Desconocido

Llego fin de semana, Dante le había dicho a Rocío que si quería salir con él a una estadía en un hotel. Ella aceptó con la intensión de saber que sentía él por ella.

No obstante cuando llegaron al lugar, todo era lluvia. Así que fueron a la sala para comer algo, luego que terminaron de comer pasaron a un pequeño bar con música. Los dos bebieron algunas copas y bailaron un poco. Cuando terminaron de divertirse, decidieron que subirían a sus respectivas habitaciones.

- oh, no!

- ¿Qué sucede?

- No, encuentro mi llave.

- Puedes quedarte en mi habitación, no sería la primera vez que estamos en un mismo cuarto. Por la mañana hablaré en la recepción por una llave nueva.

La verdad que Rocío sabía donde estaban las llaves, pero quería averiguar que sentía él por ella. Así que decidió que esa noche sería.

Entraron juntos a la habitación. Rocío se fue a dar una ducha. Y le pidió prestado algo para poder cambiarsé, ya que no tenía que ponerse, todo estaba en su habitación.

Salió del baño con el enorme suéter y el pelo suelto mojado. Se sentó junto a Dante. Rocío cruzó las piernas y se le notaba parte de su muslo.

Esto hizo que Dante tragara grueso, y el nerviosismo se apoderará de él. Se levantó rápidamente y le dijo a Rocío que le prepararía una taza de café.

— Te serviré una taza de café.

- Si por favor.

Rocío se movió rápidamente para estar a lado de Dante, y se pegó mucho a su costado.

- Quiero dos de azúcar.

En ese momento quedo invadido por pensamientos. "Y si la levanto al mostrador y la beso" "Así podría sentir todo su cuerpo y su lindo labio cerca de mí"

- ¿Qué tienes Dante?

- No sucede nada, solo pensaba en lo lindo que es esta habitación.

Rocío quedó un poco decepcionada porque no había llamado su atención.

- Puedes dormir en la cama, yo dormiré en el sofá

- Podemos dormir juntos en la cama.

- No quiero que te sientas incómoda.

- Nunca me has hecho incomodar.

A pesar de todo, Dante sabía que si algo sucedía entre ellos probablemente ella lo recordaría y lo rechazaría. Así que evitaba cualquier contacto entre ellos, solo necesitaba encontrar la manera o el momento para decírselo. Ambos quedaron dormidos esa noche, a pesar de los que quería Rocío, se dio cuenta de que Dante estaba evitándola un poco.

A la mañana, Rocío no estaba en la habitación, se había ido y le dejo una nota a Dante

"Encontré mi llave, baje a desayunar. Te esperaré ahí"

El sol estaba tan brillante, se escuchaban las olas de mar. En el balcón ve a Rocío que tenía un hermoso vestido de baño de dos piezas que mostraba su cuerpo entero.

Muchas miradas se clavaban a Rocío

- Buenos días, Rocío.

- Buen día, te estaba esperando para desayunar juntos.

Dante se puso más cerca de Rocío para que nadie la mirara. Después que terminaron de Comer, se dirigieron a la playa. Estaban disfrutando el lugar.

Era fácil para Dante llevar a Rocío con él por ser el dueño de su propia empresa y a pesar de todo sabía que las cosas marcharían bien.