En Mí Habitación

Luego de la cena mi madre fue a ver el televisor y nosotros fuimos a mi habitación para estar alejados de su mirada un poco, no es que ella molestara, pero necesitábamos un poco de intimidada, un tiempo a solas luego de estar distantes, dejamos la puerta abierta al entrar, tampoco podíamos abusar de lo buena que era mi madre.

Al entrar me tomó de la cintura, estábamos de pie uno frente al otro, mi espalda chocó contra la pared cuando su cuerpo impacto con el mío, él dejó una muleta en la puerta para poder tener más soltura, estábamos tan juntos mientras nos besamos que casi éramos uno.

Su lengua jugueteaba con la mía, mi respiración se entrecortó cuando su mano comenzó a explorar mi cuerpo, hasta llegar justo a mi zona íntima, pude notar cómo dedos se abrieron paso por entre mi interior y si compás de sus besos llegué rápidamente a un orgasmo supremo, tuve que morderme el labio para no hacer ruido y alertar a mi madre de lo que allí pasaba.

Luego le quise devolver el favor, está vez fue él que se colocó contra la pared, lo besé en los labios y luego fui hasta su cuello, sus orejas, pude notar que le gustaba esa zona u con mi mano busque su sexo, me lleve una sorpresa al palpar su gran grosor y tamaño, lo tomé entre mi mano e hice lo mismo que él, segundos después sentí un líquido vistoso entre mis dedos, le di un pequeño beso y fui a por papel higiénico para que se limpiara.

Todo esto ocurrió en menos de media hora, mi madre ni se imaginó lo que ocurría, ya que justamente cuando nos acomodamos en la cama para conversar un poco, llegó ella con un plato con galletas y leche, porque debíamos dormir en breve, Liam se puso rojo al verla, tal vez por lo ocurrido anteriormente, pero ella no lo notó.

Al terminar de comer las galletas y tomar la leche con mi madre allí en la habitación, conversamos un poco más con ella, luego yo fui a la cocina a lavar todo mientras mi madre y Liam fueron a la habitación de ella para que se acomodara para dormir. Ella le deseo las buenas noches y se fue, yo antes de ir a mi cuarto pasé a despedirme de él.

- Buenas noches, dije desde la puerta mientras caminaba hasta la cama.

Ya el estaba dispuesto a dormir cuando entre.

- Buenas noches, me dijo.

Se le veía feliz u eso me gustaba.

- Mañana te despierto temprano, claro si lo logro, s veces me cuesta un poco.

- Está bien acá estaré, te amo.

- Te amo más. Le dije.

Nos besamos, le apagué la luz y salí. Al llegar a mi habitación mi madre me confesó que le caía bien el chico, hablamos un poco más sobre él hasta que nos venció el sueño. Eran los siete cuando mi madre me despertó, el chófer de Liam ya estaba abajo esperando, yo fui a despertarlo mientras ella a pedirle que esperara un poco que aún no estaba listo.

Desayunamos los tres y Liam se ofreció a llevarme a la escuela, mi madre me dio permiso, con la condición de que no desviara el rumbo, también me devolvió mi teléfono, ya no tenía castigo aunque no se cumplió el plazo del mismo. Así lo hicimos, fui con él hasta mi escuela. Fuimos juntos en la parte trasera del auto, pasamos el camino abrazados.

Ya casi teníamos que separarnos nuevamente y mi corazón se estrujaba. Llegamos a la escuela viví a mis amigas sentadas en la entrada, le pedí a Liam que fuera a conocerlas, yo sabía que él tenía un problema con dejarse ver en público, pero igual lo pedí y él accedió. Fuimos juntos hasta ellas que se quedaron sorprendidas de vernos juntos tan temprano.

Los demás me miraban sorprendidos también, mis amigas lo trataron súper bien, no lo hicieron sentir incómodo para nada, luego de las presentaciones volví con el al coche para despedirnos, nos dijimos adiós, claro luego de besarnos mucho, vi su auto marchar y mi corazón entristecer.