Desgraciada Vida

--Izan--

Estaba vestido, con un traje hecho perfectamente a mi medida pero no me levantaba de la silla que me tenía aferrado a ella, con un cigarrillo en la mano y en la otra un vaso de whisky, quería que las horas se pasarán rápido y se pasara el tiempo de ir a esa iglesia...

-Ya estas listo? te ves muy bien hermano-

-listo? jamás lo estaré para esta farsa-

-Izan juro que si tengo que amarrarte y llevarte a rastras a esa iglesia lo haré, nunca te lo dije pero le jure a Katy que te cuidaría y no dejaría que arruinaras tu vida y le eh fallado, la vida de libertinaje que has llevado hasta ahora con mi apoyo es una destrucción total y pienso remediar mi error-

-Edwuar, de verdad ella te hizo jurar eso? Y desde cuando eres tan maduro?tu que nunca dejas pasar una noche de placer- protesto el

-Lo hizo, la misma noche en que se quito la vida, me confíe en su palabra de que no cometería una locura y me arrepiento, por favor hermano, ayúdame a cumplir ese juramento, hazlo por ella-

Izan se sentía entre la espada y la pared, debía cumplir la última voluntad de su hermana? debía hacerlo? aún cuando ella le destrozo el alma abandonandolo por completo? nunca pude encontrar a ese bastardo, me eh jurado matarlo con mis propias manos si es necesario, pero solo desapareció..

- está bien! lo haré, pero solo lo haré por ella-

-gracias Katy, donde quiera que estés, gracias, ahora vamos, es tarde- dijo Edwar

se encaminaron a la iglesia.. ahora Izan tenía dudas y si ella no asiste y si se resigna a último momento? sería capaz de buscarla y arrastrarla hasta la iglesia, puede que no la ame y no quiera convertirme en su esposo, pero si es ella la única clave para cumplir la última voluntad de mi hermana haré hasta lo imposible por que este allí y acepte ser mi esposa, así tenga que llevarla en contra de su voluntad, cuando llegamos a la iglesia todos estaban allí..

-te ves muy bien querido, cuando Stefano dijo que te casarias pensé que era mentira, tu madre estaría muy orgullosa y feliz en este momento-

- se lo agradezco señora Passcali y gracias por venir, Stefano gracias también por tu asistencia- dijo serio mirando a este

siguió caminando por el pasillo rumbo al altar que seria testigo de lo que venía de ahora en adelante..

-Izan muchacho tenía tiempo sin verte-

-lo mismo digo Samuel, es un gran amigo de mi padre, que bueno que nos acompañe en este día, gracias por asistir-

-con todo el gusto muchacho-

Y así siguio saludando y agradeciendo hasta que llegó al final del pasillo donde se detuvo a esperar a la mujer que marcharía luego a convertirse en su esposa... cuando escucho la marcha nupcial, la vio, puede que sea un egoísta y frío, que no le importe los sentimientos de nadie, ni mucho menos los de una mujer, pero no podía negar que su futura esposa se veía realmente hermosa, era como ver a un ángel caminar hacia el, ella tenía la mirada en el piso, pero aún así podía apreciar esos ojos de cielo que por primera vez acepto, que lo hacían bajar la guardia, miraba atento esperando su llegada a su lado

cuando llego a el y extendió su mano, ella la tomó levantando la mirada y conectando sus ojos con los suyos...

--Aura--

Cuando inició la marcha nupcial y comencé a caminar del brazo de Fausto, mi mirada estaba fija en el piso, no quería ver hacia el frente y encontrar un lugar vacío, sin alguien que me recibiera por que simplemente me desprecia, cuando llegamos al final del pasillo y Fausto extendió mi mano nunca creí que había alguien allí para recibirla hasta que sentí su tacto, levante rápidamente mi cabeza y allí me encontré fijamente con esos ojos color miel que me miraban profundamente, fue la primera vez que note tanto su mirada, sus cejas gruesas y las pequeñas líneas de expresión que se marcan alrededor se sus ojos, no podía aunque quisiera pasar por alto lo guapo que se veía con ese traje

mi corazón empezó a latir más rápido y sin saber por qué empecé a sentirme nerviosa, pero no eran los mismos nervios de siempre, sino de estar tan cerca de él, de que podía sentir en su mirada que era capaz de desnudarme el alma en este momento, justo aquí y ahora no podía verlo como alguien cruel ni despreciable, parecía alguien totalmente distinto, incluso pude notar una sonrisa, no se cuanto tiempo estuvimos perdidos uno en el otro, hasta que el padre llamó nuestra atención con un carraspeo y dio inicio a la ceremonia..

- Queridos hermanos: Estamos aquí junto al altar, para que Dios garantice con su gracia su voluntad de contraer Matrimonio ante el Ministro de la Iglesia y la comunidad cristiana ahora reunida.. Aceptas tu Izan Petit, a Aura weller como tu esposa?-

este miro a la mujer que estaba a su lado y sintió que no tenía por qué arrepentirse de lo que ahora diría..

-si, acepto-

- y tu Aura Weller, aceptas a Izan Petit como tu esposo ?-

esta miro a los invitados, entre ellos estaban Fausto y la pequeña Miranda, luego volteo y miro justo a los ojos al hombre que estaba a su lado y por primera ves no sintió rudeza en el..

- si padre, acepto-

- con mi consentimiento los invito a decir sus votos-

-Yo, te quiero a ti, Aura Weller, como esposa

y me entrego a ti, y prometo serte fiel

en la prosperidad y en la adversidad,

en la salud y en la enfermedad,

y así amarte y respetarte

todos los días de mi vida-

-Yo, te quiero a ti, Izan Petit, como esposo

y me entrego a ti, y prometo serte fiel

en la prosperidad y en la adversidad,

en la salud y en la enfermedad,

y así amarte y respetarte

todos los días de mi vida-

-que Dios bendiga este matrimonio. lo que Dios ha unido que no lo separe el hombre, puedes besar a tu esposa-

al escuchar aquello Izan volteo a ver a la mujer que ya era su esposa legalmente ante Dios y ante todos, paso una mano por su mejilla sintiendo la suave piel que no había sentido antes, podía ver en sus ojos los nervios que le transmitía estar cerca de él, ella por su parte lo miraba con los ojos bien abiertos, no se movía ni hacia ningún gesto de rechazo y allí entendió, el también lo quería, Izan se acerco a ella, acortando la distancia que había entre los dos, cuando sus labios se tocaron, ambos cerraron sus ojos, sus labios se sentían muy suaves eh inexpertos, noto de inmediato que estaba besando unos labios puros, la sensación que sintió era tan placentera que no podía querer otra cosa en ese instante que estar fundido en su boca, bajo su mano a su cintura acercandola mas a el, profundizando aquel beso que hacía estallar su boca, ella enredo sus manos en su cuello y se aferro a aquello que jamás había sentido, sus carnosos labios la hacían querer deborarlo aún más, sintió esa sensación en su estómago, como si miles de mariposas volaranran de felicidad, no quería soltarlo, cuando el le abrió paso a su lengua, sintió el cosquilleo que jamás había sentido, era dulce, delicado y hambriento por más, cuando se separaron se sonrieron mutuamente mientras todos aplaudían a la pareja que en ese momento se sentían y se veían felices..