NO TODO ES LO QUE PARECE Y HASTA LO MÁS PEQUEÑO ES LO MÁS PELIGROSO, AL MIRAR AL PRESENTE TE DARÁS CUENTA QUE LAS LÁGRIMAS QUE DERRAMASTE EN EL PASADO SON LAS ALEGRÍA MÁS GRANDE QUE PUDISTE EXPERIMENTAR CONPARADO CON EL AHORA.
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MENTIRA
LEONORA, con cansancio en su rostro, se pregunta qué le pasa. BHARA, con preocupación, pregunta si está bien.
LEONORA, con una sonrisa, dice que está bien, pero que por el momento irá a descansar un poco, ya que se siente cansada.
Mientras tanto, ROWAN busca a LEONORA en cada rincón que pudiera encontrarla. Mientras YAKIER está en casa, un poco preocupado, cuando de pronto suena su celular.
YAKIER responde: "Hola".
ADELAIDE dice: "Hola, YAKIER. ¿LEONORA está contigo?"
YAKIER responde un poco nervioso: "Sí, pero está bañándose".
ADELAIDE dice: "Bueno, dile que me llame después".
YAKIER, con un suspiro, dice: "Claro, yo le digo. No sé, preocúpate".
ROWAN, buscando a LEONORA, llegó a una aldea que aún conservaba su vestimenta antigua y los cultivadores seguían con sus antiguas leyes y reglas. Al llegar al pueblo, se quedó en una posada.
LEONORA, mientras dormía, tenía una pesadilla viendo a ROWAN siendo golpeado y castigado, pero ella no podía ayudar. Se levanta gritando, "No, no sueltenlo ", y llorando sin consuelo alguno.
La esclava asignada a LEONORA pregunta: "Señorita, ¿está bien?"
LEONORA afirma: "Sí", mientras toca su rostro y ve lágrimas caer de sus ojos.
La esclava pregunta: "¿Seguro, señorita?"
LEONORA afirma: "Sí, estoy bien. Quiero tomar una ducha".
La esclava responde: "Sí, señorita".
Un rato después, la esclava le dijo a LEONORA que su baño estaba preparado, y ella fue a tomar un baño. Ve cómo eran las antiguas tinas de baño y, de pronto, nota que ha bajado de peso, pero su estómago está un poco más grande, pero no presta atención.
Después de esto, LEONORA se fue a descansar mientras lee libros antiguos.
Al otro día, LEONORA salió a caminar a la ciudad, y ROWAN salió a buscarla, pero ninguno de los dos sabía que estaban en la misma ciudad, y sin saberlo, cruzan calles y LEONORA cree verlo, sintiendo un escalofrío, y así mismo ROWAN a LEONORA.
LEONORA, mientras camina, ve una hermosa horquilla y decide llevársela.
LEONORA dice: "Es hermosa, ¿no crees?"
La esclava responde: "Sí, señorita".
LEONORA pregunta: "¿Por qué me llamas señorita? Tienes mi edad, pero me llamas señorita. ¿Acaso tú no lo eres?"
La esclava responde: "Sí, pero es una regla".
LEONORA dice: "Eso no me interesa. Solo llámame por mi nombre".
La esclava responde: "Sí, señorita".
LEONORA dice: "No. Importa, déjalo". Mientras hablaba, sintió mareos, un poco agitada, y dice: "Vámonos a casa".
Al llegar a casa, se desmaya, e inmediatamente todos recurren por ayuda. Un médico dice, entre la algarabía que había, al rato llegó un médico y la revisó. Después de esto, le da un diagnóstico.
LEONORA pregunta: "¿Doctor, qué tengo?"
El DOCTOR frunce el ceño.
LEONORA, preocupada, pregunta: "¿Es grave, doctor?"
El DOCTOR responde: "Usted está embarazada, señorita".
LEONORA, con sorpresa en su rostro, dice: "¿Qué? Esto debe ser un error. Es por la tecnología aquí no es avanzada, ¿verdad?"
Todos a su alrededor se quedaron sorprendidos y empezaron a murmurar sobre la castidad de LEONORA.
LEONORA, sintiéndose indefensa, grita: "¡Largo de aquí! Ella pretende que todo lo que dijo el doctor es falso".En todo el día no salió de su habitación. Al otro día, tocaron su puerta varias personas proclamándola impura, diciendo que ya iba a tener un hijo, pero no estaba casada.
