Mi nombre es Hanna y esta es mi historia.
En mi vida todo lo que creí que era real nunca lo fue, por eso sé con seguridad que la frase de "no hay peor ciego que el que no quiere ver "no encaja conmigo....yo realmente quería poder ver; el dolor y el sentimiento de tristeza en mi corazón no desaparecía y la verdad aun persiste por eso la soledad fue y seguirá siendo mi mejor compañera de vida ¿porque?.
-Porque ya no logro confiar en nadie hasta perdí las ganas de conocer y amar a alguien.....perderlo todo porque otras personas así lo decidieron....ja! ¡que ridículo!
-Es insoportable; pero¿qué podía hacer? si mi alma estaba encerrada en una oscuridad profunda sin poder ver ni un poco de luz infiltrarse.
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Una herida profunda
-Después de la conversación con Alex empecé a preguntar a Dios, ¿por qué tenía que pasarme todo eso?, hasta pensé en que quizás era una mala persona por eso estaba destinada a perder a las personas que amaba, sentía que no podía ser feliz de verdad... no quería perder a nadie más.
-Decidí llamar a mi madre para contarle todo lo que estaba pasando, pero cuando la llame me atendió con alegría y dándome una gran noticia, por lo cual no tuve el valor de arruinar el momento.
Sol- ¡Hanna!, ¿cómo está mi niña?
Hanna- Bien, bien mamá, ¿y vos?
Sol- Bien hija, feliz por la buena noticia que recibimos hoy
Hanna- ¿Que notícia?
Sol- Tu hermana Sami, ¡tendrá un bebé!, ¡seré abuela!
Hanna- ¡Qué alegría!, ¡seré tía!
Sol- Sí, el novio de tu hermano le propuso matrimonio hace dos semanas, así que, ¡tendremos boda!
Hanna- ¡Qué bueno!, mamá necesito que hablemos de un tema serio podría ser?
Sol- ¿Es muy importante?
Hanna- Sí, así es, llamaré a la noche para poder hablar bien y por favor dile a papá que él también esté, debo ir a trabajar
Sol- Está bien, yo le aviso, adiós
Hanna- ¡Adiós!
- Cuando colgué el teléfono miré al cielo y empecé a llorar, no pude concentrarme demasiado en el trabajo y Carlos se percató de eso.
Carlos- Hanna, ¿estás bien?
Hanna- ¡Sí, no te preocupes!
Carlos- ¡Mírame!
Hanna- Estoy bien, en serio
Carlos- Sabes que si no te conociera, te creería esa mentira
Hanna- Es que necesitaba hablar con mi madre está mañana, pero cuando la llamé, estaba muy feliz por la noticia de Sami y su embarazo
Carlos- ¿De verdad?
Hanna- ¡Sí, seré tía!
Carlos- ¡Qué buena noticia!, ¡felicidades tía!
Hanna- ¡Gracias!, estoy muy feliz por Sami y su novio
Carlos- ¿Entonces porque estás triste?, ¿es por lo que hablaste con Alex?
Hanna- Es que yo... no puedo ver un poco de esperanza en todo lo que pasa y no sé que hacer, no quiero rendirme tan fácilmente, pero... siento que estoy perdiendo fuerzas
Carlos- Entiendo como te sientes, pero no deberías preocuparte demasiado, confía en ese loco enamorado que tienes a tu lado, estoy seguro que él los salvará y podrán ser felices
Hanna- Confío en él, pero aun así... tengo miedo de que...
Carlos- ¿Tienes miedo de que él tome la decisión de morir para que vos vivas?
Hanna- Sí
Carlos- En ese caso disfruta de cada minuto que él esté a tu lado
Hanna- No quiero que el decida eso, se lo dije, pero no sé si me hará caso
Carlos- Me gustaría decirte que si hará lo que le pediste, pero Mica y yo hemos tratado de convencerlo de muchas formas... Hanna él quiere liberarte para siempre de todo
Hanna- Pero no quiero que lo haga a costa de su vida
Carlos- Lo sé, pero él es terco y te ama demasiado, estar lejos tuyo no fue fácil para él es por eso que no quiere aceptar el irse a vivir a otra ciudad sin saber nada de vos, por eso consiguió ese amuleto para poder estar a tu lado
Hanna- Esta noche hablaré con mis padres, les contaré todo
Carlos- ¿Estás segura de hacerlo?
Hanna- ¡Sí!
- Estaba decidida a contarles todo, necesitaba sentir el apoyo de mis padres y mis hermanos en ese momento difícil que estaba transitando, lo que nunca me imagine es que no sería como pensaba.
- Llegamos a casa y Carlos se fue a preparar la cena mientras esperaba que me bañara luego me dijo que llamaría a Alex para hablar, en lo que yo hablara con mis padres por videollamada.
En la llamada:
Hanna- Hola, ¿como están?
Fran- ¡Hola hija!, estamos bien
Sol- Sí, estamos bien!, ¿qué era lo que querías?
Hanna- Escuchen yo...
- Empecé a contarles todo lo que Alex me había dicho y sobre la enfermedad de Carlos, mi padre estaba preocupado, pero a mi madre parecía no afectarle hasta que...
Hanna- Iré en las siguientes vacaciones a visitar a Sami y así podré pasar unos días con ustedes también
Fran- ¡Sí hija, nos harás muy feliz!
Sol- ¿Qué?, ¡no!
Hanna- ¿Porque?
Fran- ¡¿Qué te pasa?!
Sol- ¡No quiero que vengas!, ¿no te parece que estás siendo egoísta?
Fran- ¿De qué hablas?
Hanna- Mamá... no entiendo
Sol- Si vuelves pondrás en peligro a mis hijos y no te lo permitiré!
Hanna- ¡Yo también soy tu hija!
Sol- Ya, deja de decir eso
Fran- No le hables así, nos necesita como familia
Sol- Pues no lo somos, desde hace muchos años ya
Fran- Este no es el momento para tus teatritos
Hanna- ¡Ya no peleen por favor!, ¡mamá cálmate!
Sol- Acepté que te fueras para no verte más, no para que vuelvas a fastidiar nuestras vidas
Fran- ¡Cállate!
Hanna- ¡¿Qué?!, ¡mamá basta!
Sol- ¡Deja de llamarme así!, ¡no soy tu madre y nunca lo fui!, ¡eres una bastarda que arruinó la vida de mis hijos y la mía!
Fran- Hanna lo siento, hablamos en otro momento
- Mi padre colgó la llamada y un dolor inexplicable empecé a sentir en ese momento, pero no podía derramar ni una lágrima, solo me quedé en silencio mirando mi pantalla apagada, sin tan siquiera tener valor para salir de mi habitación.
- Por primera vez sentí que caía en un pozo profundo y oscuro, saber que una de las personas que siempre respete, admiré y ame me estaba dejando una herida difícil de sanar, me hacía sentir una profunda tristeza .
- Como debía seguir?, ¿por qué a mí?, ¿realmente soy de lo peor?, ¿por eso me pasa todo esto?, ¿me lo merezco?, eran las preguntas que me empezaron a surgir provocando ansiedad y miedo dentro de mí, como salir de esto si solo podía sentir el dolor de llorar sin lágrimas y las ganas de gritar apoderándose de mí en un profundo silencio.
- En ese momento escuché la voz de Alex y abrí la puerta de mi habitación, lo abracé y le dije;
Hanna- Tengo miedo, no me dejes caer