Sus manos se deslizan a mi cintura acercándome a él dejándole paso a su lengua escapándosele un gemido de sus labios derritiéndome aún más.
Mis manos se deslizan por su pelo tirando de sus mechones disfrutando del beso sabiendo que una vez que nos separemos pueda arrepentirse.
Si pensaba que ya me atraía un poco Josh ahora sé que sus labios me roban cada uno de mis suspiros.
Sus dulces labios que parece que son de miel me roban el aliento, me roban el alma y estoy dispuesta entregarle hasta lo último de mi resquicio de mi persona.
¡Había sido yo la que había dado el paso!
¡Yo le había besado!
Las tan conocidas mariposas revolotean como locas dentro de mi estómago y también puedo comprobar que me quedaba corta cuando las definía en mis historias, son mucho más intensas que hace que sientas escalofríos por todo tu cuerpo.
La magia se termina rompiendo cuando se separa como si le quemara, dando pasos hacia atrás hasta chocarse con la mesa de la cocina.
Ambos respiramos agitadamente asimilando aún lo que acababa de pasar, sus ojos me observan con gran sorpresa sobre todo cuando me acerco pegándome de nuevo a él.
Tomo de nuevo la iniciativa dándole un beso corto observándolo para comprobar si se va a volver a alejar de mí.
Aprieta ambas manos en la mesa hasta dejarse los nudillos blancos ladeando su rostro soltando un gruñido para volver a rodearme con sus brazos y chocar sus labios con los míos.
De nuevo nuestros labios como nuestras lenguas juegan una batalla en la que se exploran hasta robarnos cada mota de oxígeno, pero no dura tanto como me hubiera gustado porque se arrepiente apartándose de mí.
-Detente Amanda no podemos – extiende sus manos antes de darme la espalda moviéndose sus hombros al ritmo acelerado de su respiración. - ¡Joder! - lleva ambas manos temblorosas a su pelo revolviéndoselo aún más, frustrado.
Agacho mi mirada llevándome mis dedos a mis labios sintiéndolos hinchados extrañando sus labios.
-Ha sido sin duda una falta de respeto por mi parte besarte perdóname Amanda, no tuve que hacerlo ahora pasé un límite que nunca tuvo que existir... - su tono de voz demostraba lo arrepentido que estaba y no iba a mentir, dolía.
A pesar de sentir un pinchazo en mi pecho por sus palabras me acerco a él apoyando mi frente en su hombro sintiendo como al instante se tensa apartándose por tercera vez de mí.
-Es mejor que te vayas... - se dirige a las escaleras dispuesto a olvidar todo esto.
Pero yo no quiero que olvide lo que acaba de pasar y mucho menos que me aleje de él...
-No te vayas por favor... - le suplico acercándome rápido a él antes de que suba el primer escalón.
Se da la vuelta bruscamente enfrentándome endureciendo su gesto hacia mí.
-Esto no puede volver a pasar, ¿me escuchas? Eres solo una adolescente con las hormonas alborotadas que no sabe lo que quiere – entreabro mis labios sorprendida por sus palabras viendo cómo se arrepiente al momento de decirlas cuando suelta una bocanada brusca. - ¡Joder! Se supone que yo soy el adulto aquí...
Esta vez soy yo la que levanto mi mirada hacia él mirándolo molesta por sus palabras.
-¡Soy bastante madura para mi edad! ¡Se lo que quiero! - intento controlar mi genio, pero mis palabras salen en forma de grito.
-Perdóname en realidad no quería decir eso solo... - niega con su cabeza. - Esto está mal Amanda no puede volver a pasar – se lleva sus dedos a su rostro.
-¿Por qué no debería volver a pasar? No hemos hecho nada malo... ¿Acaso no te ha gustado? Porque a mí sí y mucho Josh...
¿Acaso no sentía la gran conexión que sentíamos ambos cuando estábamos cerca?
-¡Porque no! ¡Porque te bese y no puedo volver a hacerlo!
-¡Ambos queríamos! - alzo aún más mi voz.
Se queda de piedra ante mis palabras viendo aparecer confusión en sus ojos.
-¿Qué acabas de decir? - muerdo mi mejilla interna apretando mis manos en mi ropa.
-Ambos queríamos, pero yo deseaba besarte desde hace unos días... ¿Acaso tu no? - normalmente me costaba expresarme tan sinceramente con los chicos de esta manera porque nunca había sentido lo que siento con él.
Niega de nuevo con su cabeza como si quisiera decirme algo, pero decide guardárselo para sí mismo.
-Que quiera no significa que deba hacerlo Amanda...
-No vuelvas a decirme que está mal lo que hemos hecho porque no es verdad...
-¿Quieres que te de un motivo de porque está mal lo que hicimos? - me suelta frustrado y cabreado consigo mismo a la vez. - Porque hace poco tiempo eras la novia de mi hijo, porque tienes su edad, porque soy tu jefe y porque te multiplico en edad, ¡Por eso está mal Amanda! - agacho mi mirada moviendo mis dedos de los pies nerviosa y triste.
-Adam y yo ya no estamos juntos y si te sirve de algo a mí no me importa la edad que tengas ni tampoco que estemos trabajando juntos si eso te supone un problema ahora mismo dimito – alzo mi mirada viendo como sus labios se entreabren dispuesto a negarse, le interrumpo. - Si te bese es porque te deseo y no por puro capricho porque seas el padre de mi ex...
Suelta algo entre susurros maldiciendo que no llego a entender del todo.
-No digas nada más por favor... - me suplica intentando seguir manteniendo la distancia entre nosotros como si estuviera luchando consigo mismo internamente. - Esto no va a volver a suceder y quiero que respetes mí decisión... - me negaba a darle la razón y mucho menos tirar la toalla tan fácilmente.
-Me pides que no diga nada más porque sabes que es cierto, quiero pensar que tú también deseabas lo mismo que yo y por eso me besaste de vuelta – trago fuerte saliva dando un paso hacia él.
Mis labios no habían tenido suficiente de los suyos y demonios... las lágrimas comenzaban a escocer en mis ojos a punto de ser derramadas.
Josh me vuelve a rechazar una vez más subiendo un escalón observándome aún.
-No puedo... eres un pecado y por eso estas prohibida para mi – su mirada por unos segundos se suaviza cuando ve como una lagrima se desliza por mi rostro que aparta con su dedo pulgar cuando posa su mano en mi mejilla.
Solo con ese simple roce mi corazón brinca por eso me aferro a ese mínimo gesto apoyando mi mejilla en su mano antes de que esta se aleje de mí y vuelva a sentir esa zona fría y vacía.
-Tengo que guardarme mis deseos bajo llave porque sabes tanto tú como yo que esto está mal pequeña Mandí... - sus palabras ocasionan estragos en mí.
-En ningún momento que te bese me sentí mal – tiro de su muñeca cuando la rodeo pegándome a su cuerpo de nuevo con una rapidez que no se espera y antes de que suba otro escalón beso sus labios castamente. - Al revés siento que me llevas al cielo nunca había sentido una cosa así con nadie...
-Amanda... - me advierte.
-Se que a ojos de los demás esto es una locura... - asiente dándome la razón.
-Por eso no puede volver a pasar...
-Pero yo si quiero, los demás me dan igual – observo sus ojos antes de añadir. - Si quiero pecar por primera vez quiero que sea contigo... quiero que seas mi pecado prohibido...
Su mirada automáticamente se vuelve intensa y sus ojos chispean cuando cierto brillo aparece en ellos.
-¡No! ¡No! Amanda, ¿Es que no comprendes que esto es peor que estar encerrado en un laberinto sin salida? Es más complicado de lo que tú ves, si fueras otra chica te hubiera conocido de otra manera y no como la novia de mi hijo y siendo de otra edad no estaría pensando nada te hubiera llevado a cenar y en esa primera cita te hubiera llevado a mi cama, pero no es así por eso no puede pasar nada más entre nosotros así que te pido por favor que olvides esto como si nunca hubiera pasado no compliques más las cosas... - doy un paso hacia atrás sintiendo sus palabras como un latigazo mientras que él me da la espalda comenzando a subir los escalones.
Me quedo congelada por unos segundos en el sitio hasta que veo que se dirige ya arriba hacia su habitación.
-Antes de haber terminado con Adam empecé a sentir algo por ti y me sentía mal por ello, pero ahora que no tengo a nadie que me ate no, lo que siento por ti cuando te tengo cerca puede conmigo es mucho más grande mi mente como mi corazón dejaron de decirme que estaba mal y si te preocupa Adam lo entiendo, pero yo estoy dispuesta a dejarme llevar para ver hasta donde llegamos, ¿Y tú? ¿Estás dispuesto a dejarte llevar por una vez por lo que sientes y no por lo que crees que es correcto? - un pequeño silencio se forma entre nosotros por unos segundos.
-Necesito estar solo ahora mismo... - es lo único que me dice desapareciendo por el largo pasillo dejándome sin una respuesta ante mi pregunta.
Me apoyo en la pared soltando un gran suspiro luchando por no llorar.
¿Esto es lo que se sentía cuando te rompían el corazón por primera vez?
Su decisión ya está más que tomada cuando ha decidido no responderme y es mantenerse alejado de mi como también olvidarse de lo que paso en su salón.
He sido una estúpida si por un momento creí que él se iba a lanzar de la misma manera que lo he hecho yo.
Recojo mis cosas y observo por última vez las escaleras teniendo la esperanza de que se arrepienta de lo que ha dicho y baje esas escaleras, pero eso no pasara, ambos sabemos que esto llego a su fin, aunque mirándolo bien nunca termino teniendo un comienzo.
De vuelta a casa no dejo de pensar en todas las sensaciones que sentí cuando sus labios se apoderaron de los míos como también mis labios no olvidan los suyos sintiendo un cosquilleo en ellos pidiéndome más.
Daria lo que fuera por volverlos a sentir, aunque fuera por una última vez...
Lo que si no olvidara nunca mi corazón es la sensación de su rechazo cada vez que se alejaba de mí.
Cuando abro la puerta de mi casa solo tengo ganas de meterme en la cama y no salir en una semana por lo menos, ahora que estoy de vacaciones eso no me supondría un problema, pero al sentir movimiento tengo que poner la mejor cara que puedo para no preocupar a nadie.
-¿Amanda? ¿Eres tú cariño? - mi madre se asoma viendo como aparece una gran sonrisa en sus labios. - Pensé que ibas a venir algo tarde, ¿Te trajo Josh? ¿Cómo fue con la decoración de Navidad?
Me dirijo a la cocina sonriéndola.
-Quedo muy bonito mama y no, me vine en la bicicleta las calles están mejor...
-Me hubiera encantado verlo, ¿le gusto la tarta que le llevaste? - observo a mi madre dándome cuenta que me había olvidado por completo de eso.
-Sí le gusto tanto que no creo que le dure más de dos días – mi madre vuelve a sonreír.
-Ese hombre necesita mucha compañía no me quiero imaginar lo solo que se sentirá estas navidades y más si su hijo no está con él porque lo más importante para un padre o una madre son nuestros hijos cariño... - sus palabras duelen, aunque no vayan con esa intención, pero el rechazo de Josh aún sigue muy presente.
-Así es mama no te equivocas en nada – le sonrió, aunque detrás de esa sonrisa escondo todo. - Iré a darme una ducha y lo más seguro que me dormiré un rato, luego tengo que hacer algunas tareas que nos mandaron para las vacaciones...
-¿No tienes hambre mi vida? - me detiene mi madre cuando voy hacia mi habitación.
-No mama, gracias...
Una vez en mi habitación me dejo caer en mi cama volviendo a recordar todo lo sucedido desde que me dirigí a la casa de Josh, cuando se quedó en la misma cama que yo porque se lo pedí, el primer beso, luego el segundo, pienso tanto que no me doy cuenta del paso del tiempo.
Decido abrir mi portátil para comenzar a escribir todo trasformando mis sentimientos, mis palabras y las palabras de Josh en guiones en los que los protagonistas de mi novela están pasando por un bache porque la chica quiere darle todo mientras que el chico duda por no querer arriesgarse y no abrir su corazón hacia ella.
Tras plasmar todos mis sentimientos nuevas preguntas comienzan a llegar a mi mente como:
¿Por qué no pude sentir esas cosas por Adam?
¿Por qué tuve que fijarme precisamente en Josh?
Tantas preguntas hacen que pase por varias emociones, como rabia, tristeza, confusión y pena.
Mi única manera de sacar todo era a través de las teclas de mi portátil porque no tenía a nadie a la que poder contar como me sentía, no podía hablar a mi mejor amiga y decirle oye Ariel, ¿sabes qué? No te dije, pero empieza a gustarme el padre de mi ex, si su padre, un tipo que me saca unos cuantos años que está mal visto por esta sociedad de mierda.
¿Y sabes lo mejor de todo? Que me deje llevar y lo bese deseando hacerlo mil veces más y no me sentía para nada culpable por eso.
Me causaba rabia como también el hecho de no poder sacármelo de la cabeza por más que intentará olvidarlo.
Como dije me la pase encerrada en mi habitación metida en mi cama pasando el tiempo leyendo o escribiendo hasta que llego un nuevo día, cuando decidí bajar tras haber pasado la madrugada en vela por él libro que estaba leyendo que me recordaba a Josh por la situación de los protagonistas y por qué seguía sin poder salir de mi mente y no pude conciliar el sueño como me hubiera gustado.
-Vaya, buenos días princesa durmiente por un momento pensé que estarías un día más encerrada en esa torre que llamamos tu habitación - pego un pequeño brinco cuando escucho la voz de mama sin haberme dado cuenta que estaba en la isla de la cocina apoyada leyendo con una taza de café en su mano libre.
-Buenos días mama... - restriego mis ojos en un intento por espabilar antes de sacar el zumo de la nevera.
-¿Estas bien? - me pregunta a lo que asiento sin contestarle. - Iba a subir para preguntarte cariño si hoy me podrías acompañar a la floristería aún tengo que organizar un par de cosas – alzo mi mirada con el vaso de zumo en mi mano.
Pasar tiempo en la floristería me mantendría la mente ocupada y con mi madre alrededor había una posibilidad de que dejara de pensar en Josh un par de horas.
Entonces en ese momento al ver el rostro de mi madre que demostraba cansancio se me ocurre algo.
-¿Y porque no mejor te tomas tu hoy el día libre y voy yo a la floristería? - le prepongo sin pensar dando el primer trago a mi zumo.
Mi madre me mira con curiosidad antes de mostrarme una de sus sonrisas.
-¿De verdad? - el entusiasmo en su voz lo dice todo y es que ella tiene un descanso bien merecido. - No quiero dejarte todo el trabajo cariño... - niego con mi cabeza al momento.
-No te preocupes por mi mama te mereces descansar después de tener tanto trabajo sin parar un solo día déjame compensarte todo de alguna manera por lo que haces por nosotros de... - mi madre me interrumpe cuando posa ambas manos en mi rostro y comienza a repartir besos por toda mi cara.
-Gracias mi vida gracias no sabes lo agradecida que estoy por eso – deja un último beso en mi mejilla antes de apartarse. - Solo por hoy no sería justo que me respaldaras todos los días porque te conozco Amanda – sonrío. - Tu también te mereces tu tiempo en estas vacaciones y no todo tiene que ser trabajo porque tu novio no este no significa que estes encerrada en casa todos los días - mi sonrisa se borra automáticamente en cuanto lo nombra.
-Si mama tienes razón saldré algunos días con Ariel no te preocupes – parece que eso la deja más tranquila ya que asiente con su cabeza.
-Tienes solo unos minutos para cambiarte – asiento bebiéndome lo que queda de mi zumo corriendo de nuevo a mi habitación.
El silencio que había en la floristería era un respiro para mí como también tener mucho trabajo encima sin parar un solo segundo.
Desde los cinco minutos que había abierto la floristería no había parado de llegar clientes encargando miles de ramos diferentes y otros para recoger los que ya habían encargado.
Precisamente uno de los clientes entro a la floristería algo nervioso porque no sabía muy bien que ramo regalas a su novia a la cual iba a pedirle matrimonio.
Su cara era de puro pánico y solo por el hecho de no querer fastidiar el momento me enternecía.
-No sé exactamente cuáles flores serían las mejores para estas ocasiones, no sé si es mejor que el ramo sea de el mismo color o combinarlo con flores diferentes... - en algunas palabras se trababa y llegaba a tartamudear sin dejar de tirar de la corbata que rodeaba su cuello.
-Cada flor significa una cosa yo pienso que el ramo que te dije le gustara y es perfecto para la ocasión, créeme le encantara – intento trasmitirle calma a través de mi sonrisa. - ¿Te gustaría escribirle una pequeña dedicatoria en la tarjeta? - le propongo.
Duda por unos segundos, pero al final termina asintiendo por lo tanto cojo una tarjeta de color y un bolígrafo esperando unos segundos hasta que el comienza a decirme lo que tengo que escribir.
-Listo ahora solo falta que me dejes tus datos para poder llamarte para cuando lo tenga preparado y te dé tiempo para recogerlo antes de la hora – vuelve a asentir.
-Guillermo – comienzo a escribir de nuevo en el folio de datos.
-Amanda – me presento cuando le doy la tarjeta de la floristería donde estaba el número de teléfono para que supiera que era yo a la hora de llamarlo más tarde.
Comienza a decirme otros datos suyos como también lo que llevara el ramo para poner al final el precio de este.
-Que tenga buena tarde – me despido de él cuando esta todo escuchando las campanitas de la puerta al salir de la tienda.
Vuelvo con mi trabajo preparando los ramos siguientes de los clientes que están por delante de él cuando solo pasan un par de minutos y escucho como las campanitas de la puerta de entrada vuelven a sonar avisando de un nuevo cliente.
-Buenas tardes, ¿Desea algo? - le digo a quien haya entrado sin levantar aun mi cabeza del ramo que tengo delante dándole la espalda al mostrador.
-Puede ser... ya que aquí trabaja una chica bastante bella con la que me gustaría que se convirtiera en mi pecado prohibido...
Mi corazón comienza a bombear demasiado rápido al escuchar esa voz que se había metido tan profundamente dentro de mí en tan poco tiempo...
Me doy la vuelta bruscamente encontrándome con esos ojos azules tan penetrantes que desde la distancia en la que estábamos no dejaban de observarme.
Dios mío...
Él está aquí...
Hecha un rápido vistazo a su alrededor contemplando cada detalle de la floristería antes de posar sus ojos de nuevo en mí.
Mis ojos le escanean viendo cómo se había puesto esta vez ropa normal llevando unos jeans que se ajustaban perfectamente a sus piernas bien trabajas acompañado de una camiseta blanca que marcaba su pecho y sus brazos trabajados a la tela.
Automáticamente mi boca se seca impidiendo que pueda tragar saliva sintiendo una molestia.
-Quiero que seas mi pecado prohibido porque no importaría quemarme si con eso vuelvo a probar tus labios... - se acerca todo lo que puede al mostrador mostrando una tranquilidad absoluta asegurándose que no entra nadie más a la floristería cuando mira por encima de su hombro.
Entonces entiendo porque hace ese gesto y es que se piensa que no estoy sola...
Nos observamos por segundos, tal vez por minutos, pero es que la sorpresa de su visita es tan grande que parece que no tengo lengua ya que las palabras no me salen solo puedo observarlo sin dejar de sentir que mi corazón va a salir disparado de mi pecho.
-¿Que? - suelto parpadeando varias veces. - Estas fatal – comienzo a reírme al darme cuenta del peso de sus palabras.
Josh me devuelve la sonrisa, eso hace que tenga que controlarme para no subirme sobre el mostrador y besarlo.
-¿Estás sola? - me pregunta echando una mirada al almacén de atrás.
Asiento despacio con mi cabeza viendo como rodea el mostrador acercándose a mí.
-Sabes que esto es una locura, ¿no? La mayor locura que cometeré en toda mi vida – suelta una pequeña carcajada como si él tampoco se lo creyera de lo que esta apunto de hacer.
-Si te consuela también será la mayor locura que cometeré en mi vida – mi risa acompaña la suya.
-Sigo pensando que esto está mal, pero lo que siento pesa más - sigue acercándose despacio a mi como cual animal se prepara para cazar a su presa.
-Lo se me pasa lo mismo... - mi respiración se atasca cuando le tengo más de cerca y mis mariposas que habían estado hasta ahora dormidas se despiertan de sopetón.
-Pero besarte se sintió demasiado bien... - sonrió al escucharle.
-Demasiado bien... - le sigo.
-Eres la mujer más hermosa que he visto desde que tengo uso de razón... - su mano se posa en mi mejilla con tanta delicadeza que es como si tuviera miedo de que me rompiera o pudiera desaparecer.
-Tu eres el hombre más hermoso y atractivo que he visto...
Mis palabras mueren en sus labios cuando su boca reclama la mía, el primer roce es delicado, lleno de cariño y suavidad.
Como si nuestras bocas se sintieran comodas, como si supieran que ese era su lugar, como si ese simple gesto fuera una continuación natural de su cercanía.
Un beso cálido nunca me supo tan bien siendo un reflejo de la confianza que habíamos creado juntos en tan poco tiempo.
Mis manos se posan suavemente en su pecho mientras las de él rodean mi cintura con ternura y de nuevo delicadeza.
Nos separamos brevemente encontrándome con sus ojos azules que tanto me llenan compartiendo una sonrisa al mismo tiempo antes de unirnos nuevamente en un beso más profundo, más entregado.
Un beso que no busca él apresurarse, sino como si quisiera saborear y quedarse con cada recuerdo de nuestras bocas unidas, disfrutar de esa conexión que nos había unido en uno.
No tenemos prisa por llegar a más solo el deseo de estar cerca uno del otro, de compartir ese pequeño momento que reafirmara hasta donde vamos a llegar...
Un beso en el que nos decíamos todo sin necesidad de decirlo con palabras.
Un beso que tanto ansiaba por sentir como en mis libros y que no sabía que había anhelado tanto sin haberlo sentido nunca hasta ahora...
¿Que se vendrá ahora para esta ¿parejita? 😏
Para el próximo capítulo tenemos que llegar a los 310 👍🏻
Nos leemos pronto 🫶🏻
Mi Instagram donde podrán estar informadas de todo: @mishistoriascontadasenpapel
Amanda
Josh
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 28 Episodes
Comments
cecilia sosa
DEJEN SU ME GUSTA POR LO QUE MÁS QUIERAN!!! Nose ustedes, pero yo necesito más de esta historia… TENGAN COMPASIÓN POR MI!! 🙏🏼
No es solo algo que quiero. Es algo que necesito. En este momento mi ansiedad está a tope. Así que les suplico que dejen su me gusta… por favor!!🙏🏼
2024-12-09
17
Gala G. Hernandez
obviamente creó yo... pedir los me gusta no deberíamos estarlo haciendo, puesto que es una aplicación gratis y si leemos y estamos aquí es más que obvio que deberíamos dejarlo en pago a tan buena escritora que en mi opinión es la mejor, puesto que jamás nos deja las lecturas a medias oh sin actualizar por mucho tiempo.
Pero en fin... no olviden dejar el me gusta, apoyemos a nuestra escritora por favor!! 🙏🙏🙏🙏
2024-12-11
1
Belen Bustos
por Dios!!! lectoresssss!!!!! pongan me gusta que no cuesta nada!!!!!! y tenemos actualización rápido que esto está que ardeeee.. fuego puro!!!! 🔥🔥🔥den premios! voten!!!!!!!
Está semana mi voto va para los diablos querida Miriam xq como te digo siempre voto una semana a cada una... es mi regalo de nacimiento a la mini díabla ajajajaja
este capítulo mamasita!!! me elevó, me infarto.. me encantó!!! siempre superas mis expectativas!!! y eso que ambas novelas son de géneros totalmente diferentes... y sigues rompiendo mi cabeza con tus fabulosas novelas.. eso es ser una buena escritora!!!! OS felicito!!!!! 💝
2024-12-09
4