Roxanne es una chica muy hermosa a vivido engañada pensando que es una chica común y corriente, su abuela llega a su vida y le cuenta cosas sobre su pasado quien era realmente su padre, mientras va descubriendo todo sobre ella encuentra el amor.
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Cretino, acosador
Y así lo hice le pedí a Omar el chófer que mi abuelo designó para mí que me llevara al centro comercial, la ciudad era muy grande me pregunto si todos son hombres lobo o si también hay personas normales por aquí, necesitaba municiones porque pronto tendría la regla, y necesitaba zapatos con las prisas solo empaque 1 par.
Después de comprar todo lo que necesitaba fui a una pequeña cafetería que estaba cerca me moría de hambre así que me acerque al mostrador y pedí una hamburguesa con papas fritas y un refresco mientras esperaba me senté en una mesa del fondo era incómodo estar ahí sola, sentí una mirada fija sobre mí y cuando gire lo vi a él ese pesado está ahí frente a mí sin apartar la vista ni un segundo de mí, si estar ahí sola era incómodo, estar ahí sola y con él mirándome de esa manera era mucho peor, que carajos le pasaba porque no voltea a otra parte no tiene nada mejor que hacer o que.
Se acercó la mesera con mi comida en este momento lo que menos tenía era hambre, tome un poco de refresco y solo mordí un poco mi hamburguesa, me acabe las papas fritas y estaba lista para irme ese tipo en definitiva había arruinado mi comida, al salir del lugar me jalo del brazo y me atrajo hacia él.
-Hola duendecillo que te trae por aquí.
-nunca vas a dejar de molestarme me haces sentir incómoda no lo entiendes.
-y tú no entiendes que eres mía, tendrás que acostumbrarte a tenerme muy cerca.
-estas loco no soy propiedad de nadie no soy un objeto.
Mi brazo sacaba chispas, pero no podía dejar que él supiera lo que provocaba en mí en mi cuerpo así que a como pude me safe de su agarre y camine hacia el auto.
-vuelve aquí duendecillo no he terminado de hablar contigo.
-pues yo he terminado y te voy a pedir que no vuelvas a dirigirme la palabra y mucho menos a tocarme, no me importa que tan alfa seas yo no soy de tu propiedad ni soy tu manada si ellos tienen que obedecer tus órdenes y hacer lo que tú quieras yo no, hasta nunca cretino.
Se quedó cabreado sus ojos ya no eran café claro ahora eran un negro brillante lo cual me dio algo de miedo, pero no iba a dejar que hiciera conmigo lo que quisiera y mucho menos iba a seguir órdenes de un acosador.
Inmediatamente, subí al auto no iba a esperar para ver que era lo que iba a hacer le dije a Omar que nos fuéramos, pero antes de que él pudiera siquiera prender el auto el estaba junto a él dándole órdenes.
-sal del auto Omar y déjanos solos.
-claro que si alfa.
-no Omar vamos a casa.
-lo siento señorita Roxanne es una orden.
-sal ahora Omar.
Y Omar salió dejándome sola en ese auto menudo cobarde y ahora tendré que aguantar a este cretino.
-quien te crees que eres para hacer eso quiero ir a casa deja de molestarme.
-oh no duendecillo te e dicho que no he terminado de hablar.
-no tengo nada que hablar contigo ni siquiera te conozco.
-no me conoces aún, pero eres mía eres mi luna.
-que de estas hablando tu luna que rayos es eso.
-tu eres mi pareja predestinada y te e esperado por tanto tiempo ahora que la Diosa de la Luna te a enviado a mi lado.
Interrumpí lo que decía.
-no sé dé que hablas y no me interesa déjame ir.
Podía ver lo molesto y confundido que estaba, pero no iba a permitir que se sintiera con derecho a mí.
-Tengo que irme así que por favor dile a Omar que me lleve a casa es lo único que quiero, yo no pedí esto no quería venir aquí todos ustedes son tan extraños lo único que quiero es volver a casa.
Sus ojos se volvieron melancólicos y sin decir más se fue. Omar volvió y me llevo de regreso a casa de mis abuelos todo el camino fue muy incomodo tenía que buscarlos y que me explicaran qué eran todas esas tonterías qué decia Jayson.
.es lamentable..q nos tomen el pelo pues ellos viven de nosotroa q leemos sus historias