Sarah es una bailarina de ballet que, por primera vez, logró firmar con una compañía. Durante uno de sus tours, conoce a un hombre que está completamente enamorado de ella. Él amenaza con arruinar su carrera si ella no firma un contrato con él. ¿FIRMÓ ELLA EL CONTRATO? ¿QUE QUIERE EL DE ELLA?
NovelToon tiene autorización de Gabrielcandelario para publicar essa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capitulo 12
Muñeca de Porcelana
Las semanas siguientes a mi debut como la acompañante de Volkov fueron una tortura constante. Cada evento, cada fiesta, cada encuentro con él era una prueba de mi fortaleza y mi determinación. Sentía que me ahogaba en un mar de lujos y opulencia, pero lo que realmente me aterraba era la forma en que Volkov ejercía su control sobre mí.
Durante los eventos sociales, Volkov se aseguraba de mantenerme a su lado en todo momento, presentándome a sus influyentes amigos y socios como su más preciada posesión. Cada gesto, cada mirada, cada palabra que intercambiábamos era cuidadosamente orquestada por él para demostrar su dominio sobre mí.
Odiaba la forma en que me miraban los demás, como si fuera una muñeca de porcelana que Volkov había adquirido para su propio deleite. Sentía que mi identidad, mi pasión por la danza y mi propia libertad se estaban desvaneciendo, reemplazadas por la imagen que Volkov quería proyectar de mí.
Cada noche, cuando volvía a mi apartamento, me desmoronaba en los brazos de Natalia, buscando consuelo y fortaleza. Ella me abrazaba con fuerza, susurrando palabras de aliento y recordándome que no estaba sola.
"Encontraremos una manera de liberarte de Volkov, Sarah", me decía una y otra vez. "No puedes rendirte ahora, no después de haber trabajado tan duro por tu sueño."
Asentía, aferrándome a la esperanza que mi mejor amiga me ofrecía. Sabía que tendría que ser más fuerte que nunca, que tendría que encontrar la forma de recuperar mi libertad y mi carrera, sin importar el precio.
Un día, mientras Volkov y yo asistíamos a una recepción en una lujosa mansión, noté que uno de los invitados me observaba con una mirada de curiosidad. Era un hombre mayor, de apariencia elegante y refinada, que parecía intrigado por mi presencia.
Cuando nuestras miradas se cruzaron, el hombre se acercó a nosotros, una sonrisa amable en su rostro.
"Buenas noches, señor Volkov", saludó, con voz grave. "Veo que ha traído a una encantadora acompañante esta noche."
Volkov se tensó a mi lado, pero mantuvo una actitud cordial.
"Buenas noches, señor Petrov", respondió. "Permítame presentarle a la señorita Sarah, mi más reciente patrocinada."
El hombre, a quien ahora sabía que se llamaba Petrov, me miró con un brillo de interés en sus ojos.
"Es un placer conocerla, señorita Sarah", dijo, tomando mi mano para depositar un suave beso. "Debo decir que su talento como bailarina es ampliamente conocido en nuestros círculos."
Sentí que me ruborizaba ante su cumplido, pero también noté la tensión que se había apoderado de Volkov.
"Gracias, señor Petrov", respondí, enviando una mira a Volkov tratando de mantener la calma. "Es un honor ser patrocinada por el señor Volkov."
Petrov asintió, sin apartar su mirada de mí.
"Señor Volkov, si no le molesta, me gustaría tener unas palabras en privado con la señorita Sarah", dijo, con un tono que no admitía discusión.
Volkov frunció el ceño, pero no se atrevió a negarse.
"Por supuesto, señor Petrov", respondió, con un deje de molestia en su voz. "Con su permiso."
Una vez que Volkov se retiró, Petrov me ofreció su brazo, guiándome hacia un rincón más tranquilo de la fiesta.
"Dígame, señorita Sarah, ¿está usted realmente satisfecha con el arreglo que tiene con el señor Volkov?" preguntó, con un tono de preocupación.
Sorprendida por su pregunta, vacilé antes de responder.
"Bueno, yo... Supongo que estoy agradecida por la oportunidad que me ha brindado", dije, sin poder ocultar del todo mi incomodidad.
Petrov me miró con compasión.
"Entiendo que debe sentirse atrapada en esta situación", dijo, en voz baja. "Volkov es un hombre poderoso y manipulador. Sé que usa su dinero y su influencia para controlar a quienes le rodean."
Abrí los ojos, sorprendida por su franqueza.
"¿Cómo lo sabe?" pregunté, sin poder contener mi curiosidad.
Petrov suspiró.
"Desgraciadamente, he visto demasiadas veces cómo Volkov utiliza a mujeres jóvenes y talentosas como usted para satisfacer sus propios intereses", explicó. "Su ascenso ha sido demasiado rápido y demasiado fácil. Eso me hace sospechar que hay algo más detrás de todo esto."
Sentí que un nudo se formaba en mi garganta. ¿Acaso este hombre podría ayudarme a escapar de Volkov?
"Señor Petrov, yo... Realmente no sé qué hacer", admití, con frustración. "Volkov me ha ofrecido todo lo que necesito para asegurar mi carrera, pero a cambio, tengo que ser su acompañante personal. No puedo negarme, o perderé todo lo que he trabajado tan duro por conseguir."
Petrov asintió, con una mirada de comprensión.
"Entiendo la encrucijada en la que se encuentra, señorita Sarah", dijo. "Pero déjeme decirle que, a largo plazo, ese trato con Volkov puede destruir todo lo que usted ha logrado. Ese hombre no tiene más que intereses egoístas, y no le importará sacrificar su carrera y su libertad con tal de mantenerla a su lado."
Sentí que la desesperación se apoderaba de mí.
"Entonces, ¿qué puedo hacer?" pregunté, con voz temblorosa. "No puedo perderlo todo, señor Petrov. La danza es mi vida."
Petrov me miró con seriedad.
"Permítame ayudarla, señorita Sarah", dijo, con determinación. "Conozco a Volkov mejor que nadie, y sé cómo puede ser derrotado."
Lo miré, sin poder creer lo que escuchaba.
"¿Está diciendo que puede... liberarme de Volkov?" pregunté, con esperanza.
Petrov asintió.
"Sí, pero tendrá que confiar en mí y hacer exactamente lo que le diga", respondió. "De lo contrario, Volkov podría descubrir nuestro plan y tomar represalias."
Sin dudarlo, asentí.
"Haré lo que sea necesario, señor Petrov", dije, con firmeza. "Estoy dispuesta a arriesgar todo con tal de recuperar mi libertad."
Petrov esbozó una leve sonrisa.
"Bien, entonces escúcheme atentamente", dijo, acercándose más a mí. "En los próximos días, fingiré estar interesado en patrocinar su carrera. Volkov, en su afán de mantener su control sobre usted, accederá a mi.