LLENITA DE AMOR

Después de despedirse Luz de Franco fue a dormir, era tarde y su cuerpo no podía más.

Al siguiente día, Luz despierta tarde, por el evento, les dieron el día a algunos trabajadores del restaurante, entre ellos Luz.

Al bajar a la sala, estaba sola, así que hace algo rapidito de comer y se va al local, al llegar están Ana y su tía, estaba a reventar sin pensar se pone el mandil y ayuda despachar los pedidos.

Ana: gracias mi niña, en verdad se nos juntó todos, jejjej, tu receta de los envueltos a sido un éxito.

Luz: que bueno, ahora que estoy acá, porque no aprovechamos y hacemos algunas muestras de los minis sándwiches que te había mencionado.

Ana: amor, no estás muy cansada, anoche como les termino de ir.

Luz empezó a relatarle todo lo sucedido a Ana, quien escuchaba y solo se reía a carcajadas.

Ana: Mira que linda familia, que asco el papá y el hijo con la misma.

Luz: sabes quien está sufriendo Joe, el muy... lo adora y conociéndolo seguro está peleando con buscarlo o no.

Ana: mira hermosa, te voy a dar un consejo, nadie aprende por cabeza ajena, Joe sin con lo que paso no aprendió, pues que se estrelle de nuevo hasta que entienda, apóyalo, cuídalo, si te necesitas que sepa que estás ahí, pero sus decisiones las respetas, así sepas que va directo para abajo.

Luz: la verdad haré el intento pero Franco y Mao, esos si lo matan si le da una oportunidad.

Ana: Franco e sel otro socio, el que tu me contaste que tiene la mitad de su rostro quemado..... Y del que tu estas enamorada

Luz: el mismo.... hay enamorada no, solo me gusta, pero ahí no hay nada.

Ana: porque no, lucha por el amor, si lo que me has contado es bien bonito, los dos hicieron clic desde que se conocieron, hasta ahora van bien.

Luz; Ana el es un hombre millonario, estudiado, conoce el mundo, tiene muy buen gusto para todo, dime ahí yo donde quepo, soy su amiga la gordis, la que llama a diario, con la que puede tener una buena conversación, nada más.

Ana: pero tu que sabes, Luz, déjate de bobadas, el que no arriesga no gana, atrévete, lo malo seria que no pasara nada, lo bueno que sucediera de todo.

Luz: huu es que ya paso de todo.

Ana, quien escuchaba, tomaba un jugo, se ahogó al oír a su hermana, ellas no se ocultaban nada, Luz le da golpes en la espalda, ya se te va a salir el bb, no sé dé que te espantas, como hiciste mi sobrino.

Ana: como, cuando, hay por Dios mi niña ya no es tan niña, Luz, no vayas a aceptar ser su amante, tu eres una niña decente, de casa, hasta respetar, date tu lugar.

Luz: claro que no aceptaría ser su amante, además solo paso una vez, los dos tomados, pero no me arrepiento, perdí mi virginidad con quien yo quería.

Ana: eso es lo importante, ahora señorita, toca ir al ginecólogo, se empiece a cuidar, porque nunca se sabe, ya con uno tenemos.

Esa tarde Luz y Ana se encargaron del local probaron los mini sándwiches, Ana puso mucha atención a Luz, aprendió rapidísimo, y al sacar los primeros hay mismo se vendieron, éxito dijo Ana.

Su tía quien habían salido al médico, llego bien acompañada, las dos se quedaron pasmadas, cuando ven al señor Héctor, quien es muy amable, Ana se preocupa, sabe quien es el, en la vida de Marcos.

Héctor, hola señoritas, que rico huele acá.

Ana: como ha estado, cuando llego, que desea de tomar y comer señor Héctor, mire le paso la carta todo está delicioso.

Héctor: sorprendeme, porque todo me gusta.

Luz: Tía como te fue, que te dijo el médico.

Tia: bien, auque fui a otro médico, que averiguo Hector, ni les cuento cuanto pago, todavía me duele

Héctor: Mujer, la salud no tiene precio, niñas, hay una posibilidad que su tía camine de nuevo, yo costearse todo, ella dice que no.

Luz: Tía, tu si eres malagradecida, Dios te pone un ángel, para que te pares de nuevo, tengas una vida llena de felicidad, y te niegas.

Ana: tía, luz tiene razón, tu siempre has querido volver a ser independiente, caminar de nuevo a sido tu sueño, nosotros no tenemos como, si el señor Héctor te da esa oportunidad, acéptala.

Tía: me da pena.

Héctor: se va la pena, mañana mismo programo tu cirugía lo antes posible, además, te he dicho que te quiero caminado o sin caminar, pero he visto esa tristeza cada vez que tocamos el tema, así que no me rechaces.

Luz: hay si, vas pal cielo y vas llorando, además piensa en este bb mientras nosotros trabajos como mulas, quien lo va a cuidar.

Ana se preocupó por el comentario de Luz, pero nadie dijo nada, la tía estaba en la mesa con Héctor disfrutando todo lo que Ana les dio a comer, más tarde el se despidió, y la tía se fue a casa a descansar.

En las horas de la tarde noche, suela el celular de Luz, quien contesta

Luz: dime,

Franco: puedes venir a mi casa, mando por ti

Luz: y eso, me vas a invitar a cenar

Franco: claro que si, te haré un lomo delicioso.

Luz: OK

Franco: tipo 8 pasan por ti.

Luz, le cuenta a Ana que irá a cenar con Franco, así que debe ir a ver que se pone.

Ana: muñeca todo te queda lindo, verás que lo dejas babeando.

Luz: Ana será cena de amigos, nada más

Ana: este (señala la barriga) salió de una cena de amigos jejjejjej

Luz: hay, contigo no se puede, me voy, llego temprano porque debo madrugar a trabajar, los amo se me cuidan.

Ana: OK.

Luz corre a arreglarse, como dijo Franco a las 8 pm, estaba el carro afuera esperándola, para llevarla a la mansión.

La recibe Franco, como siempre un abrazo un beso, van directo a la cocina, ella ama verlo cocinar, tiene manos mágicas.

Franco lleva a la Luz a una terraza hermosa, los dos disfrutan de la cena, platican, se ríen, se olvidan de todo y de todos.

El solo quiere probar esos dulces labios que lo enloquecen se acerca y la besa, Luz le sigue, una cosa lleva a la otra, ahí están de nuevo, haciendo el amor.