrimino, pero aunque sabía que era una familia poderosa por lo que decía, nunca quise ahondar por temor a que pensara que intentaba aprovecharme o acercarme a él por su dinero. Ahora lamento no haberlo hecho. 

Antes de la clase, le escribo un mensaje a Evelyn, con la que hemos mantenido comunicación en el caso de que alguno de los dos sepa algo de Yohei, avisándole que nuevamente me fue mal con la administración de la universidad.  

En ese momento, llegan Jack y James, me saludan y se sientan a mi alrededor. Debo estar perdido en mis pensamientos, porque Jack se extraña con mi actitud. 

-¿Qué pasa? ¿Qué problema en el mundo puede tener el popular Reece?- bromea, pero luego sigue en serio. –Has estado distraído y callado estos días, muy lejos de tu personalidad habitual.

-Es Yohei- decido decirle -mi compañero de cuarto.

-¿Qué sucede con él? Por cierto, no lo he visto en estos días- se da cuenta Jack. 

-Ese es el punto. Tuvo que volver a Japón y no sé si está bien o qué fue lo que sucedió- explico –Estoy preocupado porque no me puedo comunicar. 

-No crees que quizá es lo mejor- dice James, haciendo que ambos lo miremos. –Digo, ha sido una molestia del principio y un problema para ti. 

-¿Problema? ¿Cuándo dije yo que ha sido un problema?- pregunto. 

-No creo que haya sido un problema para Reece, parecían llevarse muy bien- se extraña Jack. 

-Demasiado bien… Y ese es el problema- sigue James. 

-¿Qué intentas insinuar?- pregunto, no gustándome sus palabras, pero Jack me avisa que el profesor llegó, así que lo dejo por el momento. 

-Mierda, Sophie nuevamente llega tarde- murmura Jack. 

Las palabras de James me siguen dando vueltas durante la clase y me molestan, sobre todo el tono de disgusto con el que lo dijo. Así que apenas se termina la clase, tomo mis cosas y miro a James. 

-Vamos- le ordeno. Él se levanta y me sigue sin decir nada. 

-Oye, oye. ¿Qué sucede?- pregunta Jack siguiéndonos también, pero ninguno responde. 

Abro un par de puertas y entro en la primera aula vacía que encuentro. James me sigue y Jack hace lo mismo, cerrando la puerta a su espalda, mirando entre nosotros un poco nervioso. 

-Ahora dime ¿Cuál es el problema de que me lleve bien con Yohei?- pregunto, más molesto de lo que debería estar seguramente. 

-¿Preguntas porque no lo sabes?- James suelta un bufido. 

-Exactamente- respondo. 

-Crees que no sé que cuando preguntaste si te podía gustar alguien y atraer otra, te referías a Yohei- me acusa, mientras Jack me mira sorprendido. 

-Y eso qué- pregunto, tratando de no sentirme expuesto –no es tu maldito problema. 

-Claro que lo es, si mi mejor amigo tiene que hacerse pruebas de VIH por estar con ese puto asqueroso- me acusa James, casi gritando, mientras que Jack parece aún más sorprendido si es posible. –Estás tan enredado con él, que ni siquiera puedes dejar de tocarlo cuando lo ves por el campus- sigue y hago una mueca porque eso es verdad. –Estabas tan feliz por estar con tu Julieta, pero desde que él llegó dejaste de nombrarla, hasta que ya ni siquiera lo haces. 

-Cálmate James, creo que tienes un mal entendido- digo. 

-Ningún malentendido, ¡te gusta! Estas enamorado de ese tipo. Desde que llegó has estado deslumbrado por él-  continúa recriminándome. –Te conozco desde hace tres años, sé cuando estás interesado en alguien, así que ni siquiera te atrevas a negarlo. 

¿Amor? ¿Era eso? Debe de serlo, porque desde que no puedo verlo, hay una extraña sensación de pérdida, demasiado grande como para tratarse de un mero amigo o conocido.  

-Oye, ya cálmate. Y qué si le gusta un hombre, ¿acaso no es su elección?- se mete Jack, mientras reflexiono, dándome cuenta de que por primera vez en la vida, estoy enamorado de un hombre. 

-No me importa si es un hombre o un animal, pero que haya llegado al punto de tener que hacerse exámenes por hacerlo con él, es una mierda. ¿Qué hubiera pasado si se contagia de sida o algo tan jodido como eso? ¿Estarías feliz?- le pregunta James a Jack y con eso, este último se calla, sin saber cómo responder. 

Suspiro, sabiendo que está haciendo un escándalo porque está preocupado por mí. –Nunca he tenido relaciones con Yohei- digo, atrayendo la atención de ambos, aunque oculto que hemos hecho otras cosas. –Y tienes razón, me gusta, pero aunque lo hubiéramos hecho, Yohei nunca ha estado con alguien más, así que no puede contagiarme de nada. 

-¿Entonces? Esos exámenes…- James me mira confuso. 

-Julieta. Es por Julieta. Resultó que era casada y tenía hasta un par de hijas- admito y ambos me miran entre horror y compasión. –No sé si tenía a otros como yo, así que me hice exámenes para salir de dudas. 

-Lo siento, hermano. Que mierda de persona- dice Jack. 

-Entonces… Reece, creo que hice algo terrible- admite James, mirándome con pánico en los ojos.