"Fueron muchos años de maltratos y humillaciones, pero ya no más, hoy, voy a ser todo lo que yo quiera ser".
Viviana es una chica abandonada por su madre, y en quien su padre descarga todas sus frustraciones. Pero un ángel dará luz a su vida y le ayudará a cruzar las más densas tinieblas.
NovelToon tiene autorización de AraMosBa para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Ofrecimiento
Han pasado tres días desde que los hermanos Alvarado dejaron el hospital, aún recuerdo la carita de la chica cuando se despidió, ella estaba feliz de ver a su hermano recuperado, y bueno, yo estaba feliz de ver que todo termino bien.
— ¿Entonces mi doc, no me va a contar la verdadera razón por la cual ayudó a esos dos muchachos?
— ¿Qué te hace pensar que hay una razón más allá de que simplemente me meció del corazón?
— No lo sé, es que por un momento vi algo en sus ojos, como un brillo especial, tuve una ligera sensación.
Lo miré fijamente, no sé por qué, pero me estaba molestando que se hiciera ideas.
—¿Ah si? ¿Y cómo que sensación?
— No se doc, yo solo digo que vi un brillo especial en sus ojos, más cuando abrazo a la chica aquí despidiéndose. Tenía una sonrisa que jamás se la había visto, y eso que me la pasó con ud la mayor parte del tiempo, así que se puede decir que soy quien mejor lo conoce.
— Yo estoy teniendo una ligera sensación acerca de ti en este momento, no sé, es así cómo si de repente quisiera despedirte y buscarme otro asistente, uno que no sea tan cotilla y se ocupe de sus asuntos.
Le dije esas palabras y me retiré de inmediato. Justo ahora me reía de mi mismo recordando ese episodio, mi hermana y Teo tal vez tenían razón, esa chica me estaba haciendo sentir extraño.
Desde que la conocí en mi consultorio esa tarde, algo había pasado dentro de mí, solo pensaba en ella, tenía su cara como un tatuaje en mí mente, y una necesidad de verla, de escucharla que me estaban volviendo loco. No podía concentrarme este día en el trabajo, solo quería ver a esa niña, y tenía que buscar alguna excusa para ir hasta su casa.
— Por supuesto, eso es lo que debí hacer, ir a visitar a mi paciente y averiguar cómo le va con el tratamiento.
Esa era una gran idea, así que tome mi maletín médico y me dirigí a la dirección de la casa, al llegar estaba muy seguro de la explicación que les daría, pero después de un rato tocando la puerta, nadie abrió. Me sentí algo deprimido al pensar que pudieran haberse mudado de allí, pero una mujer apareció de repente.
—Si buenas, ¿En qué puedo ayudarlo?
— Disculpe, mi nombre es Adrián Sabat, soy doctor, y estoy buscando a las personas qué viven aquí, el chico es mi paciente y vengo a ver cómo sigue.
La mujer me escaneó y se puso algo...
— ¿Doctor? Pero se ve ud muy fino e importante, ¿Por qué alguien así se toma la molestia de venir a ver un enfermo a su casa? Hasta donde sé, esa parejita ni tiene dinero.
Me estaba empezando a molestar esta mujer y su interrogatorio, pero dijo algo que fue como un campanazo dentro de mí, ¿Parejita?
— Disculpe ¿Dijo parejita? ¿Qué no son hermanos?
— Jajajajaja ¿a ud también le metieron ese cuento? Ellos dicen que sin hermanos, pero la verdad es que son pareja, pero lo que yo pienso es que se volaron de sus casas para poder estar juntos, ud sabe, adolescentes al fin, porque estoy segura de de que ninguno de los dos es mayor de edad.
Escuché a la mujer decir eso y vaya que si me afectó, lo que decía tenía sentido, yo mismo había dudado sobre el parentesco de ambos, no se parecían en nada, y... No, yo tenía que ser objetivo y no dejarme creer en cuentos de una vieja que a leguas se notaba que era argüendera.
— Entonces ¿Usted no sabe si sin menores o mayores? Si es así ¿Cómo les rento este lugar? ¿No se supone que debe pedir documentación e información de sus inquilinos? Si ellos escaparon de sus casas como usted insinúa, y resulta ser que los están buscando o que sus padres dieron parte a la policía, ud va a tener muchos problemas. ¿No cree?
La vi cambiar de color y de paso me sentí mal, pues luego de esto los chicos probablemente se quedarían sin casa. Pero ya lo había dicho desde mi molestia.
— ¿Sabe ud si ellos tardarán?
— No lo sé, nunca los veo salir o entrar, así que no sabría decirle, de todas maneras voy a poner atención para cuando lleguen, según lo que usted acaba de decirme, lo mejor será que se busquen otro lugar, ni quiero problemas con la ley.
Y allí estaba, dicho y hecho, yo acababa de joderles la vida a esos dos chicos. No tuve más que llamar a Teo y pedirle un favor.
— Necesito que mandes a alguien al apartamento de la 26, que lo limpien y pongan en el todo lo necesario para ser ocupado.
— ¿Para qué?
— Sin preguntas Teo, haz lo que te digo.
Me senté en una silla que había en el pasillo, no me movería de aquí hasta verlos, o mejor dicho, verla.
Pasaron varias horas y finalmente los vi llegar. Estaban agarrados de la mano, riendo y hablando entre ellos, lo que me generó como una punzada en el pecho, ¿Entonces si eran pareja?. Me levanté de la silla y me acerqué lentamente, esperando a que me reconocieran.
— Hola chicos, ¿cómo están? ¿Podemos hablar un momento?
Ellos se volvieron hacia mí con sorpresa en sus rostros, y vi como la chica se tensaba un poco al verme.
— Hola doctor, ¿qué hace por aquí? —preguntó el chico, con una expresión confundida en su rostro.
— Bueno, soy su médico, y vine a ver cómo están. Además, tuve una pequeña charla con la dueña de la casa y creo que están en una situación complicada, así que les conseguí un nuevo lugar donde vivir.
La chica me miraba con una mezcla de incredulidad en sus ojos, y eso hizo que me sintiera muy mal por lo que había hecho.
— No entiendo, ¿Qué situación?
Les expliqué lo sucedido y la implicación de ser mejores de edad, así que volví a extender mi invitación.
— ¡Gracias doctor! Estamos muy agradecidos con ud pero no podemos aceptar.
— Solo quiero asegurarme de que estén bien. Este lugar no es cómodo y la mujer a cargo tampoco se nota que sea tan buena persona. Por favor, permítanme hacer esto por ustedes.
El chico me miraba con curiosidad.
— ¿Y toda esta ayuda que nos ofrece es a cambio de que? Por qué tanta generosidad de su parte así nada más no lo entiendo, así que hablemos claramente. Mire doctor, yo estoy muy agradecido por lo que hizo por mi y por mi hermana, créame que estoy dispuesto a pagarle todo, pero no quiero sentir que ud quiere aprovecharse de nosotros porque nos ve así como desamparados y vulnerables.
— Siento mucho que tengas ese concepto de mi, pero sí, precisamente porque los veo en estas condiciones es que me preocupo por uds, sin unos menores aún y se exponen demasiado. Ustedes no me lo han dicho, pero sé que huyeron de su casa por maltrato, lo supe al ver todas esas cicatrices que tienes en tu cuerpo, y aunque no veo las tuyas chica, sé que ahí están. Soy una persona que no tolera el maltrato ni la violencia, y es por ello que me siento responsable de ustedes, es mi deber como profesional y como ser humano servir, pero esta bien, si desconfían de mi, es válido y créanme que no fue mi intención incomodarlos ni molestar.