La venganza sería la manifestación de la emoción pura, mientras que el castigo lo sería de la razón pura. Después de la muerte de su padre a manos de un líder terrorista, nuestra fénix como es llamada Cristin en la agencia de seguridad nacional. Busca el castigo para el asesino de su padre, así logra que él atente contra su vida, en ese despiadado acto Cristin pierde a su única hija, llevándola ha perder el camino. Pero al igual que el fénix, resurgirá de las cenizas para buscar justicia por el amor que le fue arrebatado. Zaid era un pequeño que vivía en la calle, adoptado por Yassir el enemigo de Cristin nuestra agente que sigue sus pasos, pero su verdadero nombre era Gael. en cierto momento queda dividido entre proteger al fénix o proteger al que ha sido su salvador y su padre toda su vida. El amor no siempre es sencillo, o leal, o romántico, también sabe ser amargo y doloroso. Podrán Zaid y Cristin sanar sus heridas, para poder tener un futuro distinto al que les fue impuesto.
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La Número Siete
Capítulo 11
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De pronto mientras dormía en los brazos de Zaid, Cristin despertó, todo había sido perfecto ella deslizaba su mano por el rostro de él para acariciarlo, él se encontraba profundamente dormido. Zaid en muchos años no había dormido con una mujer, siempre satisfacía su necesidad y se marchaba. De pronto despertó, al verla le sonrió.
Zaid se giró para quedar frente a ella, nadie podía interrumpirlos. En ese momento solo existían ellos dos, sin más espera comenzó a acariciarla una vez más, con su boca volvía a besar cada parte de ella.
Colocó el último preservativo, la montó sobre él para poder acariciarla y besarla, era un momento demasiado intenso y apasionado, Zaid acariciaba sus senos mientras estaba en su interior y ella movía sus caderas para hacerlo gozar. Se besaban ardientemente en cada oportunidad, Zaid besaba su cuello y sus labios mientras estaban unidos. Los gemidos de ambos sobre todo la respiración acelerada volvía el momento en algo sublime, la volvió a recostar y se colocó entre sus piernas para embestirla mientras ella se sujetaba de su espalda, por supuesto él la hacía completamente suya. Los gemidos de Cristin eran reales, no estaba fingiendo absolutamente nada. Zaid podía sentir como se contraía y eso le provocaba un gran placer, para él era una experiencia nueva durante el acto, con ninguna mujer había sentido algo igual. Eso lo incitaba a seguir y seguir, juntos llegaron al orgasmo.
—Me encantas, me enloquece, nunca había sentido algo igual. Sin duda eres única y sensual.—dijo Zaid mientras la besaba
—Debo confesar que también me gustó, eres maravilloso.—respondió Cristin y volvió a besarlo.
Pero algo rompió la atmósfera que los envolvía, el celular de Zaid. Lo llamaba Dasha, Cristin leía en la pantalla el nombre. Pero él no contestó, inmediatamente después lo llamaba Alizze, para la cereza del pastel lo llamó Casandra.
—Dudo que todas ellas sean tus asistentes Gael, ¿qué número soy?.—preguntó Cristin sin hacer un drama de ello
—En este momento solo importamos, tú y yo. No lo arruines por favor, además no hemos hablado sobre los términos de esto.—respondió Zaid
—Solo quería saber mi número, pero creo que es una lista enorme.—dijo Cristin en ese momento le llamó Olivia.—Ya contéstales me iré a bañar.—se levantó y se encerró en el baño para darse una ducha. Zaid se acercó a la puerta del baño.
—¿Podemos hablar sobre ellas?.—preguntó Zaid
—En otro momento, necesito ducharme porque tengo una cita con la manicurista.—respondió Cristin, esa respuesta enfureció a Zaid.
Mientras el agua caía sobre Cristin, minutos después pudo escuchar un portazo. Él se había marchado, Cristin se sentía confundida. Pero era normal, Gael (Zaid) era un hombre soltero, joven, caballeroso, empresario y sabía tratar a una mujer. Obvio que no tenía solo una, sabía que ella sería un número más en la lista interminable de sus conquistas.
Salió de la ducha y se vistió adecuadamente para salir a dar un paseo, era tan absurdo pensar que sería la única en la vida de un hombre. Era algo realmente imposible, lo único que podía hacer era no mezclar sentimientos, después de todo ella no aspiraba a tener una relación, un esposo e incluso una familia. Su destino era otro, además el amor era algo que no debia permitir, siempre perdía a los que amaba.
Zaid llegó hasta su mansión y para culminarlo todo, lo estaba esperando Alizze. Hizo su cara de desagrado, sabía que había problemas.
—¿Qué haces aquí?.—preguntó
—Tenía ganas de verte cariño, me tienes muy olvidada. Además de que Dasha se ha encargado de alejarnos de ti, se siente tu dueña.—respondió Alizze
—No es mi dueña, ella lo sabe. Ninguna de ustedes, no soy una mascota para que uses ese término.—le aclaraba Zaid
—Jamás me sentiría tu dueña, me encantas y la pasamos rico. Además no renunciaría a mis privilegios, viajes, coches, joyas y fiestas en lugares exclusivos en las mejores ciudades del mundo. No soy la única, Casandra y Olivia piensan lo mismo. Nosotros solo nos defendemos de Dasha, aunque sea tu favorita es una serpiente.—decía Alizze
—Si ya terminaste, ¿qué es lo que necesitas?.—preguntó Zaid directamente
—Pensaba en que Casandra, Olivia y yo viajáramos juntas para celebrar nuestro cumpleaños. Me refiero al de Casandra y el mío, también habíamos invitado a Dasha pero se rehúso. Textualmente nos dijo que ella no es igual a nosotras, entonces decidimos no invitarla.—respondió Alizze
—Me molesta todo esto, no deben tomarme a consideración. Hagan lo que quieran, llamen a Abdul y pidan lo que necesitan.—decía Zaid, realmente estaba molesto pero no con ellas, si no por la actitud de Marina(Cristin)
—Ya veo, entonces es verdad que hay una nueva, la número siete. Pero esta vez es diferente por lo que puedo observar, como amigos que somos. Nosotras tres somos las menores de tus preocupaciones, pero Dasha puede hacer cosas terribles. Porque ella está obsesionada por ti, no dudo que más de una vez haya planeado nuestra muerte. Más no lo hizo, porque sabe el lugar que tenía contigo. Ella es la esclava perfecta, mientras que nosotros te vemos como un cliente, amigo y como lo has dicho nuestra estabilidad económica.—decía Alizze
—Solo hay una mujer en mi vida, y esa fue mi esposa. Como lo dices bien, ustedes son solo mis proveedoras. Hablaré con Dasha.—respondió Zaid mientras respiraba hondo, en eso Alizze se acercó para besarlo.
—Hazlo cariño, y en cuanto a la número siete. No dudo que sea la última, tus ojos no mienten, jamás, pero debo decir que hoy en tu mirada hay un brillo especial, bien me marcho. Por favor antes de terminar nuestra sociedad anticípanos para ver otros prospectos.—se despidió Alizze para seguir su camino
Zaid estaba inquieto con esa conversación, definitivamente no tenía responsabilidad afectiva con ellas y viceversa. Pero Dasha sí, su historia con ella era diferente. Ella era virgen cuando se la ofrecieron a cambio de dinero, aunque él solo quería protegerla. Terminó seduciéndolo, y por ende él la llevó a su cama, por eso sentía mayor responsabilidad por ella.
—Zeus envía por Dasha necesito hablar con ella, y envíale un brazalete de diamantes a Marina. Necesito disculparme por mi pésima actitud.—ordenaba Zaid
—Enseguida Jefe.—respondió Zeus
Marina estaba moviendo cosas en el, que se encontraba sepultadas muy en el fondo. Tenía miedo de destruir todo lo que había construido, además de perder su tranquilidad. Pero quería estar con Marina a cualquier precio.
Cristin y su tía encontraron el amor de hombres que supieron valorarlas y amarlas incondicionalmente.
Gael y Yaman a quienes sanaran su corazón del dolor.
Felicidades Nay un final maravilloso 👏🏻✨💖😘