Simón Calzone un joven menospreciado por sus pares, sufre continúas humillaciones y desprecios. Tiene un solo objetivo, ser millonario. Conoce a uno idéntico a él que posee todo lo que él anhela quien cansado por esa vida cambia de lugar con él. ¿Se arrepentirá Simón por su decisión?. Dejar a sus padres por ser rico. ¿Quién es ese joven que tanto se lo parece? ¿Qué le hizo desear ser alguien común?
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11-¿Qué les pasa?
SIMONE CALZONE.
Siento que me agarran llevándome y es Simone.
-¿Qué crees que haces?. Me dice sería. (Este quiere morir antes de tiempo, piensa molesta)
-Dejare claras de una vez por todas con ese HDP. Le respondo ofuscado.
-Con la ira no logras nada bueno. Me dice. (Solo los tontos se lanzan con bronca y terminan en el piso, piensa)
-Mira quien lo dice... Me dijo Will lo temperamental que eres. Le digo.
"Le gusta hablar a ese Will, ya aclarare con él", piensa Simone.
-SE VAN A BESAR O PELEAMOS. Se aproximó Raúl a hablarnos y se alejo con cara de burla.
-Y quería saber si podemos cambiar. Le susurro a Simone que veo contrae la cara y niega con la cabeza.
-Esto tú lo buscaste. Me responde.
-En serio... No me ayudas. Le digo, al borde del colapso.
-Tengo que reunirme con el estilista... No sé verá bien que tenga un ojo morado. Me responde.
-No mames... Ahora vienes hacerte él que liga... Justo vas a mentir que te pegan. Le digo indignado a Simone.
-Aprende a defenderte y asumir las consecuencias. Me responde.
"No estaré siempre para cubrirte las espaldas", piensa Simone.
-¡Se te acortó la ch*t@!. Le grito furioso, sacado sin medir mis palabras.
-¡¿Qué?!. Pregunta, abriendo los ojos grandes.
-Que no tenes huevos... Te achicas... Te acobardas... Huy cuidado no le marquen la cara. Me burló y veo la llama en los ojos de Simone que me tomo del cuello.
-No necesito huevos para romperte el cuello... Discúlpate ya, si no quieres conocer mi lado malo. Me dice con los dientes apretados.
-Hey... Hey... Chicos calma. Aparece Leo separandonos y empuja a Simone apoyando su mano en su pecho y a mi.
-¿Qué les pasa?... Estaban bien. Dice separandonos a qué no nos golpeemos.
-ESTE IMBECIL QUE TIRA LA PIEDRA Y ESCONDE LA MANO. Dice furiosa Simone.
-CLARO TU TE VAS A ESCONDER EN TU CASTILLO Y A QUE A LO DEMAS LES PARTA UN RAYO. Le digo molesto.
-ERES UN COBARDE ... A QUIEN SE LE ACORTO LA CH*T* ES A OTRO. Dice señalando furiosa.
-ESTOY ARTO DE TU LLORISQUEO QUE NO SABES TU LUGAR... QUE TIENES TODO, PERO NO ES SUFICIENTE Y ME QUIERES SACAR A MI FAMILIA. Le grito molesto.
-QUE NO SEPAS APRECIAR A TUS PADRES ES TU PROBLEMA... Y QUE SE SIENTAN MAS QUERIDOS POR MI NO ES MI CULPA. Me responde.
-YA NO QUIERO SABER NADA DE TI... NO TE NECESITO. Le respondo molesto.
-COMO QUIERAS. Respondió y justo llegó Will que la agarro, susurrándole en el oido. Ella lo miro sería y veo que cierra sus manos en forma de puño ingresando al salón.
En eso suena mi celular.
📱Hola hijo... Le dan el alta a tu madre. Me avisa mi padre.
📱Hola pa... Voy a ayudarte. Le digo.
📱Tranquilo... Estamos bien... Solo te aviso que vamos a estar en casa. Me dice mi padre y corta.
-Le dieron el alta a mamá. Le aviso a Leo.
-Necesitan que se les traslade. Consulta Will.
-Puedes ir a llevarlos a la casa... Te lo voy agradecer. Le pido.
-Si... Deja que le diga a Simone. Responde.
Miro que se le aproxima donde ella está sentada con la mirada fija y solo asiente con la cabeza.
Aprovecho a llamar a mi padre.
📱PA. Digo ni bien atiende.
📱Mi amigo Will pasará a buscarlos y los lleva a casa. Le aviso.
📱No tenía que molestarse. Dice mi padre.
📱Esperen... No gasten en transporte. Le digo.
📱Bueno. Me responde y corta.
Justo llegó el profesor y nos llamo a todos que nos acomodemos en nuestros lugares.
No me podía concentrar preocupado que me tenía que encontrar con Raúl.
"Debí quedarme callado", me cacheteaba nervioso.
No podía dejar de mover la rodilla parecía que tenía un ataque en ese momento.
-Jamas pensé ver cuándo te enfrentes a Raúl... Aunque creía que lo hacías... Pero se ve que fue Simón dos... Y ¿Qué fue todo eso entre ustedes?. Murmuró Leo.
-Estoy cagado. Le respondo por lo bajo.
-Eso por dejarte llevar por la calentura del momento. Me dice Leo.
-Es un idiota. Comento.
-¿Quién Raúl o Simone?. Me pregunta.
-Raúl es un idiota... Con Simone debo disculparme... Me agarre con el sin razón... Tiene razón... Debo enfrentar las consecuencias. Le murmuró a Leo.
-Podemos armar un torneo con tu doble y su amigo. Me dice.
-Escuchas lo que te digo... Estoy a punto de morir... Debo disculparme con Simone y piensas en el juego de la play. Le digo indignado.
-Cucaracha... Te escondes. Aparece Raúl sentándose a mi lado.
-No me escondo. Le respondo.
-Que opinas de dejar el encuentro dentro de una semana... Te liberas de tu cabestrillo... Así estarás más a gusto y no corres el riesgo de lesionar peor tu hombro. Escucho la voz de Simone atrás de él cerca de su oreja.
Raúl se gira mirándolo serio a los ojos, frunce los labios.
-No conseguirá un pasaporte a otro país... Y me aseguraré que este presente en el lugar que decidas romperle los huesos. Le dice y la miro con bronca, de verdad está gozando esto.
Raúl pega con su puño el banco y asiente.
-Que sea así... Lo veré en una semana... Si no aparece se donde buscarlo. Dijo incorporándose arrastrando la silla para irse.
-¿Pero qué haces?. Le pregunto con la voz ahogada.
-No te preocupes... Te enseñaré lo básico en una semana... Eres hombre saca tu tosterona a flote... Deje que mi temperamento gane hace un momento.Me dice sería.
-Disculpame ... No debí decir eso. Le digo.
-Estamos bien. Me pregunta.
-Si. Le respondo.
-Eso... Así me gusta verlos. Dice Leo.
-Simón. Aparece contorneandose Niki, y notó que le relojea con la mirada a Simone.
Me usa de escusa para enseñarse a Simone, le coquetea a ella creyendo que es un hombre, bueno es lo que debe aparentar.
-Si. Le respondo serio al darme cuenta de todo.
-¿A qué hora nos encontramos?... Así vamos juntos. Me dice.
-Me avisaron que le dieron el alta a mi madre así que va a estar en casa y debo acompañarla. Le aviso serio.
-Podriamos estudiar en tu casa... Y si tus amigos se pueden unir. Dijo y ahí estaba el chicle del asunto.
-Lo siento Niki... En otra ocasión... Debo atender unos trámites. Le digo y me muerdo la mejilla al tener que negarme a la chica que me gusta pero ella solo tiene ojos para otro.
-Ok... Avisame... Podemos armar un grupo de estudios. Dice al despedirse.
-¿Qué fue eso man?... La tenías servida en bandeja. Me dice Leo.
-Se fijo en Simón... No en mi. Le digo.
-En mi. Dice sorprendida Simone.
-Si... No te diste cuenta como te coqueteaba. Le digo.
-No preste atención. Me dice.
-Debes ligar mucho. Le dice Leo.
-No como Simón. Dice con una mueca y se matan de la risa entre los.
-No se burlen... No es gracioso. Le digo y notó que Leo le miró de un modo a Simone y luego sacudió la cabeza nervioso.
-Me acompañas Leo. Le digo una vez que terminó la clase.
-Ya vino Will... Nos vemos... Te mensajeo. Me dice Simone y pasa la mano saludando a Leo y a mi.
-¿Te pasa algo?. Le pregunto a Leo al ver que suspira frunciendo el ceño.
-No... Nada. Responde carraspeando.
-Vamos al bufet antes de que deba ir a mi trabajo. Le aviso, debía seguir aparentando mi rutina como si nada.
-Si... Comamos un pebete. Me sugiere y lo noto pensativo.
-Ya man... Me vas a decir que te pasa. Le insisto.
El se inclina hacia adelante como para hablarme al oido.
-SIMON. Aparece Sirina.
-Hola. La saludo.
-Te quería invitar en persona a la fiesta... Pasa por mi el viernes a las veinte en mi casa... Así vamos juntos. Me dice entregándome un papel con su dirección.
-Oh... Bueno... Y puede ir Leo. Le pregunto.
-Yo no puedo... Tengo ese día un compromiso. Aclara Leo.
-Quedamos así... Nos vemos el Viernes. Le digo a Sirina que sonríe contenta y se va con sus amigas.
-Ese día de la fiesta... ¿Eras tú o tú gemelo que se fue conmigo?. Me pregunta Leo.
-He...¿ Fiesta?. Le pregunto y veo que el se golpea la frente con su mano.
-Ese día a Sirina le gustó tu baile con el tema que nos gusta... Fue épico... Con dobles saltos y acrobacias . Le quedo mirando desconcertado.
-Era Simón dos. Dice en un suspiro al mirarme a los ojos.
Me quedé helado, contraje la cara, levantando la mano sin saber que responder.
-Vas a tener que aprender unos pasos... Pedile a Simón dos que te los enseñe... O de lo contrario estás frito con Sirina. Me dice Leo con una mueca en los labios.
-Hay algún video de ese día... Siempre se que suben imágenes de sus fiestas. Le digo a Leo que saca su celular y empieza a buscar.
-Ah... Si... Mira... Justo destacaron esa parte. Me dice enseñándome el vídeo y veo como bailo Simone, la destreza en sus movimientos, me tapo la cara del asombro.
-No puede ser. Expreso asombrado.
-Cuentame como es la casa de Simone... ¿Por qué aceptaste cambiar de lugar?... ¿Vive mejor que tú?... ¿Es verdad que tiene un castillo?. Me pregunto Leo.
-No te puedo decir... Me hicieron firmar un contrato de confidencialidad... No quiere que llegue a oídos de la prensa ni de sus padres. Le digo.
-Oh vamos... Somos amigos de años... A quien voy a decir. Me dice.
-Solo te diré que tienen su propia pista de aterrizaje para su Jet privado e incluso helicóptero. Le susurro.
-¡¿Qué?!. Exclama Leo y estoy seguro que en su cabeza ya están trabajando cifras calculando los millones.
-Si es así... Simón debería estar bajo diez guardaespaldas y un instituto de esos de ricachónes aunque la sede es privada Pero no para ese nivel. Exclamó Leo asombrado.
-No quiere llamar la atención... Además aquí nadie conoce su verdadera posición por lo que se maneja solo con Will. Le comento.
-Asi que es su guardaespaldas... Pero se los ve muy compinches... Cómo que no hay esa brecha de posiciones. Me dice Leo.
-Es su único amigo... Además de trabajar para él. Le respondo.
-Debe ser solitaria su vida... Si yo no te conociera... No tendría ningún amigo... Mi padre no le agrada que me junte con nadie... Y no me atraen los de mi misma posición son solo interesados y sus charlas son vacías y sin sentido solo hablan del valor de la zapatilla que llevan puesta y dónde volaron solo para cenar... Y siempre se burlan de los que no tienen... Sin ir más lejos está de ejemplo Raúl. Me dice Leo pensativo.
-Bueno nos vemos. Me despido al ver la hora para ir al minisúper.
Todo el tiempo pensé la manera de abordar el tema con mi madre sobre el día que nací, por lo que ni bien concluí mi turno me fui a casa, me tocó caminar Simone dejo la bicicleta, no se animo a usarla.
-Hola ma. La saludo ni bien llegó y la veo reposando como nunca.
-Hola tesoro... ¿Cómo te fue?. Me preguntó.
-Bien... ¿Qué cuentas?. Le consulto.
-Tu amigo contrato una rotisería para que me traigan la comida hecha y que no me preocupe en cocinar... Por más que le dije que no debía hacerlo, él insistió y dijo que era de una tia que lo haría con gusto y sin cargo. Me cuenta.
-Ma... Quería preguntarte sobre el día en que naci... Nunca me contaste como fue que llegué al mundo. Le digo y justo ingresa mi padre que queda mirando tieso al escuchar mi pregunta.
-Ya sabes... Ya te explico tu padre como se hacen y llegan los bebés. Responde nerviosa.
-Quiero que me cuentes como fue que yo nací... A qué hora te dió las contracciones... Que sentiste cuando me viste por primera vez... Cómo era el día si llovió o no. Le consulto y veo que ella le mira a mi padre como pidiéndole ayuda.
-Tu madre no puede contarte... Porque no recuerda... Ella sufrió un accidente cuando estaba embarazada de ti... Trabajaba en la casa de una joven pareja y cayó por las escaleras... Cómo pasó en su casa ellos se ocuparon de los gastos medicos e indemnizaron por lo ocurrido...
Me contó mi padre y me quedé helado.
-¿Cómo era el apellido de esa familia?. Le pregunto.
-No se... Tu madre sabía... Pero por la caída sufrió amnesia. Me cuenta mi padre.
-Y ¿dónde te atendieron?... Debe tener registros... Saber quienes estuvieron. Le digo.
-Deja que me fije en los papeles... Mira en mi caja. Le indica mi madre.
-Bueno querida. Le dice mi padre y se va a ver.
No podía creer lo que se me revelaba, así que así fue como paso, ella tuvo un accidente en su trabajo.