Mi Mejor Negocio

Narra Camila

Vamos en el avión rumbo a París y voy muy nerviosa gracias a que le temo a las alturas.

-Cálmate princesa no pasara nada.

-Lo se solo que no puedo evitar sentirme nerviosa.

-Tranquila yo estaré a tu lado. Me agarra la mano entrelazando nuestros dedos.

-Gracias mi amor.

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Llegamos a París y más hermoso de lo que imaginaba.

-Princesa estaremos aquí un para de semanas mientras soluciono unos problemas en unos hoteles como ya te lo había dicho.

-Esta bien, pero que te parece si nos tomamos una semana más con luna de miel. Sus ojos se iluminan al escuchar lo que dije.

-Claro princesa lo que tú quieras, ya mismo hago una par de llamadas para arreglar todo. Se aleja de mí y habla por teléfono en su idioma por unos 20 minutos.

-Princesa ya está todo listo, vamos a hotel a descansar.

Vamos en el auto y Rayan no me ha soltado la mano en todo el camino y de vez en cuando me mira y sonríe.

Llegamos a un hotel muy lujoso.

-Te gusta princesa.

-Si es muy hermoso.

-Este es uno de los hoteles que tengo aquí en París.

-Es.. Este edificio es tuyo. Digo sorprendida.

-De hecho no, este edificio es tuyo.

-Como que mío.

-Si, apenas entro en funcionamiento hace un par de semanas ya que lo estaban construyendo y lo puse a nombre tuyo.

-Como que a nombre mío, porque.

-Cuando nos casamos ya estaba muy avanzada su construcción, llevo dos años construirlo y pensé y dártelo como regalo de boda.

-Es mucho Rayan.

-Para ti nada es suficiente princesa.

-Gracias.

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Ya han pasado dos semanas desde que llegamos a París y Rayan se la ha pasado sumergido en el trabajo y no hemos tenido tiempo para nosotros ya que solo lo veo en la noche cuando llega a dormir pero hoy iniciaremos nuestra luna de miel y estoy muy nerviosa.

-Princesa a dónde quieres ir primero.

-Que te parece si vamos a Disneyland Park.

-Me parece bien y luego vamos a la Torre Eiffel.

-Esta bien.

Nos pasamos toda la tarde de en el parque, y subimos a todas las atracciones.

Lugo de pasar toda el día en Disneyland nos dirigimos a la Torre Eiffel como habíamos acordado, era más hermosa de lo que había imaginado, nunca pensé en que vendría a París la ciudad de amor y mucho menos pensé que vendría enamorada como lo estoy.

-Princesa te gusta.

-Si, muchas gracias.

-En que pensabas.

-Oh, solo que nunca pensé venir a París y enamorada menos. Rayan sonríe, se me acerca lentamente y choca su frente con la mía.

-Te puedo besar.

-Si claro y ya deja de pedir permiso. El solo asiente sonriendo y me besa.

vimos el anochecer en la Torre Eiffel y es lo mar hermoso que he visto en mi vida.

Durante el resto de la semana no la pasamos de compras, en parques, restaurantes y visitando todos los sitios turísticos de Francia, fuimos fotografiados muchas veces por paparazzis y de hecho somos la portada de una revista con siguiente enunciado "La pareja de casados se ven muy enamorados apesar de los fuertes rumores de su matrimonio".

-De que rumores hablan Rayan. Yo no lo sabía ya que no salía de la casa.

-Dicen que tú te metiste entre Aysén y yo.

-Y no mienten, en realidad así paso.

-Ya basta Camila, Aysén ya sabía que me iba a casar contigo desde el inicio de nuestra relación.

-Cuanto duraron.

-Para que quieres saber eso.

-Curiosidad.

-Solo dos años.

-Y como carajos hace dos años ibas a saber que te ibas a casar conmigo. Digo enojada y sorprendida

-Cami escuhame.

-Te estoy escuchando.

-Yo te vi por primera vez cuando tenías 16 años y me enamoré de ti pero tú padre no me dejaba acercarme hasta que tú cumplieran la mayoría de edad para enamorarte y solo si eso pasaba me podría causar contigo, Aysén sabía esto y cuando tú cumplierás 18 años lo mío con ella terminaria, pero luego llegó tu padre proponiendome que me casará contigo y yo no dudé en aceptar.

-Es verdad lo que me dices.

-Si princesa yo te he amado en silencio por mucho tiempo.

-Rayan que más secretos hay.

-Muchos, pero te prometo que te los contaré todos a su debido tiempo.