ANÓMALOS

(bostezo)

Durante gran parte de la noche, estuve practicando el poder ver el núcleo de las personas; pero no usé precisamente a una persona para entrenar, si no que, realice mi práctica con un ave que dormía en su nido. Aunque por el mismo hecho de haber estado practicando sobre un ser que no tenía su núcleo activado, el entrenamiento se volvió mucho más difícil, pues solo pude ver el núcleo del ave una sola vez y esto solo por unos pocos segundos.

(Bostezo)

«Hoy no creo poder ir al entrenamiento» pensé mientras trataba de mantenerme de pie.

El sol apenas se mostraba levemente en el horizonte, anunciando que amanecería muy pronto. Entonces, tropecé con mi propio pie y caí al suelo, provocando que produjera un pequeño gemido de dolor.

«Esto sí que me dolió... Por suerte, caí en la hierba y no en el camino de concreto»

Estaba tan cansado y tenía tanto sueño, que la hierba me parecía bastante cómoda.

—¿Qué estás haciendo, Lian?

Y antes de quedarme dormido en este lugar, escuché la voz de Sofía realizándome una pregunta.

—¡¿Eh?!

—¿Qué haces tirado en el suelo?

—¡Ah!, no es nada, simplemente tropecé y caí.

—...

—Bien, listo.— dije mientras me levantaba del suelo.

—Te ves muy agotado.

—¿En serio?

Aunque trate de actuar como alguien que no sabía nada, Sofía no creyó en mi fachada.

—Y... ¿Me vas a decir que estabas haciendo?

«Creo que no me dejará ir sin que le diga la verdad»

—Estaba entrenando por el área del mirador.

—...

Ella permaneció en silencio y solo me observaba muy detenidamente.

—Bien.

Y después de haber dicho eso, Sofía simplemente comenzó a caminar hacia donde sea que estuviera dirigiéndose. Pero antes de que pudiera marcharse, le realice una pregunta.

—Y tú... ¿A dónde vas a esta hora?

—Me llamaron los líderes.

—¿Por qué?

—No lo sé, pero será algo importante para que me llamen a esta hora... Deberías regresar a la cama... Antes de que te quedes dormido en cualquier otro lado.

—Sí... Justo haré eso... Entonces, nos vemos más tarde.— exclamé mientras me alejaba de ella.

Y así ambos retomamos nuestros caminos hacia nuestros respectivos destinos.

Cuando llegue al barracón en el que estaba mi habitación, apenas podía mantener mis ojos abiertos, solo bastando unos segundos para quedar completamente dormido sobre la comodidad de mi cama.

No sé cuanto tiempo habrá pasado, pero dormir realmente me ayudo a recuperar algo de mi energía física y mental. Aunque hubiera deseado que Olivia me ayudará como lo hizo en la anterior ocasión; pero no quería ir a molestarla por algo como esto, y mucho menos cuando me había dicho el día anterior que descansará.

«Hoy no quiero ir al entrenamiento»

—!Corre!

—¡Vamos!

En el exterior se podía escuchar como los adultos caminaban con rapidez, mientras a los niños se les escuchaba correr y gritar, pero no parecían ser gritos de terror, más bien eran gritos de alegría. La situación solo me generó preguntas internas.

«¿Qué sucede ahora? ¿Estoy soñando?» pensé mientras salía de mi habitación.

Una vez que salí de mi habitación, me acerque a la puerta del barracón que conducía al exterior y la abrí. En un principio la luz del sol nublo mi vista, no dejándome ver lo que ocurría afuera, teniendo que pasar un par de minutos para volver a recuperar mi visión completamente.

«Como odio esto»

Cuando recuperé mi vista, todo se había calmado en el exterior, es más, ahora todo el lugar quedó en completo silencio, como si se tratara de un pueblo fantasma.

«¡¿Qué?! ¿A dónde fueron todos?»

Entonces, comencé a buscar por medio de mi vista a todo el mundo, sin lograr ver a alguien en un principio, pero alcanzando a observar como todos desaparecían a la distancia.

«¿A dónde van?»

Mi curiosidad me ganó, así que decidí alcanzar a la multitud de personas.

—Disculpa, ¿Qué sucede? ¿Por qué están corriendo todos?— le pregunté a uno de los sujetos que estaban al final del grupo de personas.

—Llegaron los demás anómalos.— exclamó con felicidad el sujeto.

—¿Los demás?

—Sí... Cuando la DCA dio el comunicado de hace unos días... Los líderes decidieron llamar a todos los anómalos de regreso a casa... Y hoy llegarán al puerto los últimos anómalos que se encontraban fuera de la isla.

«Así que era eso.. Por suerte, no se trataba de ninguna emergencia» pensé con alivio.

Una vez que llegue al puerto, pude apreciar como todas las personas de la isla se habían reunido para recibir a los anómalos, generándose una escena muy parecida a la que observé en mi primer día aquí. Entonces, el ferry en el que venían los anómalos atracó en el puerto, y del barco descendieron 20 anómalos.

—Así que ya llegaron.— exclamó Olivia detrás de mí, provocándome un pequeño susto.

—¡Eh!, ¿Desde cuándo estás aquí?

—¡Ja, ja, ja!— ella solo rio levemente por mi reacción. —Acabo de llegar.

—No vuelvas a asustarme así.

—Bien, no volveré a hacerlo.

—¡¡Olivia!!— grito una voz femenina a la distancia.

Y en cuestión de segundos una chica estaba abrazando a Olivia.

—Jessica, también me alegra verte, pero me estás abrazando muy fuerte.— exclamó Olivia mientras trataba de despegar a la chica de ella.

La chica llamada Jessica tendría unos 20 años de edad, de piel clara, llegando a parecer pálida, sus ojos eran azules, y su cabello rubio era largo y ondulado; su vestimenta se trataba de un uniforme militar de camuflaje, teniendo hasta unas botas militares. Sin embargo, lo que más resaltaba en ella no era eso, ni lo hermosa que era, sino que en su espalda colgaba un rifle de francotirador, pero sin tener la mira puesta en el arma.

—¿Quién es él?... ¿Tu novio?

—¿Qué?

—Solo bromeó... Y bien, ¿Quién es?

—Ya no molestes a Olivia.— exclamó una voz masculina.

Y ahí estaba, un hombre de posiblemente unos 40 años de edad, con la piel oscura, ojos de color marrón oscuro, y una calva reluciente; solo vestía un pantalón negro, una camisa blanca de botones y unos zapatos, todos ellos con bastantes rasgaduras y suciedad encima. Además, sus brazos y rostro estaban llenos de heridas.

—Señor Donovan, ¿Qué le paso?

—Durante nuestro viaje de regreso, nos encontramos con agentes de la DCA.

—¿Se enfrentó a un rango uno?

—No a uno, fueron dos rangos uno.— exclamó otro sujeto.

El otro sujeto parecía ser más joven que la chica llamada Jessica, probablemente de unos 16 o 18 años; la piel de él era clara, pero no tanto como la piel de la chica, los ojos eran marrones oscuros, y su  cabello era negro; él vestía muy parecido a al hombre llamado Donovan, solo cambiando su pantalón de negro a gris.

—Parece que tú no tienes tantas heridas como el señor Donovan, Akiro.

«¡¿Akiro?! ¿Será de Hinode o de Shān?»

—...

Él solo permaneció en silencio.

—Y entonces, Olivia... ¿Quién es él?— exclamó Donovan mientras me observaba.

—Él es Lian. Es de quien les habló Sofía y el señor David.

—Así que es él... Un gusto en conocerte, soy Donovan.— dijo con su mano extendida hacia mí.

—También es un placer conocerle, señor.— exclamé mientras le estrechaba la mano.

—Yo soy Jessica... Si quieres tener algo más que una simple amistad con Olivia... Deberás ser aprobado por mí.— dijo mientras señalaba con su pulgar así misma.

—Jessica, basta con eso.— dijo Olivia con cierta molestia en su voz.

—¡Ja, ja, ja!— yo solo reí ante las palabras de Jessica y el enojo de Olivia.

—Hola, soy Nishimura Akiro.— dijo con desinterés.

—Hola... ¿Eres de Hinode o de Shān?

—De Hinode.

—¡Así que aquí estaban!

Todos dirigimos nuestras miradas hacia el lugar de donde se escuchó la voz.

—¡Sofía!— exclamó Jessica para segundos después abalanzarse sobre ella.

—Me alegra que todos hayan regresado a salvo.— exclamó Sofía mientras abrazaba a Jessica.

—Bueno... Ellos dos casi no regresan.— Jessica exclamó y señalo con su dedo índice a Donovan y a Akiro.

—Ahora que los veo con mayor atención... ¿Qué les ocurrió?

—Nos encontramos con dos agentes de rango uno de la DCA.— dijo Akiro.

—Hum... Ya veo. ¿Quienes fueron exactamente?

—El agente Kenan y la agente Isabel.

—Así que ellos dos... Bueno, al menos sabemos como pelea Isabel... Era el único agente de rango uno del que no sabíamos su forma de pelear.

—Pues tendrás que esperar más tiempo, porque ella no peleó para nada. Solo observo la pelea desde la distancia.— exclamó Donovan.

—¿En serio?— preguntó incrédula Sofía.

—Sí.

—Entonces... ¿Kenan les gano a los dos?— dijo Olivia mientras observaba las heridas de Donovan y Akiro.

—Es muy escurridizo.— exclamó Akiro.

—Bien, dejemos la charla para después... Los necesitamos en el laboratorio. Hay algo que debemos discutir todos nosotros.— dijo Izan mientras aparecía de la nada.

«¿Por qué todos llegan de la nada?»

Tras las palabras del señor Izan, todos comenzaron a avanzar en dirección al laboratorio. Yo simplemente observé como se alejaban del lugar.

—Tú también, Lian.— exclamó Izan.

—¡¿Yo?!— pregunté con sorpresa.

—Sí... Hablaremos de algo relacionado contigo, así que deberías estar presente en la reunión.

Di un ligero asentimiento para después seguir a todos hasta el laboratorio; el laboratorio en el exterior parecía ser un edificio más de los abandonados que se encontraban en la isla, pero en el interior era totalmente diferente. Se podían encontrar desde prototipos de armas, hasta frascos con sustancias ciertamente dudosas.

Nosotros llegamos hasta una sala en la que solo se encontraban algunas sillas, una pizarra con algunas tizas y un mapa del continente. Las luces del lugar parpadeaban una que otra vez, las paredes ya estaban agrietadas y sucias, y el suelo era más de lo mismo. Aunque todo lo anterior era muy visible en todo el laboratorio.

En la habitación se encontraban Sara, Asher y Chloé. El único que no estaba presente en el lugar era Kevin.

—Como ya estamos todos reunidos, comencemos la reunión de hoy. Tomen asiento, por favor. — exclamó Sara. —Los puntos que veremos hoy serán los siguientes: Primero, el avance en la investigación de David y Sofía. Segundo, elaborar un plan para rescatar al señor David.

—Bien... Sofía, puedes hablar.

—Sí... En cuanto a la investigación sobre el núcleo... Gracias a Lian, pude dar por cierta la teoría que elaboramos tanto el señor David como yo. Incluso él... Puede diferenciar entre un anómalo que despertó de forma natural y un anómalo que lo hizo artificialmente.

—¿Es cierto eso último, Lian?— preguntó Asher.

—Sí.

—¿Puedes darnos una prueba?— exclamó Izan.

—Claro.— dije con seguridad.

«Por favor... Que logré hacerlo en el primer intento»

Aunque mi seguridad se había ido en cuestión de segundos, pude lograr ver el núcleo de todos en mi primer intento. Entonces, señale a Chloé y a Sofía como anómalos que despertaron de forma artificial, mientras a los demás los señale como anómalos con un despertar natural.

—Bien hecho, Sofía... Esperamos más avances muy pronto... Espero puedas seguir colaborando con ella, Lian.— exclamó Sara con una leve sonrisa.

—Claro, no hay problema.— dije con orgullo.

Sofía, por otro lado, se limitó a decir un simple sí a las palabras de Sara.

—Ahora vayamos al tema principal de la reunión. El plan de rescate del señor David.— exclamó Asher mientras se levantaba de su silla. —Comencemos con la carta que nos llegó hace dos días.

Tras haberlo dicho, saco un sobre del bolsillo de su pantalón para posteriormente abrirlo delante de todos los presentes.

— Léanlo... Y después se lo pasan a la persona que tenga a uno de sus lados.— dijo Asher mientras le entregaba la hoja que venía en el sobre a Chloé. —No estamos seguros de si el contenido de la carta es real... Por lo que enviamos a Kevin a investigar.

«Así que por eso no se encontraba aquí»

—Oigan, ¿Está bien que yo esté aquí?

—Olivia tiene confianza en ti, por lo que no hay sospechas de ningún tipo contigo... Además, puede que te unas algún día a nosotros, y no veo mal que vayas aprendiendo.— exclamó Izan con una sonrisa.

«Este tipo ya da por hecho que me uniré a ellos»

Cuando la carta llegó a mí, pude leer lo que estaba escrito en ella.

Hola, quiero dejar en claro que soy un anómalo que no está en ninguna organización. Además, esto es información que les interesará a los líderes de Los libertarios.

Les escribo esta carta porque tengo información de uno de los líderes de su organización. La información consiste en el traslado que ocurrirá en aproximadamente dos días; el traslado será desde la ciudad de Arteri hasta la fortaleza de Metel, ubicada en el sur de la región de Svet.

El convoy estará formado por vehículos policiales y de la DCA, siendo en total diez vehículos. Tengo entendido que solo serán agentes de rango 2 y 3 los que irán en el convoy, claro, y uno que otro cazador y vigía, pero esto no es un problema para ustedes, o quiero creer eso.

Espero les sirva la información.

—Bien... Ahora que todos leyeron la carta, les diré el plan que elaboramos Asher, Izan y yo.— exclamó Sara mientras se acercaba al mapa. —Arteri se encuentra en la región de Lamires... Y si planean trasladar a David a la fortaleza de Metel en Svet, deberán pasar primero por la región de Shān, y así poder llegar a Svet... Por lo tanto, hemos decidido tender una emboscada al convoy en la región de Shān, y siendo más específica, sería en el desierto de Yánwáng. En la operación necesitaremos a Jessica, quien nos dará apoyo desde la distancia; Akiro distraerá con sus ilusiones a los policías y agentes de la DCA; Olivia se mantendrá al lado de Jessica para protegerla, y una vez que el señor David sea liberado, se enfocará en curarlo; Kevin e Izan serán la fuerza de combate principal, y tendrán la misión de liberar al señor David y llevarlo con Olivia… Si el contenido de la carta es real... Muy pronto traeremos de regreso al señor David.— exclamó Sara con una sonrisa.