La Hermana De La Villana

Los días pasaban y Nadia ya comenzaba a acostumbrarse a ese lugar, a su familia y comenzaba a encariñarse más con Alida. La conexión entre ellas crecía con cada día que pasaba, y Nadia sentía un deseo cada vez más fuerte de protegerla.

El día del debut de su hermana había llegado, y la casa estaba llena de nervios y emoción. Nadia observaba cómo Alida se preparaba para la noche, su rostro reflejaba una mezcla de ansiedad y alegria. Nadia no podía evitar sentirse orgullosa de ella y quería asegurarse de que todo saliera perfecto.

Mientras Alida se vestía, Nadia la ayudó a ajustar el corsé de su vestido, asegurándose de que cada detalle estuviera en su lugar. La madre de ambas entró en la habitación con una sonrisa cálida, llevando un ramo de flores para decorar el cabello de Alida. La atmósfera era mágica, y Nadia se sentía parte de algo especial.

Ya en la tarde los invitados comenzaban a llegar, Nadia se sentía un poco nerviosa pues el príncipe asistiría a la fiesta, de pronto se escuchó que anunciaban la llegada de la familia real.

Primero se presentaron a los reyes luego pasaron sus hijos la princesa Elba, al príncipe Káiser y por último el segundo hijo del rey y su primera concubina el príncipe Rowan, Nadia no pudo ver a los príncipes, ya que se encontraba con su hermana en un salón continuo.

 - Alida, hija ya debemos pasar al salón, los invitados te esperan.

 -Ya voy Madre, bueno te veo en el salón.- le dijo a Nadia y está salió poco después que Alida, pues debía evitar que el príncipe Kaiser invite a bailar a su hermana.

Alida entro al salón junto a su padre, todos los invitados dirigieron su vista a ella, la observaron especialmente los jóvenes solteros que buscaban buenos matrimonios.

El príncipe Káiser al verla quedó encandilado con aquella chica que pasaba al salón, pero había otra mirada puesta en la bella doncella era un joven de unos preciosos ojos grises ansioso por bailar con la joven, nadie desviaba la mirada, al llegar Alida a la pista muchos muchachos se ofrecieron para dar inicio al baile con ella, el príncipe Káiser también se acercaba confiado, ya que sabía que ninguna joven lo rechazaría porque era una ilusión para cualquier doncella iniciar su primer baile de debut con un príncipe, Nadia al ver que Káiser se dirigía hacia su hermana decidió interponerse.

 - Mucho gusto príncipe Káiser, es un gran honor que asistiera al debut de mi hermana.

 - Gracias, pero desearía que eso me lo diga su hermana, si me da permiso invitaré a su hermana a su primer baile.

 - ¡¡Espere!!.- Nadia no sabía que decir, cuando voltea a ver su hermana para saber si ya acepto la propuesta de algún joven, y si lo había hecho se trataba de aquel muchacho que habían conocido días atrás, visto esto decidió marcharse.- Lo lamento majestad ya debo retirarme.- Y sin más se apresuró a retirarse.

 - Que chica tan extraña, no creo que leydi Alida sea como su hermana.- se dirigió dónde Alida, pero se sorprendió al verla como aceptaba bailar con otro joven, esto le molestó, aquella chica le había hecho perder el tiempo y ahora otro estaba con Alida.

Alida no sabía a quién aceptar pues si bien conocía a algunos jóvenes y a sus familias, sabía perfectamente que muchos de esos muchachos solo la cortejaban por el estatus de su padre pues es bien sabido que el duque no tiene herederos así que es un hecho que el que se quedará con su título sería el esposo de alguna de sus hijas.

 - leydi Goldwyn, me daría el honor de ser el primero en bailar con usted.- Alida se quedó sorprendida era aquel muchacho que conoció hace ase algunos días, no pensaba que lo volvería a ver, pero ahí estaba.

- Claro será un placer.- dijo Alida sin más, no sabía por qué había aceptado, pero ya lo había hecho.

Ambos pasaron a la pista y comenzaron a bailar todos los veían asombrados pues ambos hacían una linda pareja, esto lo noto el príncipe Káiser quien estaba molesto, ¿cómo es posible Alida aceptará bailar con ese? Él era una mejor opción.

- Parece que todos nos miran.- le dijo a Alida

- Tal vez por qué es mi debut ¿no cree?.

- No lo creo, usted se ve hermosa.- eso último se lo dijo al oído, Alida al escucharlo se sonrojo y sintió su corazón latir más rápido.

- No diga esas cosas.- Le dijo un poco avergonzada.

Ambos seguían bailando, y Nadia los observaba feliz pues Alida no bailo con el príncipe, además parece que aquel joven está realmente interesado en su hermana, pero debe estar alerta pues tal vez únicamente se acerca a su hermana por su estatus.

- Nadia por fin te veo, tuve hermana se ve hermosa.

- Elba perdón por no ir a saludarte.

- No te preocupes ya estoy acostumbrada a que te olvides de mí.- lo dijo victimizándose.

- No es así.

-Solo estoy bromeando.- Lo dijo con una sonrisa, le gustaba molestar a su amiga.- ¿Ese es el chico, que le gusta a tú hermana?.

- Sí, es muy guapo, no crees, más guapo que tu hermano.

- Pues si es muy guapo además es amable y un gran guerrero, si se comprometen también estaría feliz, tu hermana no podría encontrar un mejor pretendiente.

A Nadia le sorprendió lo que dijo Elba, pues por lo que dijo debía conocer a aquel joven misterioso.

- ¿Lo conoces?.

- Pues claro, yo conozco a todo mundo, además es difícil no conocerlo.

- Enserio!!. ¿Quién es?, ¿cómo se llama?, ¿de qué familia viene?.

- Oye tranquila, tan desesperada estar por saber quién es?.- Le dijo a Nadia y está solo la observaba esperando a que su amiga le responda.

Elba estaba a punto de responder cuando llega su doncella y le menciona de que el rey quiere hablar con ella.

- Espérame un momento, vuelvo enseguida y te cuento todo.

Nadia observaba como se alejaba su amiga, tenía muy mala suerte, y no le gustaba esperar la curiosidad la mataba.

- ay porque tengo tan mala suerte, bueno toca esperar, es bueno que Elba lo conozca eso me dejara más tranquila.

Los dos jóvenes en la pista seguían bailando y Nadia con un poco de hambre dejo de observarlos y fue a la mesa de dulces a comer algo.