8.3

Richy lo siguió a su ritmo, preguntándose si aquel Seth sonriente y entusiasta era el mismo Seth que conocía. Llegó a la sala y se topó con el mencionado; se estiraba y preparaba para el combate, pero no había agarrado su espada. Eso llamó la atención de Richy.

—Debes tomar la-

—Esta vez no —interrumpió Seth, realmente no tenía ni idea de lo que estaba diciendo, aunque algo en su mente le dejaba en claro que no hacía falta.

El moreno frunció el entrecejo. Creía que el chico le estaba jugando una broma, así que, decidió no esperar más y tomó posición de ataque. Al ser un mago de tierra, su combate era cuerpo a cuerpo, por lo que no utilizaba ningún tipo de arma. Bajó la cintura, flexionó las rodillas y, con gran velocidad, corrió a Seth, quien entró en pánico.

—¡No, espera! —gritó Seth con desesperación. Richy, rápidamente, cargó el golpe y se apresuró a encestar, pero algo lo detuvo. Seth, del pánico que sintió al verse totalmente indefenso al ataque del mago, se había cubierto con sus brazos, apretando fuertemente los ojos cerrados, sin embargo, en ese temor, se encontró expulsando un extraño brillo dorado que se transformó en un escudo semitransparente que lo protegió. Richy terminó golpeando aquel escudo y retrocedió sin pensarlo al notar que era muy resistente—. ¿Q-qué está pasándome?

Seth se asustó de sí mismo al sentir que cambiaba. La sensación de picor en su mano lo hizo mirarse. No supo qué hacer, cuándo un fulgor dorado se expulsó de su brazo, brillaba tanto que el chico no lograba discernir qué sucedía. De repente, sintió un objeto que rozaba su mano y se materializaba de aquel fulgor.

El joven la observó con asombro, sin poder creer lo que estaba viendo. Era una espada dorada, con una hoja afilada y brillante que parecía reflejar toda la luz de la habitación. Era hermosa y mágica a la vez. Sintiendo una extraña energía correr por todo su cuerpo, experimentó una extraña sensación en su interior, como si, de alguna manera, estuviera conectado con la espada. La agarró con fuerza y sintió que su energía se fusionaba con la del arma. Era como si la espada fuera una extensión de su propio cuerpo, y supo en ese momento que algo le había pasado.

—¿Qué? —murmuró perplejo Richy. Era verdad que le iba a enseñar a usar magia, no magia pura, pero un tipo de magia antigua, la cual no requería de potencial mágico para poder usarse. No obstante, Richy jamás creyó que Seth tuviese la capacidad de utilizar magia pura como la que estaba manifestando. Bueno, tampoco pienso que sea magia pura. Preocupó Richy. Este tipo de magia no era efectiva para materializar un arma, sin embargo, Seth tenía una en su mano y la había manifestado muy bien.

Richy, a pesar del sinfín de preguntas que tenía, estaba orgulloso, pues, al menos, Seth estaba aprendiendo algo. El moreno rio y volvió a atacar.

—¡Muy bien, Seth! —felicitó Richy, dándole uno que otro golpe, pero estos eran esquivados o bloqueados. Era verdad, Seth se movía bien, aunque parecía nervioso. El pelirrojo no contaba con la experiencia de un soldado como Richy—. ¡Lo haces bien, pero no tan bien! —Se carcajeó.

—¡Richy, no sé qué está pasando, detente! —alarmó el pelirrojo, totalmente asustado. Su forma de esquivar y procesar las cosas no era algo propio de él.

Richy se detuvo un momento, para luego detener los incesantes ataques. Notó el miedo en Seth y comprendió que el chico no estaba haciendo nada de eso por gusto. Entonces, se agachó velozmente para golpear los pies del pelirrojo, haciendo que este cayera de espaldas al suelo, soltando su arma.

—¿Qué es lo que pasa contigo? —reprendió Richy. Seth se quedó perplejo en el piso, no tenía intenciones de levantarse y sus ojos parecían intentar procesar todo lo que había hecho.

El joven miró fijamente sus manos, temblorosas por la emoción y el miedo. Se había dado cuenta de que era capaz de cosas que nunca antes había imaginado, cosas que estaban más allá de la comprensión humana. Su poder era abrumador, y lo asustaba hasta el punto de no querer usarlo nunca más. ¿Su poder? No sabía si podía llamarlo así, no cuando parecía provenir de algo externo a él.

Intentó respirar profundamente para calmarse, pero cada vez que pensaba en lo que podía hacer con ese poder, su corazón latía con más fuerza. No sabía cómo controlarlo, y eso lo hacía sentir vulnerable y expuesto.

Finalmente, cerró los ojos y trató de concentrarse. Quería entender lo que estaba pasando, quería aprender a controlar ese poder y emplearlo de manera efectiva. Aunque seguía sintiendo un poco de miedo, también se dio cuenta de que había algo emocionante en todo eso, algo que le hacía sentir vivo y lleno de posibilidades. De repente, su cabeza dolió una vez más. Le sucedía muy seguido.

Seth no supo exactamente qué era lo que lo orilló a tomar el pie de Richy y jalarlo hacia atrás, logrando que el moreno se estampara con el suelo, desparramando la arena. Pero debía pensarlo luego, ya que Richy lo miró incrédulo. Se puso de pie rápidamente y recogió la espada, como diciéndole al mago que estaba listo para luchar nuevamente.

¡En serio que no sé lo que hago!

Richy se levantó incrédulo, se posicionó y empezó a corretear a Seth. Por suerte, este último, esquivaba y bloqueaba fácilmente los ataques directos del morocho; un golpe al rostro, al abdomen y a las costillas. Estaban luchando en igualdad y Richy estaba impresionado y orgulloso, los frutos del arduo entrenamiento se mostraban ante sus ojos; Seth saltando ágilmente para esquivar sus ataques o simplemente en aquella arma de dudosa procedencia.

Un golpe más y, Richy, notó el cansancio en Seth. Por supuesto que él ni siquiera estaba agitado, pero eso era porque tenía mucha más experiencia en combate que el menor. El pelirrojo no controlaba bien su respiración y tampoco relajaba constantemente sus músculos, algo muy propio del estilo Helgedomen. El moreno pudo ver que el estilo con el que luchaba Seth era diferente al que él le había enseñado; el estilo Bennett. Este estilo era de Thomas, sin embargo, Richy lo usaba en casos especiales y creía que el chico aprendería mejor si era un estilo propio de su padre.

Al final, Seth, por el cansancio, tambaleó, ganándose un puñetazo en el dorso, cerca de las costillas, que lo obligaron a desmaterializar su arma y recargase sobre sí. Richy se detuvo al verlo así. Tal vez fue demasiado, pensó, bajando la guardia. El chico estaba listo para volver a materializar su espada, pero el sonido de unos pasos lo detuvieron. Era Thomas.

—Es suficiente. Vayan a ducharse que el almuerzo estará listo enseguida —comentó sereno el rubio mientras paseaba su mirada por la habitación. Notó algo, un poder nuevo, diferente y extraño. Rápidamente, miró a Seth, su aura era diferente, pero débil—. ¿Qué sucede aquí? —inquirió, frunciendo el ceño mientras caminaba hacia el centro del lugar.

—No tengo idea, pero tu mocoso puede materializar armas —respondió Richy. Las palabras dichas sorprendieron a Thomas y atisbó a Seth, quien jadeaba y se tambaleaba, intentando recuperar el aliento—. Lo que es más extraño, es que hasta hace una hora no sabía ni moverse correctamente, pero, ¡oh, sorpresa! Una siesta reparadora le dieron conocimientos en combate —comentaba, moviéndose por toda la habitación—. Puede luchar conmigo cuerpo a cuerpo, Thomas… ni tú puedes hacer eso. No digo que sea malo, pero es extraño. Además, puedo asegurarte que ni Seth sabe qué paso, estaba muy asustado —agregó, arreglando unos mechones molestos que caían en su frente.

—¿Se equipara contigo en combate cuerpo a cuerpo? —preguntó Thomas, era demasiado increíble para ser cierto. Era muy sabido que él, siendo un usuario de magia para combate a distancia, no podía hacerle frente a un tipo como Richy, quien era usuario de magia para combate cuerpo a cuerpo, sin embargo, Seth, alguien quien nunca había peleado, logró, en algún momento, estar a la altura de Richy y todos sus trucos y técnicas propias de su estilo.

—Sí y su manera de pelear es bastante peculiar. Como te digo, estaba asustado, ni él era capaz de procesar todo —contestó Richy.

Thomas entendió que debía conversar con Seth sobre ese entrenamiento. Estaba algo temeroso de la razón que podía esconderse en su tumulto de pensamientos.

—Ah… —Suspiró Seth, ganándose la atención de los presentes. Thomas dejó el tema por ahora y mandó al chico a que se bañara y fuera a almorzar. Luego podría descansar. Lo mismo fue para Richy, así que, todos salieron de la sala con un millón de preguntas sin responder.

Magos de tierra: Magos elementales (capítulo #5). Su magia es el control parcial o total del elemento tierra. Suelen luchar cuerpo a cuerpo. También, muestran una fuerza descomunal, al igual que un temperamento difícil de controlar.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***