DIVORCIO.

CAPITULO 08

Paso una semana y no pude salir de la casa en este tiempo, José no se me despega y cuando lo hace es por corto tiempo, según él para ayudarme con mi recuperación, también ha estado insistiendo en preguntar si pude recordar la forma en la que me caí en baño, tiene miedo a que recuerde la verdad, puedo verlo en sus ojos cuando me mira.

Hago todo lo posible para soportar su presencia, pero juro que quiero ahorcarlo cuando me besa y dice amarme, cuanta hipocresía, no sé cómo pude enamorarme de un ser horrible, ya me lo decían las monjas, aléjate de la carita de ángel, son demonios disfrazados, si tan solo les hubiera hecho caso.

Hoy pienso volver a la universidad, ahora menos que nunca voy a dejar de asistir, necesito titularme antes de tiempo y gracias a mis calificaciones y los contactos de mi esposo lo podré hacer, lástima que él ni siquiera lo sabrá.

Termino de arreglarme y salgo para la universidad, José salió temprano, tenía días sin ir a la empresa y según me dijo no volverá en todo el día, me despido de la empleada y conduzco hasta la universidad donde mis amigos ya me esperan.

Tuvimos un día de clases sin problemas, Josefa y Deivis me acompañaron a una cafetería cerca, tenía una reunión con alguien antes de volver, en una mesa al fondo un hombre vestido de negro espera, tenia lentes de sol y un aspecto rudo.

- Es usted el señor Frodo.

- Si, la esperaba, me podría decir para qué requiere mis servicios.

- Es simple necesito dos cosas de usted y según me dijeron es el mejor en esto.

- De eso no hay duda señorita, soy el mejor en mi trabajo.

DOS MESES DESPUÉS.

Llego a la casa a la misma hora y la empleada me recibe, después de verificar la cena la dejo irse, subo a cambiarme y aprovecho para revisar mi correo electrónico, estoy esperando que se publiquen los resultados de mis exámenes finales, me paree increíble que allá podido terminar mi carrera en la mitad del tiempo, para el semestre que me falta presente, exámenes únicos en todas las materias.

La espera es terrible, pero sé que todo saldrá bien, me coloco algo cómodo y espero a José en la sala, aunque no sé si llegue a tiempo, tiene varios días llegando muy tarde, la verdad ya no me importa, sé que está con otra mujer, solo le pido a dios que no vuelva nunca y así me facilite las cosas.

Desde que perdí a mi hijo por su culpa mi amor por él murió, solo estoy esperando el momento indicado para irme de este lugar sin mirar atrás, juego en mi celular para pasar el tiempo y como todas estas últimas noches me llegan fotos a mi celular.

Ni siquiera me molesto en verlas, veo el reloj y pasan las 9 pm, no pienso esperar más, me sirvo la cena, como con tranquilidad y disfruto mucho el sabor de la carne, mientras lo hago José entra al comedor con una sonrisa de oreja a oreja.

— Mi amor porque no me esperaste.

— És tarde José acaso no hás visto la hora.

- Lo siento, pero tuve una reunión muy larga, pero todo salió de maravilla firme un contrato que nos dejara muy buenas ganancias.

- Me alegro, quieres que te sirva o ya comiste.

- No te preocupes, cene con el cliente, te espero arriba necesito que me hagas una maleta me voy de viaje mañana.

Dijo saliendo del comedor, como si el universo conspirara a mi favor, este viaje ayuda mucho a mis planes, podre resolverlo todo antes de lo que pensé, voy gustosa a la habitación a preparar su equipaje, no vaya a ser la de malas y se arrepienta.

- Que tipo de ropa llevaras.

- Para clima cálido, me voy a la playa a cerrar una negociación con una empresa hotelera.

- Cuantos días vas.

- Una semana, si no tuvieras clases te llevara conmigo.

- Tranquilo yo estaré muy bien.

- Gracias amor por ser tan comprensiva, siento que me saque la lotería contigo.

Respiro para no decirle lo que se merece y termine de empacar sus cosas mientras él se bañaba, lo escuche bañarse y cantar en la ducha, es la primera vez que lo escucho tan feliz, todo este tiempo estaba ciega por mis sentimientos, nunca me di cuenta de que él no me amaba, no sé si alguna vez lo hizo, aunque ya no me importa solo me quedo con los recuerdos lindos de ese gran amor que sentía por él y que le entregue sin miramientos.

Espero que salga del baño y entro yo, como todas estas noches, me demoro lo que más puedo hasta que José esté dormido, es la única forma que encontré para que no me toque, al principio utilizaba la escusa del aborto, pero con el pasar de los días se me hace más difícil evitarlo.

No deseo que me toque, no soporto sus besos en las mañanas, hago un esfuerzo para no rechazarlo, pero me repito a mi misma que pronto acabara todo, salgo del baño con cuidado de no despertarlo, pero para mi mala suerte esta despierto y esperándome completamente desnudo.

- Porque tardaste tanto, estoy deseoso de hacerte mía.

- Estoy con malestar estomacal, creo que me hizo daño la cena, digo poniéndome la mano en el abdomen.

- Por favor amor, sabes cuantos días tengo sin tocarte.

- Me siento mal, o dios otra vez, lo siento ya vengo.

Corro al baño y cierro con seguro la puerta, soy capaz de dormir aquí con tal de evitar que me toque, meto varias toallas en la bañera y me acomodo para jugar con mi teléfono al menos un par de horas, José toco a la puerta y se me ocurrió la brillante idea de poner sonidos de gases para hacer más creíble mi mentira, cosa que funciono porque dejo de insistir.

No sé en qué hora me quede dormida, pero me desperté con un dolor terrible en el cuello, salgo con cuidado y está dormido, menos mal no soportaría una hora más en el baño ya pasan de las 2, me meto con cuidado en la cama, solo espero que no sé despierte con ganas, como si adivinara sus pensamientos muy temprano en la mañana siento sus besos húmedos por todo mi cuerpo.

Intento zafar me, pero no me lo permite, con una mano me sujeta y con la otra me quita la parte baja del pijama, apreté los ojos para no verlo, ya no podía hacer más, me beso el cuello y quito mi blusa y sostén, mentiría decir que fue toda una tortura para mí, desgraciadamente mi cuerpo seguía respondiendo a sus caricias, pero gracias al cielo sabía que era la última vez.

Jugo con mis senos a su antojo un buen rato, solo me deje llevar y disfrute del acto, cuando entro en mi soltó un bífido al notar lo húmedo que estaba, tanto que salió de mí y bajo a saborear mis fluidos que salían sin control.

Dos horas más tarde me encontraba en la puerta, lo mire despidiéndose y respondí con la sonrisa más forzada que alguna vez hice, lo vi irse en un taxi y regrese a la habitación para tomar un baño, me sentía sucia, me maldigo por a ver respondido a sus caricias, froto mi cuerpo con fuerza para tratar de borrar cualquier rastro suyo y no dejo de frotar hasta que me veo la piel roja.

Salgo del baño y me pongo algo cómodo, después de comer espero la llegada de mis amigos que no tardan en llegar, ya no tenemos que asistir a la universidad, solo los que tienen nivelaciones se quedan hasta fin de mes, pasamos los tres al despacho de José y le pido a la empleada que nos traiga una merienda, cierro bien todo para evitar que nos escuchen.

- Cuéntame Deivis que te dijo tu padre.

- Te tengo buenas noticias ya salió tu divorció, en dos días te entregan la sentencia.

Grito de emoción y los abrazo a ambos, nunca me había sentido tan feliz.

- Pero aun falta que lo notifiquen, no podemos cantar victoria, dijo Josefa.

- Tranquila, voy a recibir las notificaciones igual que la vez pasada, además que esta de viaje y su secretaria sigue de nuestro lado.

- Ahora que tenemos tiempo dime como fue que la convenciste de ayudarte, dijo Deivis.

- Sencillo, le conté todo lo que me hizo su jefe y le ofrecí una buena cantidad, ella acepto gustosa porque se jubila en unos meses y no podrán hacerle nada, además me dijo que ella paso lo mismo.

- Igual no te puedes confiar estando tan cerca, dijo Josefa.

Hablamos por horas y me ayudaron a terminar de organizar mis planes, revisamos juntos los resultados de los exámenes comprobando que nos fue super, ya solo tenia que hacer un tramite para titularme y era un logro más, para celebrar abrimos una botella de vino, los tres recibiríamos el titulo antes.

Los despedí después de cenar juntos, durante todo este tiempo José no me llamo, solo envió un mensaje para avisarme que llego a su destino y que estaría ocupado, no me moleste en contestar, solo tome un baño antes de dormir presiento que esta noche dormiré como nunca.

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