Quédate Conmigo

Emma le pidió prestado el uniforme de sirvienta a una amiga de Clara para su actuación esta noche.

"Tráeme una copa de vino, y que sea rápido", dijo Tamara a Emma.

"Está bien, señorita", respondió Emma mientras salía de la sala, notando lo barato que era el gusto de Aarón.

Aunque Emma no poseía los mismos atributos que Tamara, no era tan despreciable como ella.

"Apuesto toda mi fortuna a que esa mujer se ha operado", pensaba Emma mientras sentía deseos de acabar con ella.

Pero decidió calmarse, sabía que debía ser más inteligente que Tamara para ganar.

Cuando Emma regresó a la sala, presenció cómo Tamara empujaba a una mujer de casi 70 años al suelo.

"¿Qué te pasa? ¡Es una anciana!", exclamó Emma mientras ayudaba a la señora a levantarse.

"¡Eres una insolente! Iré ante Aarón y le pediré que las despida a las dos", amenazó Tamara.

Emma asistió a la mujer mayor y la sentó en el sofá, sintiendo tristeza al verla lastimada de esa manera.

Las mejillas de la señora presentaban marcas por las bofetadas y se quejaba del golpe de la caída.

"¿Por qué la colocas ahí? Ella no está a mi nivel para sentarse en ese lugar", reclamó Tamara.

Indignada, Emma notó cómo aquella mujer se consideraba por encima de los demás debido a su clase social.

Sin poder contenerse, Emma abofeteó a la mujer y la empujó al suelo para que experimentara su propia medicina.

"¿Cómo está?", preguntó Emma.

"Me duele mucho", la señora Lili lloraba por el dolor.

Emma llamó a la ambulancia, tendría que llevar rápidamente a la señora Lili al hospital.

"En unos 15 minutos vendrá la ambulancia, estará bien", Emma le sonrió a la mujer.

"Gracias".

"¿Qué está pasando aquí?" Aarón llegó a la sala.

Hacía poco que había llegado a la mansión y encontró a Tamara tirada en el suelo con las mejillas rosadas; claramente algo había sucedido.

"Ella me lastimó, mira cómo me dejó", Tamara se levantó con dificultad, fingiendo que le dolía.

Emma miró a Aarón, notando la frialdad en su expresión al mirarla.

"Ella lastimó a esta señora, mira cómo la dejó. Le di a probar su propia medicina", Emma habló sin miedo ante la mirada dominante que le lanzaba Aarón.

Aarón vio a su nana y se acercó preocupado.

"Por eso hice lo que hice, ya llamé a la ambulancia", dijo Emma, buscando calmar la preocupación de Aarón.

La preocupación de Aarón era evidente para cualquiera.

"No le creas, amor, esa señora se lo buscó", Tamara intentaba hacerse la víctima delante de Aarón.

"Vete ya, antes de que te mate, Tamara."

"Pero, cariño..."

"¿Te vas ahora o todos los negocios de tu familia irán a la ruina? Tú decides", dijo Aarón molesto.

"Está bien, ya me iré", respondió Tamara mientras tomaba su cartera y salía de la mansión.

La ambulancia llegó cinco minutos después de que Tamara se fuera.

"Estarás bien, Nana" Aarón cargó el cuerpo de la Nana Lili.

"Quédate aquí, hablaremos cuando regrese", indicó Aarón mientras subía a la ambulancia.

Emma observó cómo la ambulancia salía de la mansión a toda velocidad.

"¿Qué pasó, Emma? ¿Por qué estás vestida así?" preguntó Clara al ver a Emma parada en medio del camino.

"Tamara lastimó a la Nana de Aarón, se fue al hospital con ella. Estoy vestida así por una razón que no puedo revelar ahora, pero lo haré en el futuro", explicó Emma.

"¿Cómo fue capaz esa mujer de lastimar a la señora Lili? Si hubiera estado allí, la habría golpeado", expresó Clara molesta al enterarse de lo sucedido.

"No te preocupes, la golpeé, le di una lección", respondió Emma.

"Es bueno que lo hayas hecho, ganaste puntos con Aarón. Él quiere mucho a la señora Lili, ella fue quien lo crió", comentó Clara.

Emma sonrió, no esperaba ganar puntos con Aarón al defender a la señora Lili. Estaba en camino para cumplir su objetivo.