SIEMPRE FUISTE TU MI AMOR...

Mateo dejo a Emily junto a la cama, empezó a besarla muy despacio. Las piernas de ella se debilitaron, ella puso sus brazos alrededor de su cuello respondiendo a su beso. El aprovecho para besarla con más pasión mientras bajaba el cierro de su vestido. Se cae el vestido, Mateo se alejó para admirar el cuerpo perfecto de su mujer. Ella tenía debajo del vestido un conjunto de lencería de encaje rojo que le aconsejo su amiga a comprar y utilizar para su primera noche con Mateo.

Ella estaba feliz haber escuchado a su amiga, al ver la mirada de lujuria en los ojos de su amado esposo. No podría parar de admirarla con este conjunto. Hasta que Emily se acercó y empezó a sacarle el saco. Se recompuso Mateo y volvió a los labios de Emily como queriendo comerla entera. Ella jadeó y gimiendo por estos besos, no podía creer que podría sentir tanto con unos besos apasionados. Mateo la levanto acercándose a la cama con ella sin deja de besarla. La dejo en la cama en medio del corazón de flores que estaba arriba de la cama. Ella lo ayudo a sacar su camisa y su pantalón dejándolo solo en bóxer.

-No sabes Emi desde cuanta vez sueñe

con eso. Desde que te vi en este avion, te deser mi amor, desee tenerte en mis brazos, hacerte mía. Te lo puedo decir mi amor sin complejo, hoy será mi primera vez. Emi se sorprendió cuando lo escucho y pregunto con voz baja que parecía más un susurro.

-Entonces nunca te acostaste con mi prima Farah u otras chicas? Se rio Mateo al escuchar la pregunta.

-Nunca sentí la necesidad de llegar más allá, ahora que lo pienso. Es como si algo me detuviera pero contigo, este anhelo era abrazador. Algo incontrolable, te digo que sufrí mucho cuando te abrace en el avion. Era una lucha interna por las ganas que tenía de besarte. Me resulto extraño que contigo quería ir más allá de un beso apasionado. Quería que fueras la madre de mis hijos pero después entendí que mi corazón ya te pertenecía.

Ella estaba tan feliz al escucharlo que lo beso con mucha pasión. El empezó a bajar desde su cuello dejando pequeños besos en cada centímetro de su cuerpo. El le saca la ropa interior dejándola complementamente desnuda. Ella quiso taparse por la vergüenza pero el le dijo que su cuerpo era lo más hermoso que ha visto sus ojos que ni una modelo de lencería le iguala en perfección.

El siguió su camino hasta llegar al centro de su femineidad. Ella no pudo contener más que la habitación se llenó de sus gemidos. No podría creer que el sexo era algo tan hermoso, tan liberador. Mateo al escuchar sus gemidos se sintió muy complacido consigo. Se despojó de su última prenda. Ella al no sentirlo levanto la vista y lo vio, no podría creer que Mateo fuese tan bien dotado. Le agarro miedo que cerro las piernas.

-Amor no tengas miedo seré muycuidadoso y suave, ya se que es tu primera vez también. No dejaré que entre todo si no es lo que quieres, si querés que pare porque tenés mucho dolor, lo haré. También mañana iremos con una ginecóloga para tus píldoras. Lo puedes dejar de tomar en el momento que tú decides que podemos ser padres. Ella se relajó y empezó a acariciar sus pectorales. El se posicionó y entro en ella despacio, el sintió un leve dolor pero vio que el paro sus movimientos. Mirándola en la cara para ver si hay signo de dolor o malestar en su rostro.

-Amor no pares por favor estoy. Te quiero completo adentro mío susurro ella mientras se movía debajo de ahora su esposo. El siguió entrando y saliendo dentro de su ahora esposa. A medida que aumenta sus estocadas. Se amaron tanta vez esta noche que Mateo estaba exhausto pero su pelirroja no estaba satisfecha aunque se subió arriba de su marido y seguía pidieron más. Ella no quería parar cuando sé salía el sol. No podría creer que su mujer sea puro fuego, pura pasión. Despues de besar su mejilla se durmieron abrazados pensando en que ahora serian el uno para el otro siempre...