Allison Silva una hermosa joven de quince años oriunda de Venezuela, especificamente de los Andes estado Trujillo, pero que desde muy chica se mudo a España con sus padres, pues a su papa le salio una oportunidad de oro en un laboratorio europeo, regresan luego de mas de una decada a pasar semana santa con su familia sin imaginarse que el mal se avecina para la inocente chica.
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Cap 15: Herramientas para el combate
Narra autor✒✒✒.
La oscuridad de la noche caia y la horrible creatura del mal esperaba su oportunidad para acercarse al objeto de su deseo.
Algo pasaba con quien consideraba su princesa eterna, pues casi no sentía su presencia, su olor único y característico que lo tenía enloquecido desde que llego a sus fosas nasales lo percibía muy sutilmente.
No puede haberse ido se decía y algo en su ser confirmaba que no había partido a ninguna parte, lo que lo ponía aun más nervioso.
Conforme la noche avanzaba también lo hacía la desesperación del duende quien ya no podía esperar más por tener a Allison y darle el beso de la muerte convirtiéndola en su esposa y compañera.
La inquietud de no sentirla con fuerza lo descontrolaba de una manera inimaginable.
Con toda la fuerza de autocontrol se fue acercando, debía esperar un poco más de la media noche cuando la oscuridad era más fuerte para cruzar el riachuelo quien en años anteriores le había permitido obtener mas de un alma, empezando por quien llevaba su nombre.
Recordar la joven atractivo llamado Juan Jose Pérez le lleno de nostalgia, la horrible creatura aun siendo del sexo masculino no hacía excepción de género, cuando se enamoraba u obsesionaba con alguien, y ese hermoso jovencito de 16 años lo había cautivado desde el primer momento que lo vio sumergirse en las cristinas aguas del riachuelo que en esos años era un lugar de agua potable, pues aún no desembocaba ningún alcantarillado en él.
Las personas de la época venían y buscaban el vital líquido para su consumo, también lavaban ropa y se bañaban, pero estas dos últimas cosas solo estaban permitidas en lugares estratégicos o pequeños pozos creados por los pobladores para evitar contaminar las aguas.
Juan Jose Pérez a pesar de su edad aun se mantenía puro e inocente algo poco común, pues a esa edad habían incluso jóvenes ya casados y con hijos.
Juan quería ser sacerdote, tenía la convicción de entrar al seminario, pero eso, cambio cuando conoció a Teresa una hermosa quinceañera que llego de Bocono a visitar a sus familiares y termino enamorada de Juan y este cautivado por ella.
Ya el duende estaba al acecho y en espera de la semana santa cuando podía convertirlo en su pareja, lo que nunca proveyó fue que Teresa se le adelantara y en el pozo se amaran con intensidad llevándose la corriente la prueba de la primera vez de ambos.
La creatura maligna enloqueció de celos e ira y en semana santa, sin la pureza de espíritu y cuerpo no podía convertirlo en su pareja, pero si no era suyo tampoco de Teresa y lo asesino ahogándolo en las mismas aguas que lo vieron amar.
Nota: No se la verdadera historia de Juan Pérez, tampoco la edad en que murió ahogado en el riachuelo, en ese entonces más grande y profundo que actualmente, pues no habían tantas personas viviendo en la región, así que invente esta parte.
Pocas personas logran despertar el deseo obsesivo de un duende, pero los que tienen la mala suerte de hacerlo pocas veces se salvan de su maldad.
La obsesión puede ser muy peligrosa en un ser humano llevándolo a cometer atrocidades, ahora imaginen la magnitud de un ser de maldad y perversión como un duende, prueba de ello la masacre a los dos becerros del abuelo de Allison.
Mientras el duende aguardaba impaciente la llegada de la media noche para llevar a cabo su objetivo en el servicio cristiano Allison se gozaba en las alabanzas.
Se dice que el evangelio cambia, transforma y da vida y algo ocurría con todos los integrantes de esta familia, que después de los últimos acontecimientos se encontraban en paz.
El ambiente espiritual aplacaba sus nerviosismo y sus miedos.
La predicación le demostraba a Allison que debía ser valiente y enfrentar sus miedos, pero una cosa era tener alguna fobia (miedo intenso a algo) otra muy distinta era el temor a esa horrible creatura maligna que deseaba hacerle daño.
Comieron las hamburguesas sin preocupación algunas, una comida en paz como Allison no tenía desde ese miércoles santo cuando fue al Salao.
Cuando el joven quien la invito y realizo aquella poderosa oración se acercó con el pastor, Allison volvió a sentir la misma corriente que la primera vez que estrecharon sus manos.
Era algo extraño lo que les pasaba.
El joven tenía un hermoso don, el don de la sanidad, poco común aunque todos pueden orar declarando sanidad no todos poseen tal fe para que actúe prontamente, Dios repartió dones y talentos y este joven era poseedor de uno muy especial, pero no era él, era el poder de Jesucristo que habitaba en él, pues somos templo y morada del espíritu de Dios.
El receso de una hora sirvió para que el pastor se ganara la confianza de la familia, el joven le contó al pastor lo que sintió cuando la toco, y el aura maligna que se sentía rodearla.
Eso mismo experimento el pastor desde que se acercó.
Allison por una razón que desconocía se abrió y contó todos lo que le había ocurrido dejando al pastor con la piel erizada.
Se apartaron un poco y Allison mostró sus maltratadas piernas, el joven se agachó y coloco sus manos suavemente, pero no pudo sanarla.
El pastor al ver lo afligido y confundido que se encontraba lo calmo dándole unas palmadas en la espalda.
No te aflijas sus lesiones son causadas por algo muy malo, debes enfrentarlo Allison, sé que tienes miedo, y es comprensible yo también lo tendría de estar en tu lugar, pero debes saber que hay uno más grande y poderoso que esa cosa y ese es Jesús nuestro Señor y salvador, Allison asintió con lágrimas en los ojos.
La platica siguió unos minutos más y cuando el otro culto inicio el joven se mantuvo cerca por petición del pastor.
Nuevamente, era envuelta por la maravillosa sensación sobrenatural y la paz de las alabanzas, el servicio continuó con dos predicadores y el último como si conociera lo que le ocurría hablo de las herramientas para vencer el mal.
Allison guardo todo en su cerebro y sonrió triunfante, pues sabia que obtendría una inminente victoria, ya sabia que debía ser valiente y ahora tenía las herramientas como hacerlo.
