Renata llevaba cinco años esperando por el hombre de su vida, ese que prometió volver a ella sin importar que
cinco años, cinco largos años llevaba esperando para estar entre sus brazos.
no quería perder más tiempo, así que lo atraje a mi, sus besos eran igual de delicioso que hace cinco años, me fui desnudando ante su mirada llena de lujuria y deseo, sus manos me empezaron a tocar viajando a mi zona más íntima.
sus dedos jugaban con mi entrada, la cual ya estaba totalmente mojada, deseando que el entrara en ella. el aún seguía con su pantalón puesto, así que se lo quite rápidamente, su miembro Lucia mucho más grande de lo que recuerdo, palpitaba dándome señal de que el lo deseaba tanto como yo.
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TÓMALO CON CALMA.
Renata terminó de ayudar en el puesto para luego ir a su casa a arreglarse para ir a su control.
...
RENATA.
El tiempo sigue avanzando, y nada que llegan noticias de Federico, he pensado muchas veces en ir a buscarlo, Pero ya no quiero causarle más problema, tengo la fe que algún momento vendrá a buscarme, nuestro hijo sigue creciendo y él aún no sabe de su existencia, cosa que me deprime y más cada vez que tengo un control y él no está para acompañarme.
Hoy es un día de esos, me pongo un vestido de flores que me compro mi mamá, el día del incendio perdimos toda nuestra ropa, así que tuvimos que comprar, no es mucha, pero por lo menos tenemos que ponernos, como le decía me puse un vestido de flores mi panza hoy se nota un poco más que ayer lo puedo ver en el pequeño espejo que tengo en mi habitación, salgo de casa rumbo a mi control, con anhelo de encontrarme a Federico en el camino.
...
Renata toma el camino rumbo a su cita, mientras rosario y Carmen tenían un día muy ajetreado, el puesto estaba lleno.
Rodrigo salió de si casa una vez más con la esperanza de que ese día si encontraría a su familia.
_ padre hoy, busquemos hacia el barrio vecino.- Rogelio y Rodrigo llegaron al barrio donde Rogelio había asegurado ver a la chica que se parecía a rosario.
_ hijo, pero yo la vi, fue en este lugar.
_ si padre, pero que tal que solamente estaba de paso, debemos buscar en los barrios vecinos.
_ tienes razón, vamos, no perdamos tiempo.- Rogelio y Rodrigo subieron de nuevo al coche, Fernando el chofer de rogelio condujo unas cuadras más arriba, Pero de repente freno abruptamente.
_ que sucede Fernando.- pregunto rodrigo.
_ señor mira.- Fernando señalo un punto._ es ella señor, es la señora rosario.- rodrigo miro de inmediato.
Rosario estaba atendiendo a unos clientes, ella sonreía amablemente, seguía igual de bella, pensó Rodrigo era un sin fin de emociones.
_ la encontramos padre.- Rodrigo no pudo contener el llanto._ por fin la encontré.
Los tres estuvieron observándola por un largo rato.
_ ahora que hacemos señor.- pregunto Fernando.
_ no sé, estoy muy nervioso.- Rodrigo tenía sus manos sudadas, temía ser rechazado.
_ Fernando ve y compra unos tacos.- Rogelio le entrego un fajo de billetes a Fernando.
_, Pero señor, me podrías reconocer.- Fernando no creía que fuera buena idea.
_ esa es la idea, también le estregarás esto.- rogelio busco entre el traje de su hijo una tarjeta de presentación.
_ estás seguro padre.- Rodrigo se veía muy preocupado.
_ sí, necesitamos que ella sepa que estamos cerca, sé que no te buscara, ya lo hizo muchas veces, Pero tiene que estar lista para el día que te vea. - Rogelio estaba más que seguro que esa era la manera correcta de irse acercando.
Fernando bajo del coche, Rogelio y Rodrigo lo observaban con atención, debían ver que reacción tendría rosario.
Fernando se acercó como cualquier cliente, el lugar estaba lleno así que debió espera a que fuera su turno.
_ buenas, por favor me puedes preparar dos tacos de carnitas.- Fernando le hablo a rosario, esta contesto amablemente sin mirarlo.
_ claro, en un momento los tendré listo.- rosario se apresuró a preparar los tacos, su sorpresa fue al levantar la mirada.
_ señor Fernando.- rosario sonrió alegremente, hacía mucho tiempo que no veía un rostro conocido.
_ señora, rosario, tanto tiempo, que alegría verla.- Fernando estrecho la mano de rosario.
_ el gusto es todo mío.- rosario converso un rato, evitando preguntar por Rodrigo, cuando en realidad se moría por saber de el, Fernando le pago y le entrego la tarjeta que Rogelio le había enviado.
_ espero volver a verla.- Fernando se despidió y volvió al coche.
Rosario quedó estática al ver el nombre gravado en la tarjeta, siempre había soñado con ver de nuevo a su único amor, Pero no esperaba que en realidad pasará.
_ que sucede.- le pregunto Carmen, al verla pálida._ quien era ese hombre.
_ es el chofer de la familia de Rodrigo.- contesto rosario con la voz temblorosa.
_ hablas de Rodrigo, el padre de mi niña Renata.- Carmen estaba sorprendida.
_ si el mismo.
Carmen busco la manera de calmar a rosario, quien no salía de la sorpresa.
_ es hora de aclarar el pasado mi niña.- Carmen la abrazo para darle fuerza._ esto iba a pasar tarde o temprano, mi niña Renata merece lo mejor y quién mejor que su padre para dárselo.
_ tengo miedo Nana, no sé cuál sean realmente sus intenciones.
_ yo creo que son buenas, mi corazón me lo dice, tu escucha todo lo que tiene por decirte y tú has lo mismo.
_ tu crees Nana.
_ si, ahora cálmate no me quiero imaginar cuando lo veas en persona.- Carmen sonrió divertida al ver la cara de rosario.
...
Rodrigo y su padre estuvieron observando de lejos hasta que vieron llegar a Renata.
_ es ella hijo es la chica que vi.- Rodrigo la miro con atención, era cierto que se parecía mucho a rosario, y ver a Renata abrazar a rosario les confirmo quien eran.
_ es mi hija, padre es ella.- Rodrigo sintió un impulso de salir corriendo y abrazarlas, pero fue detenido.
_ tómalo con calma, debemos hacer las cosas despacio, ya sabemos donde encontralas.
_ tienes razón, no crees que mi hija es hermosa.- Rodrigo se sentía orgulloso, su hija era más de lo que había soñado.
_ si mi nieta, es preciosa. - las horas pasaron y la hora de ir a casa llego, Renata, Carmen y rosario empezaron a recoger las cosas para ir a descansar.
Ellas fueron seguidas, hasta su casa Rodrigo temía volver a perderlas, así que no se fue hasta que no vio las luces apagar.
_ volvamos a casa hijo, mañana vendremos de nuevo.
_ tengo miedo padre, y si mañana ya no están.
_ estarán hijo, lo sé.- Fernando condujo hasta la mansión, ana la madre de Rodrigo los esperaba.
_ se puede saber en dónde estaban, porque llegan a esta hora.- Ana se veía muy disgustada.
_ ya mamá, hoy a Sido un gran día, no lo dañes con tus cosas.- Rodrigo camino directo hasta las escaleras.
_ no me hables así Rodrigo soy tu madre.- grito molesta.
_ ya mujer, déjalo está tan feliz que no te va a escuchar.- Rogelio intervino para evitar que su esposa dañará el humor de su hijo.