-Esto no puede continuar así María Camila, eres la mayor, no puede ser que esta sea la quinta niñera que renuncia en menos de un año-
-No queremos una extraña en casa papá, yo puedo cuidar a mis hermanos-
-Eso no está en discusión, sabes que tengo que trabajar, habla con tus hermanos de inmediato-
-Desde que se murió mamá has cambiado mucho, sabes te necesitamos en casa, mamá ya no esta y nos duele comprende esto no te duele solo a ti-
-María Camila no te vayas así, hija, escúchame-
Laura no entiendo porque tenias dejarnos solos justo en el momento en que mas te necesitamos.
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Capítulo 16: Hagamos las cosas bien
Emiliano
—¡Llegó la hora de los regalos! —anuncia muy emocionada María Camila.
—Mira, papá, mi hermano y yo te compramos esto —dicen los gemelos entregándome una pequeña caja.
—Gracias, hijos —digo abriéndola—. Una cartera nueva, ¡está preciosa! Gracias, pequeños. —Los abrazo con ternura.
—Mira, papá, lo que encontré para ti —dice Emiliano entregándome un paquete.
—No lo puedo creer… este libro estaba agotado. Gracias, hijo. —Lo abrazo con orgullo.
—Papá, espero que te guste —dice Camila, extendiéndome una hermosa bolsa.
—Wow… una corbata elegante y mi loción favorita. Gracias, mi amor —le digo dándole un beso en la frente.
—Mira, papi, yo también tengo un regalo para ti —dice la pequeña Sol, entregándome un sobre decorado con corazones.
Al abrirlo, veo un dibujo de los dos tomados de la mano. En letras torcidas se lee: “Te amo, papi.”
Siento un nudo en la garganta. Ese pequeño detalle vale más que cualquier obsequio del mundo. La abrazo fuerte, tratando de grabar ese instante en mi memoria.
Cantan el “Feliz cumpleaños” mientras las velas del pastel iluminan sus rostros. Cierro los ojos y pido un solo deseo: seguir viendo a mi familia unida y feliz.
Mi padre se acerca a felicitarme de nuevo. Me regala un portarretratos con una fotografía de mamá y mi hermano. Ver su rostro ahí me devuelve una paz que no sentía hace años.
La tarde transcurre entre risas, música y juegos. Luciana y Clara tocan y cantan junto a los niños, y yo solo puedo pensar en lo afortunado que soy. Es, sin duda, el mejor cumpleaños de mi vida.
Cuando la noche llega, papá y mis hijos mayores llevan a los pequeños a dormir. Clara y Elena recogen las cosas, y de pronto quedamos solos, Luciana y yo, bajo un cielo lleno de estrellas.
—Gracias por todo esto —le digo después de unos minutos de silencio.
—No me agradezca, señor. Lo hice con cariño… y en agradecimiento por todo lo que ha hecho por nosotras —responde con timidez.
—Luciana, desde que llegaste a esta casa cambió la vida de mis hijos… y también la mía —digo mirándola fijamente.
Ella guarda silencio, pero veo cómo sus mejillas se tiñen de un leve rubor. Me acerco lentamente.
Acaricio su rostro con la yema de los dedos. Ella cierra los ojos, temblorosa, y cuando mis labios rozan los suyos, siento cómo el mundo se detiene.
Al principio duda, pero luego responde a mi beso. Es un beso largo, sincero, lleno de todo lo que ninguno de los dos se había atrevido a decir.
Sin embargo, Luciana se separa bruscamente.
—Esto no está bien —murmura antes de alejarse hacia la casa.
Me quedo solo en el jardín, con el corazón latiendo con fuerza. No sé si fue correcto o no… pero después de tanto tiempo, siento que quiero volver a intentarlo. Y en mi interior sé que ella es la persona indicada.
Luciana
La sorpresa salió mejor de lo que imaginé. Ver a todos tan felices fue mágico. El señor Emiliano no dejó de sonreír en toda la tarde. Fue hermoso verlo así… libre del peso que suele llevar en la mirada.
Cuando me acerqué a felicitarlo, me abrazó, y en ese abrazo sentí una calma que no sé explicar. Por un instante deseé quedarme ahí, entre sus brazos.
La noche cayó, los niños se durmieron, y el silencio llenó el jardín secreto. Emiliano y yo quedamos solos. No supe qué decir. Él habló primero, agradeciendo por todo, diciéndome que desde que llegué su vida había cambiado.
Mis manos temblaban. Bajé la mirada, y entonces él se acercó. Sus dedos rozaron mi rostro, mis labios. Cuando me besó, el tiempo se detuvo. No supe qué hacer, pero terminé respondiendo, dejándome llevar por algo que no entendía.
Entonces me aparté. Salí corriendo.
No puede ser correcto, me repetía una y otra vez.
Entré en casa y me encerré en mi habitación. Clara dormía con Sol, así que estaba sola. Me di un baño con agua tibia, intentando borrar de mi piel el temblor de ese beso… pero no pude.
Poco después, escuché que tocaban la puerta. Pensé que era Elena, pero al abrir… era él.
—Luciana, ¿podemos hablar? —me dijo.
Me quedé sin palabras. Solo llevaba una toalla, y su mirada me desarmó.
—Señor, yo… —intenté decir.
Él entró despacio, cerró la puerta y se acercó.
—No digas nada —susurró, y volvió a besarme.
Esta vez no pude apartarme. El beso fue más profundo, más real. Sentí su mano temblar sobre mi cintura. Y entonces se detuvo.
—Luciana… —dijo mirándome a los ojos—. No quiero que esto sea un impulso. Quiero hacerlo bien.
Su voz era tranquila, sincera. Se quitó los zapatos, la camisa, y se recostó a mi lado, sin dejar de mirarme. Tomó mi mano y la llevó a su pecho.
—No tengas miedo. No quiero presionarte. Solo quiero estar aquí contigo —susurró.
Apoyé mi cabeza sobre su pecho, escuchando el ritmo de su corazón.
—¿Cree que esto es correcto? —pregunté.
—Sí. Somos adultos, y mis hijos entenderán. Pero iremos despacio. No quiero que te sientas obligada a nada —me respondió con ternura.
No pude evitar sonreír.
—¿Entonces… hagamos las cosas bien? —pregunté.
—Hagámoslo bien —repitió él, besándome suavemente.
Hablamos por horas. Le conté cosas de mi vida que nunca había dicho. Él me escuchó con atención. Antes de irse, me tomó la mano.
—Me encantaría quedarme contigo esta noche, pero primero debemos hablar con los niños —me dijo.
—Está bien, aunque… estoy nerviosa —confesé.
—No te preocupes, ellos lo entenderán —respondió, dándome un último beso.
—Nos vemos mañana —susurró antes de salir.
Cerré la puerta lentamente, con el corazón latiendo más fuerte que nunca.
🥰🥰🥰 se empieza a desarrollar esta historia de amor, pero para ser felices tendrán que pasar por muchas cosas juntos.
Gracias por leer, hoy les subiré dos capítulos más
Quién será ese hombre misterioso ??? 🤔