Luna se entera de la peor manera posible de que el hombre al que ella amaba la estaba engañando, se siente humillada y menospreciada.
¿Qué pasa cuando ese amor es unilateral? ¿Qué se hace cuando descubres que solo te han usado? ¿Se puede volver a confiar en el amor?
Ella solo quería ser amada, él solo deseaba su cuerpo.
La vida les tiene grandes sorpresas preparadas. Los caminos son inciertos, las personas cambiantes. ¿Es posible el amor para ellos? ¿Qué tendrán que hacer para conquistarlo?
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Verdades
No se si lo que está ocurriendo con Vito es real o no. Hay algo en él que me hace sentir completa, plena, me reconforta y me llena de paz. Es más de lo que siempre había imaginado. Sus besos me transportan a otra dimensión, en sus brazos siento que el mundo se detiene y somos solo él y yo. Sé que es una locura, que ni siquiera lo conozco. Pero no puedo evitarlo, me convierto en otra persona, incluso hablo distinto. Mi voz suena mimada y dulce. Me siento como una niña pequeña, incluso hago puchero todo el tiempo. Parezco una tonta, me derrito en sus brazos. Todo en él me encanta, me envuelve y me reconforta. Es como si siempre lo hubiera estado esperando. Cómo si mi vida comenzara y terminara en él y con él. Estoy loca, completamente loca. Y no pienso dejar de vivir y disfrutar esto.
Al llegar a casa encuentro a todas muy felices. Las chicas me informan que por fin Ana aceptó salir con Cesar, ya está casi lista para su cita. Es bueno que se de una oportunidad. No sé bien cuál es la historia de Ana, si se que ha sufrido mucho. Algo pasó en su vida que la hizo ser hoy la mujer que es, que busca ayudar a los que pueda. Ese algo es lo que la impulsó a abrir su casa a chicas como nosotras, que no solo necesitamos donde vivir, sino también una familia, contención y protección. Ella nos brinda un hogar.
Estas hermosa Ana, tienes que prometernos que te vas a divertir y la vas a pasar bien. No hagas nada que nosotras no hagamos ¿eh? Lisa le dice levantando las cejas de manera sugerente. Siempre tan loca y risueña, todo lo dice con suma picardía haciéndonos reír de inmediato.
Hay muchachas, como creen, yo soy una mujer grande y seria. Solo estoy cumpliendo con una apuesta, mi tiempo ya pasó de repente la mirada de Ana se llena de dolor y nostalgia. Todas nos quedamos mudas por la manera en que su semblante cambió. Ninguna sabe por qué, pero nos dimos cuenta de que su dolor es aún más profundo del que imaginamos.
Anita querida, para el amor no hay edad. No te niegues a la posibilidad de sentirte amada. No sabemos cuáles son tus cicatrices, pero sí sabemos que es importante dejar el pasado atrás. No se trata de olvidar, sino de aprender a vivir con ello. Nosotras estamos con vos, te apoyamos en todo. Sé que hablo en nombre de todas cuando te digo que te vemos como nuestra mamá, y si no te decimos así es por vergüenza no por que no queramos. a esta altura ya todas habíamos comenzado a llorar. Andrea es la más seria de las 5, es la que guarda las formas y composturas. Pero ahora expresaba lo que todas sentíamos.
Mis niñas, claro que pueden decirme mamá, nada me haría más feliz. Ustedes me han devuelto la vida, y ahora Luna me hará abuela. Soy muy feliz gracias a que están conmigo la sonrisa había vuelto a sus labios y a sus ojos, no queríamos que ella se pusiera mal, al contrario queríamos que disfrutara de su cita. Justo tocaron a la puerta y pudimos notar que por más que se niegue estaba muy nerviosa por esta salida. Sabemos que Cesar le gusta y no vamos a dejar que se acobarde.
Con mucha ilusión y entusiasmo Ana sale a cenar con Cesar. Este nos saluda a todas, antes de tomar la mano de su chica y salir. No noté a Cesar nervioso, supongo que no ha visto a Cristian o no tiene nada que decirme. No sé si sentirme tranquila o más nerviosa. Las chicas están felices, han comprado todas las telas necesarias y se han puesto manos a la obra. Los primeros pedidos son para dentro de 9 días ahora, pero si se pueden terminar antes mejor. Me he quedado sin ningún ahorro, pero sé que nuestro negocio va a dar sus frutos.
Noto a Romi un tanto extraña, algo ha ocurrido. Y yo soy muy curiosa, lo tengo que saber.
Doctora Romina Ruiz ¿Se puede saber qué es lo que ha pasado que la tiene con esa cara de boba? todas reímos, de verdad su cara es un poema.
Mmmmm, ha sido un día largo, y de descubrimientos para mi. Estoy feliz por un lado, pero muy decepcionada por el otro... se sentó frente a mi, mientras las chicas trabajaban en las telas y Stella cocinaba la cena. Pero todas escuchábamos, sabíamos que necesitaba hablar Hoy asistí al doctor Vitali en una cirugía, y me invitó a ser parte de su equipo en cuanto me reciba esa es una gran noticia, pero había algo más, su silencio nos indicaba que algo había pasado.
Es genial, es lo que querías, pero algo no te gusta se nota esa fue Stella, tan perceptiva como siempre. Me hecha una mirada que me dice que después de Romina llega mi interrogatorio.
Sí, lo que me molesta es que yo hice la solicitud para ser parte del equipo de otro cirujano y este me rechazó. Ahora resulta que lo hizo porque Samuel le dijo que yo no serviría para el puesto ¿Pueden creer? Estoy tan indignada, enojada y desilusionada. No entiendo por qué lo hizo, no es como si a él le afectara en algo a este punto ya estaba conteniendo las lágrimas, es obvio que este hombre es un patán egoísta. Quería tenerla a sus pies o sometida o no se qué.
Es un idiota Romina, por favor decinos que ya no te importa ese tipo. Entendemos tu decepción, lo que te hizo es muy bajo, porque estaba cortando tus posibilidades de crecer. Menos mal que te enteraste de esto. No le des más poder sobre tu vida. Solamente vos podes quitarle la posibilidad de seguir lastimándote con sus acciones por primera vez Lisa daba una respuesta tan seria, se notaba su indignación y la de todas. Yo ya tenía ganas de buscar otro obstetra, él ya no me inspira confianza, más si atiende al hijo de Cristian.
Tranquilas, ya no lo voy a dejar ser parte de mi vida ni como amigos. Es más ya lo bloquee. Es demasiado lo que me ha hecho, estoy segura de que el sabía lo que yo sentía, por eso me llamaba y me contaba de sus conquistas. A la vez que me coqueteaba. Creo que le gustaba tenerme siempre ahí, a la espera, dispuesta. GRRRR ¡Qué idiota que he sido! Con un grito desesperado rompió a llorar. De verdad que es un cretino. Todas corrimos a abrazarla. Necesitamos que sienta que no está sola Lo bueno es que la operación era a Dante, el oficial que me invitó a salir. Ahora sí vamos a tener una cita en cuanto se recupere esa era la razón de su sonrisa, nos cuenta con lujos de detalle todo lo ocurrido con su oficial, y su suegro. Mientras ella habla yo pienso mis pasos a seguir.
Hay que buscar otro doctor para que lleve mi embarazo, yo no confío en él. Además él es... dudo si seguir o no, creo que puedo confiar, que es hora de que confíe en ellas es el doctor de la esposa de Cristian el papá de Esmeralda suelto sin respirar siquiera y las cuatro me miraron como si me hubieran salido alas.
¡Qué! gritaron al unísono.
Si, los vi ayer, ellos eran los que salían del consultorio cuando nosotras íbamos a entrar respiro profundo, miro al cielo y cierro los ojos, debo encontrar el valor para dejar salir todo lo que estoy guardando.
Comienzo a contar mi historia a las chicas, pero para que me entiendan tengo que ir desde el principio, desde mi infancia, mi papá, mi mamá, el orfanato y finalmente mi entrada a trabajar a esa empresa y como acabe en una relación con el jefe. Mi descubrimiento de sus verdaderos colores. Por último Vito. Quiero contar todo y cuento todo.
No te puedo creer, ese tipo es de lo peor. Peor que el doctorcito ese jajajaja Stella estaba indignada, como todas.
Lo bueno es que ahora conociste a un papacito ¿No? Lisa y sus comentarios pícaros. sube y baja sus cejas con sus ojitos brillantes.
Ahora lo importante dice Adriana volviendo a la seriedad tenes razón, hay que cambiar de doctor, no podemos correr el riesgo de que le pase información a ese cretino. Entiendo que no le vayas a quitar su derecho de padre, si es que quiere ejercerlo, lo cual dudo, pero hay que tener cuidado. Yo pienso que esa basura no tiene que acercarse a nuestra muñequita, es más yo tengo miedo de que intente hacerle daño. Luna, no te confíes, para ese tipo un hijo extramatrimonial es muy peligroso Stella está preocupada, y yo creo que tiene razón, no había dimensionado eso. Si le importa tanto el dinero puede que piense que quiero sacarle algo, o peor que quiero hacer público mi embarazo. Tengo que pensar que hacer y cada paso que vaya a dar. No me puedo arriesgar a que le hagan algo a mi pequeñita.
Nuestra charla continuaba, estábamos pensando en las medidas a tomar para que Cristian no pueda hacernos daño ni a mi bebé ni a mi. Tenía que esperar, yo no lo iba a contactar, no me iba a exponer en lo más mínimo. Tampoco voy a huir, ni loca. No he hecho nada. Si bien estoy en desventaja porque yo no tengo dinero, creo que puedo manejar esta situación. Siempre y cuando cuente con mi familia, se que sola no puedo nada. Y por alguna razón siento que puedo contar con Vito, él me ha inspirado mucha confianza. Cuando vuelva le voy a contar toda la verdad sobre el padre de mi hija. Recién se va y ya siento que lo extraño, espero que no se demore demasiado.
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En la puerta de un lujoso restaurant una mujer muy enojada se sube a su auto y le indica al chofer la dirección a la que quiere ir.
No puede creer lo que ha visto. Eso no puede ser, no tiene sentido, no al menos para ella. Iban de la mano, no es lógico, él no le tomaría la mano a ninguna mujer. Siempre se ha mantenido lejos de todas, por eso se había quedado tranquila. Hasta se casó pensando en darle celos, se embarazó pensando que luego él sería el padre de su hijo, cuando lograra su objetivo de seducirlo. Y ahora, salía de la mano de una zorra pobre. Si porque se notaba en los harapos que llevaba puestos su falta de clase. Es una cualquiera, una pordiosera sin clase, y no va a permitir que le saque al hombre que ha perseguido por años.
Al bajar del auto corre al interior de la casa a los brazos de su tía Melisa Mont.
Camila mi niña ¿Qué tienes? preocupada la mujer abraza a la niña de sus ojos. Cuánto desearía que ella fuera su hija, era su vivo retrato. No se rendían ante nadie y siempre obtenían lo que querían no importaba lo que tuvieran que hacer.
Vito tía, lo vi, de la mano de una mujer, una zorra sin clase y por lo que pude notar embarazada lloraba desconsolada ante lo que ella veía como una ofensa del hombre que alguna vez la amo, y que, según ella, aún la ama.
¿Qué? ¿Estas segura? No puede ser, no lo voy a permitir. Me va a escuchar, él solo puede hacer lo que yo digo. Tranquila, quizá sea solo una mujerzuela que se lleva a la cama. Si bien es raro que se lo vea con una mujer, debe ser solo un desahogo. No te preocupes. De todos modos ya te casaste, te dije que no lo hicieras, que ya íbamos a lograr que se casaran. Pero te encaprichaste con darle celos la mujer se veía sumamente molesta con su hijo y su sobrina, ya que no hacían las cosas como ella quería.
Demasiado había hecho Melisa Mont para poder obtener la fortuna de su padre. Demasiado se sacrificó adoptando a ese mocoso mugroso, que ahora no la obedecía. Era una bendición que no fuera necesario ponerle también su apellido. Con tenerlo en casa le bastó. Ahora no iba a permitir perder el control de todo, ella no iba a perder lo que tanto se había sacrificado por conseguir. Algo se le iba a ocurrir. Tenía que averiguar quién era esa mujer y alejarla de Vito. No puede estar con nadie que ella no autorice. No puede perder el poder que, según su óptica, aún tiene sobre él. Se hace el rebelde, pero siempre termina haciendo lo que ella le pide. Ella nunca pierde si no es por las buenas será por las malas pero que Vito se casa con Sandra, se casa con Sandra, como que su nombre es Melisa Mont. Lamentablemente Camila ya no forma parte de sus planes porque ya está casada. Si se divorcia sería un escándalo que su familia no puede permitirse.