Dos personas, que por destino se unen, un amor destinado a no ser, traición y venganza, muerte y pasión, desencadenado por El Desencuentro.
NovelToon tiene autorización de Adriánex Avila para publicar essa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Cap. 20 ¿Cómo sabes que son tuyos?
Ella se removió, pero Greco no tenía pensado soltarla y menos dejarla escapar.
—Ratoncita, déjame hablar, déjame explicarte, además que no puedes solo escapar con mi hijo en tu vientre, ¿que clase de Gato malo seria si permitiera eso? —dijo mientras ella se calmó un poco y se dio cuenta de que no puede solo salir corriendo.
—¿Cómo sabes que son tuyos? —dijo tontamente mientras Greco la volteó para mirarla con un poco de burla.
—Bueno, no creo que haya sido el oso, tal vez uno de los puercoespines que cavaban cerca de la puerta, pero no creo que sea el coyote bullicioso que pasaba por ahí en las noches, así que estoy cien porciento seguro de que son míos — replicó Greco mientras que ella se sonrojó, eso era técnicamente correcto.
—Bu…, bueno, el oso me quería comer, pero literalmente, y los otros no parecían buenos partidos — dijo un poco más tranquila mientras que Greco la jaló suavemente para que se sienten de nuevo.
—Bianca, tu me contaste sobre tu pasado y tu mala situación, ahora quiero que sepas la razón por la que estaba en ese lugar y estuve ahí durante 5 años, y también la razón por la que salí, y tu eres la razón, fue una ratoncita ruidosa y bulliciosa quien sacó al gato malo de su guarida, pero primero quiero que me escuches — dijo tranquilo mientras ella solo asiente, esos ojos que la derriten cuando la miran así.
Greco contó a Bianca sobre lo que habia pasado en esa epoca, la traicion, los mensajes, como su esposa se revolcaba con su hermano gemelo bajo sus narices y esa mujer no tenia nunguan verguenza, como es que su familia santifica a su hermano y a su esposa y lo creen un demente, le mostró todo, los videos, los mensajes, como las cosas eran mas sucias y bajas de lo que una persona normal se imaginaria.
—Estoy con los trámites de divorcio, el niño no es mío, aunque en una prueba de ADN si saldria como mio, es de mi hermano gemelo, pero simplemente no puedo verlo, es el recordatorio de la traición, es un prueba física de toda esta traición —dijo mientras que Bianca lo mira anonadada y vuelve a revisar lo mensajes, los videos, aunque ella puedo ver de inmediato que ese hombre del video no era greco, su esencia era tan diferente y su mirada era cínica y maliciosa, algo que nunca vio en Greco, su gato malo era sensual, taciturno y a veces malvado, pero en el buen sentido.
Bianca lo miró un poco tímida, y se recorrió como haciendo campo para que él se siente con ella, Greco no lo pensó dos veces y casi se teletrasota a su lado.
—Greco…, no quiero ser la causante de algo así, yo…, solo quiero saber que lugar ocupo en esto, muy aparte de lo que pasa con los bebés…—dijo ella mientras que el hombre guapo sonrió alegre, ahí estaba esa ratoncita negociando desobedecerlo, pero pareciendo obediente.
—Bianca, quiero intentarlo contigo, te he buscado desde que volví y solo me tomó tres días, igual te hubiera amarrado a mi si no estuvieras embarazada, pero esto me hace mas que feliz, son mis primeros hijos, mis primogénitos —dijo sonriente haciendo que Bianca se sonroje y su corazón latía a mil por hora, eso quería escuchar, aunque ellos se encontraron en un mal momento, deberían luchar para que este desencuentro salga bien.
Bianca sonrió y se acercó a él un poquito mientras que Greco no se aguantó y la abrazó con desesperación, claro que la había extrañado, la había añorado y ahora con esta pancita lo esta volviendo loco, después de 5 largos años sentía una plenitud en su alma, en realidad, no reconoce haber tenido ese sentimiento tan genuino y embriagante, esa sensación de felicidad absoluta.
Sin que nadie pueda evitar ,el amoroso abrazo fue interrumpido por el celular de Bianca que sonaba sin detenerse, cuando ella vio el nombre contesto ya que ellos dijeron que no llamarían seguido a no ser una emergencia.
—Bibi, vino el apestoso de Ariel, estuvo en la repostería, no salgas a ningún lado, puede ser que vaya a mi departamento en cualquier momento, te llevaremos al departamento de Sara, se lleva peor con ella, así que hoy te cambiaremos de lugar — dijo Silvia muy angustiada, sin embargo, Bianca se sobresaltó, no podía creer tan mala suerte.
Greco que estaba cerca de ella, escuchó lo que dice Silvia quien no era muy cauta al decirlo.
Greco le quitó el celular y habló con la joven, claro que sabe que son sus amigas de confianza y esto lo comprueba.
—Hola, soy Al, el padre de los gemelos de Bianca, ahora me encargo yo de su seguridad, les avisaré cuando puedan verla, no se preocupen, yo la cuido —dijo para colgar mientras Bianca lo mira sin entender.
Bianca miró a Greco como una tonta, ella es joven e ingenua, mientras que Greco es una pantera disfrazado de gato, así que ya tenía a Bianca en su territorio y la protegerá contra todos.
—Ratoncita, ven, te daré algo para que te pongas cómoda, debes descansar, haré que te compren ropa, te quedarás conmigo hasta que lo bebés nazcan y luego destruiremos a tu familia, cuando todo sea tuyo de nuevo, seremos una familia y listo, ahora debes darte un baño, descansar y no preocuparte por nada — dijo tranquilo mientras la lleva de la mano a su dormitorio.
*_*
Mientras tanto, en la repostería Sara y Susi están confundidas, llamaron de nuevo, pero el celular parecía apagado, claro que Greco no la compartiría en este momento, no ahora.
ellas solo se resignaron, pero de a momentos se reían, si era verdad, parecía que es hombre no solo la quería para desahogarte, parece que la tiene metida en su corazón.
*_*
Mientras tanto, en la mansión Argirakis, Ana llora histéricamente, un abogado ha dejado la solicitud de divorcio, Greco está decidido a divorciarse. Los padres de Greco están conmocionados, su hijo ha perdido la razón para ellos, así que deben hablar con el abuelo Darío para que intervenga y lo haga entrar en razón.