Un Acuerdo Entre Amigos

Mickey

Mientras conduzco a casa de Sussie recuerdo el momento en que le entregué el anillo a Maggie. Creo que ese acto ha sido el único que ha valido la pena en medio de todo lo que ha representado organizar esta boda.

El domingo siguiente no nos vimos, ya que ella prefirió pasar el día en casa con su abuela y reunirse con mi madre y la organizadora para ultimar los detalles, ya no hay marcha atrás. Por eso decidió tomar mi ejemplo y hacer lo que le corresponde con la mejor buena voluntad.

Mi madre me dijo esa misma noche que pronto irían a escoger el vestido de novia y por un momento sentí ilusión al imaginarla vestida de blanco. Hay veces en las que olvido que esto es toda una farsa…

Luego de ese día Sussie ha estado bastante intensa. Cuando leyó en las redes la noticia de mi compromiso con Maggie se enojó muchísimo, aunque pareció calmarse cuando la convencí de que eso era solo un protocolo más.

Desde entonces no deja de llamar a cualquier hora, enviar mensajes e insistir para que nos veamos más seguido de lo que habíamos acordado. En un comienzo me mostré comprensivo, porque entiendo lo incómoda de la situación y solo puedo imaginarme lo frustrada que debe sentirse.

Insiste en que me he distanciado y culpa de ello a Maggie, sin que pueda haber poder sobre esta tierra que la haga cambiar de opinión.

Así que debido a que es viernes y durante el fin de semana no podré verla, me dirijo en estos  momentos a su departamento, después de llamar a Maggie para avisarle y de que ella me dijera que haría planes con Timmy…

Estúpido Timmy… ella debería hacer planes conmigo y no con él…

Sacudo mi cabeza para ahuyentar esos pensamientos y me bajo del coche.

Al entrar al departamento veo a Sussie sentada junto a la barra de la cocina sobre la cual se encuentran dos revistas que no me son desconocidas.

-Hola nena ¿Cómo estás?- le pregunto acercándome para besar sus labios pero ella gira la cabeza y solo puedo besar su mejilla.

-Cansada Mickey, estoy cansada…-responde.

-¿Mucha actividad en la universidad?- vuelvo a preguntar mientras me retiro mi chaqueta.

-No es de eso que estoy cansada, sino de esto- dice enseñándome una de las revistas.

Se trata del ejemplar donde se publicaron las fotos pre boda. Abre la revista hasta dar con el artículo y lee

“La hermosa pareja conformada por los empresarios y herederos de Austeen-Varais, Michael y Margareth, derrochan amor en sus fotos pre boda”

“Michael y Margareth han sido muy unidos desde niños, lo que nos índica que han estado destinados desde siempre a enamorarse”

“El amor se siente en el aire cuando la pareja está junta”

“No se puede negar el brillo en los ojos de Mickey, como lo llama su prometida, cuando la mira”

-Esto es una mierda Mickey!!!- dice gritando.

-Sussie tienes que calmarte, eso es solo prensa rosa, arman una novela romántica de cualquier cosa, no es una excepción que lo hagan con nosotros, debe parecer real…- le digo.

-Es que ese es el problema Mickey, que parece MUY real!!!- vuelve a gritar haciendo énfasis en esa palabra.

-Sussie por favor, basta, estoy cansado de discutir todo el tiempo ¿acaso no estoy contigo? ¿no te he demostrado lo suficiente que te amo?- le digo.

-Ja!! ¿Cansado? a mi no me parece, y sí lo estás es por andar paseándote por todos lados con esa maldita aprovechada!!!. vuelve a gritar.

-Sussie… Sussie… te lo dije, te pregunté muchas veces si estabas dispuesta a pasar por esto, te dije que si me lo pedías simplemente me negaría a casarme con Maggie sin que me importara perderlo todo… ¿Qué más pruebas necesitas para saber que tú eres importante en mi vida?- le insisto haciendo un gran esfuerzo por no pelear.

-Y lo estaba Mickey, porque creía que ella iba a mantenerse alejada de ti, porque pensaba que tú ibas a hacer solo un papel, pero ahora lo dudo… y ¿sabes que es lo peor? que estoy segura de que esa… zorra… estuvo de acuerdo con tu familia para planear todo esto, claro ellos me odian y a ella la aman… es una maldita hipócrita!!! Todo este tiempo ha fingido ser mi amiga pero…- la detengo… no puedo más.

-¡Ya basta Suzanne!! Te lo advertí, te dije que no quería que insultaras más a Maggie, no lo voy a permitir!!!- le grito.

-Me dijiste que si te lo pedía no te casarías con ella, pues te lo estoy pidiendo en este momento, no quiero que te cases con ella- dice cruzando los brazos.

Bajo la mirada y no puedo evitar reír.

-Estás loca Sussie, te lo dije hace unos meses, antes de que todo avanzara, pero lo siento, en estos momentos ya no puedo echarme para atrás, no puedo hacerle eso a mi familia y menos a Maggie. ¿Sabes lo que sucedería? La prensa la destrozaría, no puedo hacerlo, ella no se lo merece...- digo

Ella me mira con los ojos y la boca muy abiertos

-Lo sabía… te gusta- dice riendo burlonamente, -La insípida Margareth Varais te gusta… ¿desde cuándo Mickey? ¿acaso me has sido infiel con ella todo este tiempo? ves lo que te digo esa maldita hipócrita…- continúa hablando hasta hacerme explotar.

-Basta!!! Basta ya!!!, Margareth es la persona más transparente que he conocido… ella jamás te habría traicionado porque SI te consideraba su amiga… ¿Hablas de hipocresía? ¿Tú que recibes mensualmente una considerable suma de dinero que ella deposita en tu cuenta sin reparos? y vives refiriéndote a ella de forma tan despectiva… - le digo.

Sé que he sido duro, pero es la realidad, no puedo seguir escuchando como se refiere a Maggie… ella no lo merece…

-¿Me estás echando en cara la ayuda que ella me da? yo nunca le pedí nada!!!- grita.

-Exacto!!!, nunca lo pediste y aún así ella te lo ofreció y tú lo aceptaste gustosa!!, pero ¿sabes qué? no más… prefiero que todo vínculo que haya existido entre tu y ella al respecto, se rompa ya. No voy a permitir que ella te siga financiando…- le digo.

-Esa no es tu decisión Mickey, es de ella, no puedes hacerlo…- me dice bajando el tono de su voz.

-En eso te equivocas, su dinero y el mío tienen el mismo origen, la compañía, lo que es de ella es mío y al revés, así que si puedo hacerlo- le respondo.

-¿En serio vas a tomar represalias porque hablé mal de ella?- dice ofendida.

-Lo haré Sussie, debes aprender que no puedes morder la mano que te da de comer…- le digo.

Ella me mira con furia

-Lárgate Mickey!!! No quiero verte, quiero estar sola!!! Largo de aquí!!!- me grita.

-Me voy, sí. Pero lo hago porque sé que necesitas estar sola en estos momentos, no porque me lo ordenes, no olvides que este lugar lo pago yo- le digo tomando mi chaqueta y saliendo del lugar.

Estoy enojado, pero a la vez muy confundido. En otra ocasión jamás habría tocado el tema del dinero en medio de una discusión con Sussie porque sé que eso es un tema delicado para ella.

Pero escucharla insultar a Maggie sin razón, más cuando ella prácticamente la mantiene, me enojó muchísimo.

Quisiera ir a verla, hablar con ella y desahogarme un poco. Miro el reloj y me pregunto qué estará haciendo…

Tal vez solo cenemos en su departamento, ya sabes, para no exponernos a ser vistos y quedar expuestos…

Golpeo el volante con furia… no sé porque es mayor la incomodidad que me invade cuando pienso en ella y Timmy juntos.

Conduzco hasta el bar Ghostbar, necesito despejarme, la discusión con Sussie, lo confundido que estoy con respecto a Maggie y Timmy, los preparativos de la boda… son miles de cosas que se agolpan en mi mente sin dejarme pensar con tranquilidad.

-Hola Matt- saludo al barman, él y yo somos amigos desde hace algún tiempo, aunque asisto muy poco a este lugar.

-Mickey ¿Qué te trae por aquí?- me responde.

Me giro en la silla y le doy un vistazo al lugar, hay pocas personas para ser un fin de semana.

-Necesito despejarme un poco… -le respondo.

-¿Qué te sirvo?- me pregunta.

-Whisky… doble, por favor- le digo mientras apoyo mi cabeza sobre la barra.

-Me enteré que te casas… las revistas y las redes están llenas de fotos tuyas y de tu novia… es linda, aunque pensé que seguías con la rubia- dice mientras me entrega el vaso con licor.

Suspiro y bebo el contenido de un solo sorbo sintiendo como el líquido quema mi garganta.

-Si, voy a casarme, pero todo es tan complicado- le digo haciéndole un gesto para que vuelva a llenar mi vaso.

-Esto de tu boda es muy extraño ¿sabes?, hace menos de tres meses te exhibías con una chica rubia, y ahora te vas a casar con otra ¿matrimonio arreglado?- pregunta con burla.

-¿Qué??- pregunto con asombro.

Él ríe mientras me entrega nuevamente el vaso lleno.

-Ser barman es casi como ser un confesor Mickey, ya he perdido la cuenta de la cantidad de hombres y mujeres que han venido en la misma circunstancias que tú, he llegado a la conclusión que pertenecer a una familia adinerada tiene esa gran desventaja, no eres libre para escoger con quien casarte- dice.

-Está bien, me atrapaste… ni ella ni yo queremos casarnos, es que… Somos amigos desde niños, joder!!! Es… Maggie es… como mi hermana… ¿te imaginas casarte con tu hermana?- le digo riendo.

-No se si  la ves como a una hermana, pero vaya que sabes actuar, porque las fotos no dicen eso…- dice riendo.

-¿De qué estás hablando?- le pregunto mientras él sirve otro vaso.

-Exactamente eso ¿acaso no ves las publicaciones que hacen sobre ustedes?- me pregunta.

Y en realidad no lo hago, simplemente poso para las fotos, doy las declaraciones y nada más…

Saco mi teléfono del bolsillo y veo las redes, las noticias rosa, las publicaciones de revista… ella y yo parecemos tan reales… se ve tan natural y hermosa…

-¿Lo ves?-  dice Matt sonriendo

-¿Qué cosa?- le pregunto extrañado.

-Esa es la mirada… esa chica te gusta, no sé si estás enamorado, pero definitivamente te gusta- dice volviendo a llenar mi vaso.

Diablos!!, vine a este lugar para tratar de despejarme y aclarar un poco mis ideas, pero no está dando resultado.

Luego de algo más de una hora y mucho… mucho licor… Estoy hablando con Matt acerca de Maggie…

-A ella no le gusto… lo dijo delante de nuestra familia… “Él no es mi tipo”- digo tratando de coordinar mis palabras, Matt me observa mientras seca los vasos.

>>Dice que antes de ser novio de Sussie fui muy promiscuo… y que además Sussie es su mejor amiga… le duele saber que terminamos a causa del matrimonio… ¿pero sabes? Ella… Sussie… no… Ella no es su amiga…- digo moviendo un dedo\, -es más\, creo que la odia… y … que siempre le ha tenido envidia… pero Maggie es tan dulce e ingenua… que no se da cuenta…-le digo.

>>Además… - le digo haciendo un gesto de que se acerque para susurrarle al oído\, -Maggie es virgen…- le digo asintiendo con mi cabeza.

Matt me mira con asombro, a lo que yo sigo diciendo…

-Sip… total y completamente virgen…- digo riendo, -¿y sabes que es lo peor? qué prefiere tener su primera vez con cualquier otro tipo, menos conmigo- digo volviendo a reír.

-¿Ella te dijo eso?- pregunta.

Bebo el licor con rapidez mientras niego con la cabeza.

-Nooo… ella no me tiene tanta confianza para hacerlo… pero la escuché hablando con Timmy…- le respondo.

-¿Quién es Timmy?- pregunta.

Muevo el vaso en mi mano mirando como el líquido ambarino gira en su interior.

-Timothy Albine… se supone que es mi mejor amigo y su mejor amigo… Los escuché hablando una noche… ellos tienen una especie de acuerdo… si ambos cumplen 24 años sin haber encontrado la pareja ideal… lo harán… juntos… ¿por qué sabes qué? Timmy es un chico especial, no es feo, es algo guapo, pero muy malo para ligar… ¿Así que crees? También es virgen..- digo riendo…

-Oh hermano, qué complicado…- dice negando con la cabeza.

-Maggie y yo acordamos que podía seguir viendo a Sussie, con discreción para no generar rumores innecesarios, de lo contrario nuestra familia nos quitará todo el apoyo… Suzanne aceptó…-le digo, -así que no tengo derecho a reclamarle nada…

-Por Dios, ¿Qué chica puede aceptar algo así?- me dice a lo que yo respondo.

-¿Una enamorada?

-O una muy interesada…- responde él.

Pienso en todo lo que mis padres han dicho siempre de Sussie, en medio del alcohol intento aclarar mis ideas…

O una muy interesada…

-En fin… ahora estoy aquí furioso mientras mi “novia” está enojada… porque le dije unas cuantas verdades… y volviéndome loco imaginando a mi prometida… teniendo sexo con mi mejor amigo… Salud por eso!!!- digo levantando mi vaso.

-Creo que ya has bebido suficiente Mickey, no te voy a dejar conducir de esa manera- lo escucho decir, -debería llamar a alguien para que venga por ti o te envío en un taxi a casa- agrega.

Tomo mi celular, veo varias llamadas perdidas de Anna y algunos mensajes, ha estado llamando a Maggie, sin obtener respuesta…

Miles de imágenes vienen a mi mente…

¿Qué estás haciendo Maggie?

-Voy a llamar a mi prometida…-digo mientras marco su número.

-Hola Mickey- me responde.

-Ya puedes ir a casa Maggie, tu abuela me ha llamado varias veces, dice que no le respondiste- le digo, tratando de imaginar en qué situación se encontraba antes de responder..

*-¿Estás bien?-*me pregunta.

-Estoy bien, no te preocupes- le respondo tocando el puente de mi nariz.

-¿Has bebido Mickey?- me pregunta.

Suspiro antes de responder

-Solo unos cuantos tragos...

-No te escuchas como quien ha bebido unos cuantos tragos, Mickey, ¿dónde estás?- inquiere con algo de preocupación.

-¿Por qué? ¿vendrás a buscarme?- le respondo intentando no reír.

-No pienso dejar que te mates por conducir en ese estado- me responde y me parece que está algo enojada.

-The Ghostbar- le digo.

-Quédate ahí, ni se te ocurra moverte- dice y cuelga enseguida.

Me quedo mirando el teléfono por unos segundos...

Está molesta… tal vez haya interrumpido algo especial…

Río con burla, lo hago de mi, de lo patético que me veo a mi mismo en estos momentos…

-¿Llamaste a alguien para que pase a recogerte?- me pregunta Matt.

-Sip, así que ya no tienes ninguna excusa para seguir dándome alcohol- le respondo riendo extendiéndole mi vaso.

El niega con la cabeza, pero aún así vuelve a llenarlo.

-¿Mickey?- escucho la voz de Maggie.

Al verla una extraña sensación de calor se anida en mi corazón, no lleva nada de maquillaje y aún así luce muy bien.

-Maggie, viniste por mí- digo sonriendo.

Ella me mira con preocupación antes de decir

-Oh Mickey ¿porqué estás aquí?

-Matt, ella es Maggie, es mi prometida, nos casaremos en menos de tres meses ¿no es hermosa?- le digo a mi amigo mientras la tomo por la cintura.

-Claro que lo es Mic- responde mi amigo sonriendo.

-Si… Margareth Austeen es la mejor mujer del mundo, es hermosa, inteligente y sencilla, debería sentirme feliz por casarme con alguien como ella- digo sin poder evitar mirarla.

Ella se nota bastante nerviosa, mira a Matt y luego a mi antes de decir

-Si mi amor, yo se que está feliz, pero debemos ir a casa.

Intenta sostenerme pero se que le está costando algo de trabajo.

-¿La escuchaste Matt? Soy su amor…- digo riendo

-¿Matt, cierto?¿Podrías ayudarme a llevarlo al coche? mañana enviaré a alguien para que recoja el suyo- dice ella a lo que Matt asiente y la ayuda a llevarme a su coche.

Mientras me ayudan no puedo evitar preguntar

-¿Dónde dejaste a tu fiel guardaespaldas Maggie? ¿Mi mejor amigo Timothy Albine no vino contigo?

-No… vine sola…- responde con incomodidad.

Cuando estoy ya sentado en el coche ella se acerca a mi para poder ajustar el cinturón de seguridad entonces tomo su mano, me extraña ver que no lleva el anillo… es cómo si de repente el alcohol en mi cuerpo empezara a desaparecer.

-¿Dónde está el anillo Maggie?- le pregunto.

Ella se pone algo nerviosa, lo cuál me molesta de alguna manera.

-Creo que lo dejé en el baño de Timmy cuando fui a lavarme las manos…- me responde antes de rodear el coche para subir al puesto del conductor.

Maldita sea…

-Oh… cierto… tú y Timmy son muy unidos… demasiado diría yo…- le digo.

-¿Qué dijiste?-pregunta mientras enciende el auto.

-Lo que escuchaste… al parecer Timmy y tú están ahora más unidos… tanto que mi buen amigo tiene días de estar ignorándome ¿acaso sabes tú la razón?- le pregunto.

Ella me mira con algo de nervios antes de responder

-Estás ebrio Mickey, además no creo que te esté ignorando, todos hemos estado muy ocupados, además Timmy y yo somos unidos desde hace mucho, tal vez no lo recuerdes pero cuando empezaste a salir con Susie, nos dejaste de lado por mucho tiempo, por eso terminamos siendo más cercanos- le respondo.

¿Es un reclamo? 

-¿Qué tan cercanos?-inquiero con algo de enojo.

Ella me mira y vuelve sus ojos a la carretera mientras pregunta

-¿Qué quieres decir?

Siento que el enojo aumenta en mi interior, quiero que sus respuestas sean las que necesito, en realidad necesito saber qué está pasando entre ellos dos

-Eso Maggie, no es tan complicado responder ¿Qué tan cercanos son Timmy y tú?- vuelvo a preguntar.

Ella permanece en silencio unos segundos y aún en medio de mi ebriedad puedo notar su nerviosismo

-Mucho… somos muy unidos…-responde.

-¿Tanto como para que te sonrojes y tardes en responderme?- le pregunto enojado.

Ella me mira extrañada y detiene el auto a un lado de la carretera.

-Mickey ¿Qué carajos te está pasando? ¿Acaso estás celoso de Timmy?, Te recuerdo que esto ya lo habíamos hablado, lo dejamos claro en el acuerdo, tu no te metes en mi vida privada y yo no me meto en la tuya- me dice enojada.

Y esa es una gota más en mi vaso que está a punto de desbordarse

-¿Y desde cuando Timmy hace parte de tu vida privada?- le pregunto con más enojo.

La veo titubear mientras quita su mirada de mi antes de responder.

-No quise decir eso… no me malentiendas, pero si así fuera no tienes ningún derecho a cuestionarme nada Mickey, yo no lo hago con respecto a Sussie…

Ella tiene razón pero… Joder, no es lo mismo… nunca va a ser lo mismo…

-No es lo mismo Maggie…- le digo.

Ella vuelve a mirarme y puedo notar una pizca de tristeza en sus ojos cuando me responde en un tono más alto de voz

-Claro que es lo mismo Mickey, ella es tu novia, tienes sexo con ella, prefieres estar con ella, es más preferirías casarte con ella

Se que es cierto, aunque en estos momentos no esté tan seguro de que quisiera casarme con Sussie…

-Sussie ya hacía parte de mi vida antes del acuerdo- le digo, -Pero Timmy no hacía parte de tu vida privada, por lo menos no en el mismo sentido…

-¿Y cual es ese sentido?- pregunta enojada, -estás dando por sentado que entre él y yo ocurre algo más…

-¿Y no es así?- inquiero nuevamente.

-N..no… no es así…- responde ella luego de titubear unos segundos.

Mi corazón se aprieta y el nudo en mi estómago se hace más fuerte.

Recuesto mi cabeza sobre el espaldar del asiento y le digo

-Tu titubeo me demuestra lo contrario…por favor enciende el auto, quiero ir a casa… y quiero ver de vuelta ese anillo en tu dedo…

Un silencio incómodo se apodera del lugar el cual ella rompe al preguntarme

-¿Me dirás porque estabas bebiendo? se supone que estabas con Sussie

-Lo estaba… pero discutimos- le respondo mientras mantengo mis ojos cerrados.

Ella suspira y pregunta nuevamente

-¿Puedo saber la razón?

-Tu… tú eres la razón- le respondo con un suspiro.

Ella voltea a verme asombrada

-¿Yo?? ¿por qué?

Le explico el motivo de mi pelea con Susie, omitiendo los detalles ofensivos hacia ella.

-Entiendo Mickey, pero ella no debería enojarse por eso, todo es una farsa- me dice.

-Pues ella insiste en que todo parece más real de lo que debería- le respondo levantando mis hombros.

-¿Acaso no era esa la idea?- dice ella riendo.

-El problema es que ella insiste en que tu estás detrás de todo para que termine siendo real, no deja de ofenderte y decir cosas absurdas… y yo no puedo tolerarlo Maggie, yo no puedo permitir que nadie ensucie tu nombre con calumnias y ofensas- le respondo con todas las emociones que me embargan en estos momentos.

Ella permanece en silencio unos segundos antes de volver a preguntar

-Y entonces ¿Qué sucedió?

Suspiro y vuelvo a cerrar los ojos mientras le respondo

-Le dije que era una hipócrita, porque pensaba todo aquello de ti pero seguía recibiendo tu dinero para gastarlo en cosas innecesarias…

Ella vuelve a quedarse en silencio… se que le ha afectado esa respuesta, porque sigue continuando a Sussie como su amiga

-No has debido Mickey- responde en voz baja.

Volteo a verla, su mirada está fija en la carretera mientras aprieta con fuerza el volante.

-Claro que sí, es absurdo que ella siga recibiendo beneficios de tu parte y que  sea incapaz de pensar que todo lo que estás haciendo es también para beneficio de ella, por eso voy a pedirte algo, es más te lo voy a exigir, no le darás más dinero…- respondo con firmeza.

-Pero… ella…- intenta hablar pero la interrumpo.

-Pero nada Maggie… ella ya lo sabe, así que no tienes de qué preocuparte- le digo mientras miro por la ventana del auto.

-Y ¿Cómo reaccionó?- pregunta luego de unos segundos de silencio.

-Mal… se enojó y me sacó del apartamento gritando improperios… pero ¿sabes qué es lo peor? que no me importó, porque en esos momentos no quería estar con ella respirando el mismo aire, en esos momentos en lo único que pensaba era en verte… y eso… eso me asustó…- le respondo y estoy siendo totalmente sincero.

Cierro los ojos mientras el vaivén del auto hace su trabajo de hacer que por fin el alcohol haga efecto en mi…

Estoy medio dormido, medio despierto, trato de sostenerme mientras Maggie intenta sacarme del coche, pero definitivamente ahora sí puedo decir que estoy totalmente ebrio…

No sé en qué momento Maggie y alguien más a quien no logro identificar me arrojan sobre la cama, donde vuelvo a perder la conciencia. Solo siento que alguien me mueve de un lado a otro…

Abro mis ojos y siento ese aroma… el perfume de Maggie… veo como me cubre con una manta y lo único que puedo decir es

-¿Puedes quedarte?

-Tus padres…- me dice.

Intento mantener mis ojos abiertos y ser lo más consciente posible mientras le digo

-Eres mi novia, mi prometida, en tres meses serás mi esposa… esto lo hará más creíble… quédate, no voy a hacerte nada Maggie, es sólo que hace días no puedo dormir bien y no quiero estar solo

-Ok, buscaré algo para cambiarme- me responde segundos después.

Al escuchar su respuesta siento tranquilidad

-Gracias…- le digo antes de quedarme profundamente dormido.