Te Regalo Tu Libertad -

Cristian:

Mi familia decidió adelantarse al evento, son las 6:00 pm, y es hora en qué no se nada de Lily, hoy por la mañana fui a su departamento a buscarla, pero una vecina dijo que no llegó en toda la noche, intenté marcar a su celular, pero igual nadie contesto, más tarde marque a Clara y lo mismo, no tengo idea de en dónde puede estar...

Se hace tarde para el evento, espero poder desocuparme pronto y poder ir nuevamente a buscarla para saber de ella, bajo las escaleras y subo a mi auto, la tarde es agradable, arranco hacia el lugar.

Luego de un tiempo llegó al sitio, hay demasiadas personas aquí, todas de etiqueta, las mujeres muy bien vestidas, parecen muñecas, algunas me sonríen tratando de coquetear, les regaló una sonrisa y sigo con mi camino, los meseros ofrecen bebidas en sus charolas de las cuales tomo alguna copa.

- ¡Joven Cristian!- escucho la voz grave del señor Leonardo.

- Buenas tardes, señor Guzmán -

Contesto - ¿Cuándo regresaste? Tenía años sin saber de ti ja ja- palmea mi hombro con una gran sonrisa.

-Hace un año-

-Ya veo, has crecido demasiado, mírate ya eres todo un hombre ja ja , por cierto ¿En dónde se encuentran tus padres? Quisiera saludarlos, hay un modelo de camiones de carga que me gustaría obtener, necesito al menos 10 ja ja-

- Por lo que veo su negocio va bien, que gusto, he... No sé, en estos momentos yo también los estoy buscando- respondo tratando de zafarme de él.

- ¡Oh ya veo, ya veo, pues ¿Que te parece si buscamos juntos? Ja, ja, ja - su voz es áspera y cansada, pero con mucha alegría, después de todo es un hombre de 66 años.

- Si claro, vamos no perdamos tiempo- lo guío y el señor Guzmán me sigue mientras parlotea cosas que no logro entender, por el bullicio de tantas personas aquí.

- ¿Ya saben quién llegó? Llegó Axel, Axel llegó, pero viene acompañado.- escucho decir a un grupo de mujeres que están en bolita platicando

- Y ... ¿Al menos es bonita?- Dice una rubia - No lo sé, llegaron con muchas escoltas, y la trae bien tapadita- responde una morena

- ¿Que más da? Ese Axel es un gruñón- responde una castaña

- Yo prefiero a los hombres guapos, agradables y muy sociables, así como Cristian el joven Ivanov- suspira la mujer.

- Pues yo prefiero a Axel, me encantan los hombres como el, serios, y enojones además el también es muy guapo - Responde la rubia - ¿Y tú a quien prefieres?-

Dicen ambas amigas mirando a la chica morena - A mí me da igual, los dos son muy guapos, altos, atléticos que más da su carácter, ambos tienen dos cosas en común: son mujeriegos y también los dos tienen dinero a manos llenas ja ja ja, mientras me tengan como a una reina, les perdono todo jajaja-

- Que miedo- escucho decir al par de amigas, típico de las mujeres, nunca puede faltar el trío de amigas, la rubia engreída, la castaña romántica y la morena desalmada.

 Continuamos buscando a mis padres, ya me urge deshacerme de este señor, no es que me desagrade, solo que cada vez que habla, siento como si me faltará también el aliento a mí.

Pasan casi 15 minutos y la subasta empieza, todos los que participan en esto empiezan a tomar asiento, otros se quedan de pie mientras conversan con otras personas, agradecen a los anfitriones de este evento, la señora Catalina Bianchi luce impecable, el señor Francesco Colombo, muy elegante, aunque falta alguien ahí... ¿En dónde estará Axel? Busco con la mirada, Pero no logro ubicarlo.

Pasa el rato y la subasta se lleva a cabo, todos los artículos donados han sido comprados, las personas empiezan a levantarse del lugar me giro con la intención de reunirme con mi familia.

-Buenas noches a todos, gracias por estar aquí, en este bonito evento que realizamos año con año la familia Colombo- vuelvo a girar para ver qué se trata de Axel - Hay un anuncio más, ase un gesto con su mano, madre, padre, es un verdadero gusto informarles que he decidido unir mi vida junto a la de mi hermosa prometida, Lily Moore- Todos aquí se encuentran eufóricos por la noticia, llenan el lugar de aplausos.

- Gracias a todos, y aprovechando, ya que estamos aquí todos reunidos, me gustaría pedirle al joven Cristian Ivanov, por deseo de mi hermosa prometida, sea el quién la entregué en el altar, como sabrán sus padres ya están descansando, y tú y Lily fueron muy buenos amigos desde el colegio hasta el día de hoy- Sus palabras son como dagas que lanzan una de tras de otra directo a mi pecho, carraspeo un poco, pues siento que la corbata es sofocante.

- ¡Que gusto! Por fin después de tantos años, se casarán ja ja ja y ya llevan dos años de retraso, si no fuera por el accidente de sus padres... y la joven Lily es realmente hermosa, yo quería que mi hijo mayor se casara con ella, pero desde que nació sus padres se la dieron a los Colombo para matrimonio de su hijo ja ja ja que lindo es ser joven - Volteo a ver al señor Guzmán con una mirada seria , tengo tantas ganas de cerrarle su boca de un puñetazo, para que deje de hablar, el palmea mi hombro con tal alegría y yo solo aprieto mis puños y respiro.

-Joven Cristian me dio gusto convivir contigo, suerte en la entrega de la novia, ya vi a sus padres me reuniré con ellos- todos aplauden mientras veo a Lily en un vestido largo entallado, cubre todo su pecho y manos, con un escote en la espalda bastante pronunciado y cabello recogido.

Lily no voltea, ni siquiera levanta su mirada, veo como Axel levanta su quijada para besarla, la señora Catalina no cabe de felicidad, veo como sus dos padres los felicitan.

Mi garganta duele, siento que si estoy aquí, no resistiré más...

Por fin cuando estoy retrocediendo mi mirada se cruza con la de Lily, su mirada refleja arrepentimiento y vergüenza, trago grueso.

- ¿Sabes qué? Siempre si me quiero casar, después de todo ya la hice mia- Me dice este idiota de Axel mientras golpea mi hombro con el suyo al pasar de largo junto a mí con una estúpida sonrisa en su rostro, seguido por sus dos mejores amigos, Pedro y Luciano...

Salgo del lugar y me voy derechito a un bar, trato de ahogar esto que siento en alcohol.