Volví el rostro para observar con enojo a Melina debido a que era muy doloroso lo que estaba haciendo, sus uñas continuaban fuertemente clavadas en mi antebrazo y por eso lo sacudí violentamente para soltarme de su agarre, no sin antes notar que me había dejado marcas de arañazos y debo admitir que este tipo de conductas tan posesivas nunca me gustaron y en muchas ocasiones le dije lo mucho que me molestaba
-Aún faltan 20 minutos – Le dije con mucho enojo
Melina ignoró mi comentario debido a que observaba con severidad a mi vecina, lo cual no comprendía por qué yo suponía que ambas no se conocían, pero comenzaba a darme cuenta de que mi esposa guardaba muchos secretos.
-¿Magali, cómo estás? – Preguntó Melina con una fingida sonrisa
Fue la primera vez que escuché el nombre de mi vecina, y me pareció muy lindo porque es un diminutivo de Margarita y existen diversas teorías sobre su origen y significado, hay autores que consideran que es de origen persa y que significa 'hija de la luz', otros que procede del hindú y que significa perla, mientras que otros afirman que es de origen griego y que hace referencia a una flor del mismo nombre, y ahora me doy cuenta de que combina muy bien con ella
-Me encuentro muy bien – Respondió Magali con frialdad
El momento era de mucha tensión y yo seguía sin comprender la hostilidad de mi esposa hacia nuestra vecina dado que desconocía el contexto
- Tenías prisa Melina\, así que debemos irnos – Finalmente dije para aliviar la tensión
Magali me observó intensamente y tuve la impresión de que quería contarme algo, pero debido a la presencia de Melina era imposible que tuviera un momento a solas y ella pudiera hacerlo.
-Regresaré cuando tenga más tiempo – Dije observando el estante de libros con nostalgia
Entre mi exigente trabajo y el tiempo que le dedicaba a mi matrimonio no podía disfrutar de mis pasatiempos, fue reconfortante cuando Magali se sonrió ampliamente porque se dio cuenta de mi gran amor por los libros.
-Si buscas alguna edición en especial puedes escribirnos al correo de la librería y hacer una solicitud – Me dijo entregándome su tarjeta de presentación
Melina intentó tomarla, pero fui más rápido y la guardé en mi bolsillo porque la verdad es que si tenía interés en encontrar unas ediciones de varios libros que me gustaban.
-¡Daniel! – Dijo Melina con impertinencia
Magali observó como se iba la curiosa pareja y frunció el ceño porque desde que David comenzó a entrenar con esa mujer cambió su forma de ser y se preguntaba si ella tenía algo que ver con lo que le estaba pasando.
-Esa mujer es muy desagradable – Dijo Katherine
Magali asintió con la cabeza y estuvo de acuerdo porque era evidente que su vecino deseaba ver algunos libros, pero su pareja fue insistente y posesiva y no le permitió hacerlo.
-No te imaginas cuanto, el problema es que las mujeres como ella son las que les gustan a los hombres – Respondió Magali con amargura
Magali recordó como desde la primera vez que la vio junto a David le pareció que estaba siendo coqueta con su esposo y se molestó mucho a pesar de que ella no era una mujer celosa y por lo general respetaba su espacio, además notaba que David es un hombre muy atractivo y siempre llamaba la atención de las mujeres, no obstante, sentía que esta mujer no tenía escrúpulos y supuso que su esposo respetaría su matrimonio, pero ahora se preguntaba si ella era la razón por la cual le propuso abrir la relación.
-jefa no estoy de acuerdo contigo, porque ese tipo de mujeres con el tiempo terminan agobiando a su pareja y es muy lamentable porque tiene un hombre muy atractivo a su lado – Suspiró Katherine
Magali asintió en señal de acuerdo porque si bien Daniel necesitaba entrenar un poco más, era un hombre muy atractivo y lo más importante es que era amable, caballeroso y daba esa sensación de que en cualquier circunstancia siempre te protegería
-Nadie sabe el bien que tiene hasta que lo pierde – Dijo Magali
Katherine se dio cuenta de la expresión de tristeza de Magali y estaba muy preocupada por ella, porque era evidente que pasaba por una crisis matrimonial y David era el centro de su universo y sospechaba que sus palabras tenían más que ver con ella misma.
-Es hora de cerrar jefa – Dijo Katherine observando la hora en su reloj
Magali y Katherine comenzaron con el proceso del cierre de la tienda y a pesar de que comenzaban a existir plataformas digitales, las cuales estaban desplazando a las tradicionales, la librería aún era un negocio muy rentable
-Nos vemos mañana – Dijo Magali
Katherine tuvo una idea para animarla porque a pesar de que Magali lo ignoraba, ella estaba muy agradecida debido a que durante su ruptura su jefa fue la única que la apoyo para mudarse de la casa de su exnovio.
-jefa que le parece si caminamos un rato por la zona comercial y nos tomamos unas cervezas – Propuso Katherine
Magali iba a negarse, pero luego recordó que no quería enfrentarse a David, así que tal vez era buena idea salir un rato, además nunca salía a menos que se tratara de fiestas corporativas
-En otras circunstancias me negaría, pero no tengo ganas de regresar a mi casa
-Por eso es que la estoy invitando – Dijo Katherine con una sonrisa
Katherine y Magali caminaban por las concurridas calles y curiosamente conversaban animadamente, Magali se dio cuenta de que era la primera vez en mucho tiempo que se sentía bien porque no tenía que preocuparse por el bienestar de otra persona
-Creí que eras cantante en una banda
-Si lo hago, pero solamente los fines de semana, por eso es que trabajo en la librería
-Supongo que es difícil pagar la renta solo con un trabajo de fin de semana
-Sueño con el día en el cual nuestra música llegue a más personas
Para Magali era algo muy aleccionador ver esa pasión que sentía Katherine, por lo que hacía a diferencia de ella cuya alma en este momento se sentía que estaba agonizando, decidieron ir a un bar karaoke y cuando les trajeron el menú, Magali se negó a beber alcohol
-Jefa tómese solo una cerveza – Dijo Katherine
Magali no era abstemia, solo que esta tarde se dio cuenta de que tenía un retraso, aunque se trataba de un par de días, y cabía la posibilidad de que era producto del estrés que sentía porque su matrimonio de siete años estaba terminando hasta que no estuviera segura no podía descartar la posibilidad.
-Creo que no es apropiado que beba alcohol en este momento
Katherine no comprendía las palabras de Magali y luego de una conversación amena, lo cual la puso de mejor humor
-¿Jefa que te parece si cantas una canción? – Preguntó Katherine
Magali se sonrió porque ella no tenía ninguna oportunidad ante Katherine, aunque le parecía una idea muy divertida
-Está bien, pero que te parece si dejas de llamarme jefa – Dijo Magali un poco animada
Magali decidió acortar distancias porque se dio cuenta de que Katherine era una persona muy agradable, las dos revisaban el catálogo y Magali señaló la canción “Holding out for a hero” de Bonnie Tyler para cantarla
-Es una buena canción – Dijo Katherine con una sonrisa
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