No soy una mujer que siga reglas o estereotipos, odio que pretendan gobernarme.
A mis cuarenta y tres años soy la soltera más feliz que existe, no tuve hijos por elección propia. No consideré que para sentirme mujer debería ser madre.
NovelToon tiene autorización de ARIAMTT para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
La reina de hielo
Gaby Anderson
Entre papá y yo nunca han existido secretos, sé muy bien quién es Flor Inés Villamizar.
La sigo por redes, ha sido mi referente para vestir a la moda, para conocer trucos sobre el glamur y la belleza.
Al conocerla de frente me di cuenta de que es más hermosa en persona que en las fotos, al igual que déspota y arrogante.
El día que realizamos el contrato ella estaba más interesada en mirar a papá, que en saber lo que decía el papel que firmo.
No fue difícil convencer a Amalia que me colaborara, le ofrecí una buena recompensa. Además, que sí, la Hitler la despedía, papá le ayudaría a conseguir trabajo.
También podría hacerlo por parte de mi abuelo paterno, quien es el exgobernador de la ciudad. Para él soy su adoración, aunque la relación con mi padre es bastante tensa.
De mi abuela tengo muy pocos recuerdos, ella murió cuando yo aún era muy chica.
Siempre hemos sido papá y yo. De vez en cuando mi tía viaja a nuestro país por cuestiones de trabajo.
A Mateo y Simón los conozco de toda la vida. Nos hemos visto en muy pocas ocasiones, pero nos mantenemos en contacto por medio de las redes.
He probado la resistencia de la reina del hielo. Sé que se exaspera y existen ciertos momentos en que desearía enviarme a freír espárragos, pero lo disimula y soporta mejor de lo que esperé. Manteniendo la cordura.
Realmente es como dijo el abuelo, es una mujer de palabra. Lástima que no la mantuviera para continuar junto a mi padre. Ella es la culpable de la tristeza que siempre veo en sus ojos.
La tía Karla, en la cual la Hitler confía con los ojos cerrados; cambio la hoja de vida del fotógrafo, que ella había seleccionado para el lanzamiento de su nueva colección de joyas. Él sabía más de maternidad de gallinas que de fotos.
Nada de su desastrosa publicidad fue coincidencia.
El mayor trabajo fue convencer al señor René, que era momento de regresar ¡Ahí si me las vi negras! Pero como en la guerra y el amor, todo se vale.
Necesitaba la ayuda de mi abuelo. Quien por mí estuvo dispuesto a doblegar su orgullo llamando a papá, tras una pequeña mentira blanca.
📱–Buenos días, hijo
📱–Buenos días ¡papá!
📱–Perdona que te moleste, pero sabes que no tengo a nadie más. Eres mi único hijo y los años me están pasando factura. ¡Quiero ver a mi nieta antes de morir!
📱–¿Papá de qué hablas? Sí, tu salud siempre ha sido de acero. Además, tú sabes que puedes venir las veces que desees.
📱–El médico, me prohibió viajar, tengo una afección en el corazón y tengo que realizarme una cirugía, no sé si sobreviva.
📱–¿Papá, pero porque hasta ahora me dices? Realmente eso no es importante, organizo unas cosas aquí y en dos días estamos allá. Gracias al cielo Gaby aún no ha ingresado al colegio.
📱–Gracias, hijo. Te espero aquí.
📱–Padre, no tienes que agradecer, nos vemos en un par de días.
Se preguntarán cómo sé lo que hablaron, sencillo, estaba en videollamada con el abuelo dictándole lo que tenía que decir.
¡Segunda parte del plan andando!
La tercera parte y más complicada que mi papi quiera ver a la reina del hielo. Bueno, de que desea mirarla de eso no hay duda. He descubierto en su portátil artículos sobre ella abiertos, pero ir es otra cosa. Ni modo abuelo tendrás que fingir un infarto.
Las personas suelen hacer promesas al pensar que con ello harán felices a un ser querido, al que creen enfermo de gravedad. ¡Dios perdóname! Luego haré una penitencia, pero ten en cuenta que es por una causa justa.
Mi abuelo adora a la dama de hierro, su mayor distanciamiento con papá fue por haberse separado de ella, para él es la nuera perfecta. Ellos siempre se han mantenido en contacto, cuando la abuela falleció fue Flor Inés, quien permaneció a su lado.
El abuelo le pidió a mi padre hacer las paces con la señora Villamizar. ¡Quién le niega algo aún enfermo!
¡Oh, una nueva coincidencia! La tía envió un mensaje.
📨–Hola, René, qué pena molestarte, sin embargo, si no fuese de vida o muerte no lo haría. Sé que solo has estado unos días en la ciudad, pero Flor está a punto de perderlo todo y requiere un fotógrafo.
Texto enviado a mi celular. Porque el de papá sufrió un pequeño accidente. ¡Oh, otra coincidencia!
–Papi, acabo de recibir un mensaje de la tía Karla donde el destino está de nuestro lado, La reina del hielo necesita un fotógrafo –le digo, en espera de una respuesta. Mientras él toma mi celular y arruga su entrecejo leyendo el escrito. Sé que está sorprendido, ante la casualidad.
–¡Nunca pensé que la oportunidad se presentara tan rápido! –expresa.
–¿Qué piensas hacer? –indago.
–Ir. Tengo una promesa que cumplir –responde algo pensativo y para nada convencido.
–Yo voy contigo –expreso, él me mira, pero asiente.
Así llegamos a la vida de la reina del hielo.
Hoy quiero saber que intenciones tiene con mi papi, la vi besándolo, les vamos a proponer jugar Uno.