Magali agradecía que se encontraba encerrada en su oficina porque las lágrimas no dejaban de fluir, hicieron muchos sacrificios juntos y cada uno tuvo que renunciar a muchas cosas para criar a Dalila, debido a las finanzas no podían tener hijos propios, y ahora que Dalila tenía 17 años y se mudó con una tía lejana y con más recursos económicos para estudiar en la universidad, ella creía que finalmente podrían disfrutar de ser una pareja, sin embargo, su esposo le sale con esta descabellada propuesta.
-Supuse que finalmente tendríamos un tiempo para nosotros dos – Magali se dijo a sí misma cubriendo su hermoso rostro bañado en lágrimas
Desde la partida de Dalila, Magali sintió que habían mejorado mucho como pareja, las discusiones eran raras, llegaban fácilmente a entendimientos y se disculpaban cuando era necesario, ella suponía que tenía una relación muy sana, si bien era cierto que durante los dos últimos meses la actitud de David había cambiado un poco al punto de olvidar su aniversario, se lo atribuyó a que él se estaba esforzando mucho por ser ascendido a un cargo gerencial en el banco.
-Supongo que un poco de la chispa se apagó por un tiempo, pero siento que eso es normal en una relación tan larga como la nuestra – Se dijo a sí misma intentando comprender lo que ocurría con su esposo
Era difícil concentrarse en el trabajo, por eso a las once de la mañana salió de su oficina evitando a los empleados y regresó a su casa, no estaba de acuerdo con la propuesta de David y no la iba a aceptar.
-Nunca me había sentido tan indeseado en mi vida como en este momento – Dijo Magali con mucha tristeza
Magali se dio cuenta de que incluso que David le sugiriera un matrimonio abierto era un factor decisivo para ella y después de llorar durante horas, se dijo a sí misma que ese era el fin de su matrimonio
-Nunca he dado la impresión de que yo fuera el tipo de chica abierta a ese tipo de relación.
Magali observaba esta casa que con tanto esfuerzo habían comprado juntos, cada objeto y cada habitación estaba llena de hermosos recuerdos porque a pesar de todo lo que renunció fue feliz en ese lugar, el problema es que ahora se cuestionaba si había valido la pena, era muy lamentable, pero tenía amor propio y nunca aceptaría esa propuesta, y mientras David todavía se encontraba en su trabajo, decidió mudar sus cosas a la habitación de invitados.
- Nunca juzgaré a nadie por querer vivir ese tipo de vida, pero simplemente eso no es para mí – Se dijo a sí misma con mucha indignación.
Luego de terminar, Magali se dio cuenta de que tenía un problema y era que necesitaba cambiar la cerradura de la puerta de su habitación para evitar que David entrara, por desgracia ella no sabía hacerlo y pensó que necesitaba que alguien la ayudara, por lo general no hablaba con sus vecinos, pero esto era una emergencia, abrió la puerta y comenzó a caminar y debido a la hora no había nadie hasta que se encontró con un vecino al cual nunca había conocido.
-¿Sabes cambiar una cerradura? – Preguntó Magali
Daniel observó a la mujer que le hacía la pregunta y le pareció muy hermosa, aunque le llamó la atención la expresión de tristeza reflejada en su rostro, debía admitir que era la primera vez que la veía a pesar de que tenía 04 años viviendo en esta urbanización, por desgracia siempre trabajaba jornadas de más de 12 horas y no tenía tiempo para socializar y conocer a sus vecinos, observó la hora en su reloj y aunque tenía un poco de prisa porque debía hacer par de diligencias que hacer antes de su reunión con el investigador privado decidió ayudar a la mujer con su emergencia, ya que después de todo no se tardaría mucho tiempo en hacerlo
-Si sé cambiar una cerradura – Respondió Daniel
Magali, a pesar de su tristeza, observó el rostro de su vecino y estaba sorprendida de que fuera tan atractivo y que su voz sonara grave y a vez muy sensual
-Gracias por ayudarme – Dijo Magali esbozando una tímida sonrisa
Daniel buscó en su camioneta su caja de herramientas y la acompañó hasta su casa, la cual estaba ubicada a tres de la suya, le impresionó cuando entró en el lugar el orden que había por todo el sitio, tenía prisa, así que no perdió el tiempo, y fue hasta la habitación para cambiar la cerradura con gran destreza lo cual impresionó mucho a Magali porque comparado con David este hombre era más delgado y no estaba en forma, pero era muy hábil para arreglar las cosas de la casa y debía admitir que eso le gustaba mucho en un hombre.
-Listo – Dijo Daniel mientras hacía los últimos ajustes y le entregaba las llaves
Daniel observó las delicadas manos de la mujer y le llamó mucho la atención su color de esmalte de uñas de color negro.
-Que tengas un excelente día – Dijo Daniel a manera de despedida
-Nuevamente, muchas gracias ….. - Magali se sintió apenada porque se dio cuenta de que no sabía su nombre
-Soy Daniel Alcalá
-Muchas gracias Daniel, mi nombre es Magali Gálvez
Daniel se despidió de su vecina Magali y subió a su camioneta pensando en lo encantadora que era, pero luego se recordó de que a pesar de que tenía dudas sobre la fidelidad de Melina, seguía siendo un hombre casado.
-Daniel, veo que eres una persona muy puntual – Dijo el investigador privado
Daniel se sentía ansioso en este lugar y aún se preguntaba a sí mismo si estaba seguro de hacer esto, sin embargo, la duda lo estaba enloqueciendo.
-Siempre tengo respeto por el tiempo de las demás personas
El investigador privado era un policía retirado y por lo general investigaba este tipo de casos y eran muy solicitados sus servicios, la razón de que aceptara tan fácilmente trabajar para Daniel era debido a Braulio.
-¿Qué esperas obtener de esta investigación? – Preguntó el investigador privado
-Solo quiero saber la verdad sin importar que tan doloroso pueda resultar
-En ese caso necesito que me proporciones unos datos sobre tu esposa y luego te llamo en cuanto tenga resultados.
-¿Cree que pueda usar estas pruebas en un caso de divorcio?
-Si solo que no lo recomiendo porque vivimos en un estado sin culpa, es una pérdida de recursos y de tiempo y a tu esposa no le va a afectar más allá del prejuicio de las personas
-Me basta con eso – Dijo Daniel con amargura
David regresó a su oficina en el banco y estaba de pésimo humor porque a lo largo de su matrimonio había tenido aventuras ocasionales hasta que se involucró con Melina hace dos meses y debía admitir que esa mujer lo estaba enloqueciendo, no quería divorciarse de Magali, pero necesitaba experimentar esta relación con Melina sin la presión de que su esposa se enterara.
-¿Por qué demonios no me atiendes? – Se preguntó David lleno de ira
Durante todo el día, las llamadas de David fueron rechazadas por Magali, y esto lo hacía sentir muy inquieto, por eso a la hora del almuerzo decidió ir a la librería, los empleados le dijeron que Magali se había ido, quería ir
a su casa, pero su jefe lo llamó porque lo esperaban para comenzar una reunión y discutir la gestión de su departamento durante el último trimestre, esto era muy importante para obtener su ascenso a la gerencia y por eso no tuvo más opción que dejar su conversación con Magali para más tarde, se encontraba muy distraído
porque no quería perderla, sin embargo, sabía que debía darle tiempo para que se ella calmara.
-¿Magali, porque demonios no atiendes mis llamadas? – Preguntó David con mucho enojo
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 93 Episodes
Comments
LectoraPR
Obligatorio que los padres enseñen con palabras y con la acción este gran valor. ¡Reconoce y valora el tiempo de los demás, no seas HIJKLMNÑOPQ...!
2024-11-16
0